Hacia una Escocia independiente

La crisis de la covid-19 nos ha recordado la humanidad que todos compartimos al mismo tiempo que los pa¨ªses de todo el mundo hacen frente al gran reto com¨²n de proteger la seguridad de las personas. Gracias al desarrollo de las vacunas, que en s¨ª mismo ha supuesto un gran proyecto de colaboraci¨®n internacional, ahora podemos anticipar que llegar¨¢n d¨ªas mejores. Y, conforme empezamos el proceso de reconstruir nuestras econom¨ªas y sociedades, ese esp¨ªritu colaborativo ser¨¢ m¨¢s importante que nunca.

Desafortunadamente, los escoceses nos encontramos, en este momento, en primera l¨ªnea de un ...

La crisis de la covid-19 nos ha recordado la humanidad que todos compartimos al mismo tiempo que los pa¨ªses de todo el mundo hacen frente al gran reto com¨²n de proteger la seguridad de las personas. Gracias al desarrollo de las vacunas, que en s¨ª mismo ha supuesto un gran proyecto de colaboraci¨®n internacional, ahora podemos anticipar que llegar¨¢n d¨ªas mejores. Y, conforme empezamos el proceso de reconstruir nuestras econom¨ªas y sociedades, ese esp¨ªritu colaborativo ser¨¢ m¨¢s importante que nunca.

Desafortunadamente, los escoceses nos encontramos, en este momento, en primera l¨ªnea de un proyecto completamente diferente e impulsado por valores opuestos: el Brexit. La gran mayor¨ªa de los ciudadanos de Escocia votaron que quer¨ªan seguir formando parte de la UE. Estos resultados no son para nada sorprendentes. Los valores de la fundaci¨®n de la UE son valores que Escocia comparte: la dignidad humana, la igualdad, el Estado de derecho y el respeto de los derechos humanos.

M¨¢s de 230.000 personas de todas partes de Europa han hecho de Escocia su hogar. Ellos forman parte de lo que somos, son nuestros amigos y familiares, y no cabe duda de que queremos que se queden. Escocia valora realmente la relaci¨®n con Espa?a y la contribuci¨®n que su di¨¢spora hace en la econom¨ªa y sociedad escocesas. Y, a su vez, creo que Escocia ha contribuido considerablemente a los objetivos europeos en general. Si analizamos los grandes retos a los que hace frente la UE, adem¨¢s de la covid-19, como pueden ser la emergencia clim¨¢tica y el desarrollo de una econom¨ªa del ¡°bienestar¡± mucho m¨¢s inclusiva, Escocia tiene mucho que ofrecer. Por ejemplo, en lo que respecta a los retos clim¨¢ticos, disponemos aproximadamente de un cuarto del potencial maremotriz y e¨®lico mar¨ªtimo de Europa.

Tras el refer¨¦ndum del Brexit en 2016, sugerimos al Gobierno brit¨¢nico el compromiso de un ¡°Brexit blando¡±, pero esta opci¨®n se deneg¨® de entrada. Actualmente hacemos frente a un Brexit duro en contra de nuestra voluntad, en uno de los peores momentos posibles: en mitad de una pandemia y de una recesi¨®n econ¨®mica. Esto causar¨¢ disrupciones en las nuevas fronteras a corto y largo plazo. Nuestros ciudadanos estar¨¢n menos protegidos y sus derechos a trabajar, estudiar y vivir en otras partes de Europa se ver¨¢n restringidos.

Escocia, como todas las naciones, es ¨²nica. Lo mismo se puede decir acerca de nuestras circunstancias constitucionales. El Reino Unido es una uni¨®n voluntaria de pa¨ªses, en los que Escocia tiene su propio y distinto sistema educativo y jur¨ªdico, al igual que un Gobierno y Parlamento responsables de una serie de asuntos nacionales, como la sanidad y el medio ambiente; pero, como el Brexit ha puesto de manifiesto, no est¨¢n en sus manos los asuntos internacionales y europeos. Nos sentimos c¨®modos con m¨²ltiples identidades y el resto de pa¨ªses del Reino Unido no solo ser¨¢n nuestros vecinos m¨¢s cercanos, sino que siempre seguir¨¢n siendo nuestros amigos m¨¢s cercanos.

No obstante, los Gobiernos brit¨¢nicos han conducido a Escocia por una direcci¨®n equivocada durante demasiado tiempo, lo cual ha tenido como ¨²ltima consecuencia el Brexit, y esto supone una amenaza para los internacionalistas, que comparten los valores europeos que tantas personas apoyan en Escocia. Por lo tanto, no nos sorprende que una mayor¨ªa consistente de personas en Escocia afirmen actualmente que est¨¢n a favor de que Escocia sea un pa¨ªs independiente. Nos comprometemos a emprender un camino legal y constitucional para llegar a ser un Estado independiente.

Como miembro independiente de la Uni¨®n Europea, Escocia ser¨ªa un socio que fomentar¨ªa relaciones no solo para fortalecer la econom¨ªa y una sociedad m¨¢s justa, sino tambi¨¦n para que haya un entendimiento entre la UE y el Reino Unido. Un n¨²mero cada vez mayor de personas en Escocia considera que nuestras aspiraciones se podr¨ªan cumplir mejor a trav¨¦s de una continua contribuci¨®n a los compromisos compartidos que representa la UE. Debido al Brexit, solo podremos conseguirlo como un Estado miembro independiente de propio derecho.

Hemos formado parta de la familia de naciones de la Uni¨®n Europea durante casi 50 a?os. No nos gustar¨ªa dejar de formar parte de ella y esperamos volver a unirnos pronto como socio igualitario a medida que hacemos frente a las oportunidades y retos para construir un futuro unidos.

Nicola Sturgeon es la ministra principal del Gobierno aut¨®nomo de Escocia.