?Y si Putin ya hubiera perdido?

En las guerras como todo en la vida a veces se pierde a¨²n creyendo haber ganado. Es lo que est¨¢ ocurriendo quiz¨¢s en este momento en el conflicto de Rusia contra Ucrania, que est¨¢ cargado de sorpresas y convulsionando al planeta. El que se cree el nuevo zar ruso, due?o del mundo, capaz de aterrorizar al planeta se est¨¢ revelando, a pesar de toda su fuerza militar con los pies de barro. Y se ha visto obligado a negociar con los ucranios, ...

En las guerras como todo en la vida a veces se pierde a¨²n creyendo haber ganado. Es lo que est¨¢ ocurriendo quiz¨¢s en este momento en el conflicto de Rusia contra Ucrania, que est¨¢ cargado de sorpresas y convulsionando al planeta. El que se cree el nuevo zar ruso, due?o del mundo, capaz de aterrorizar al planeta se est¨¢ revelando, a pesar de toda su fuerza militar con los pies de barro. Y se ha visto obligado a negociar con los ucranios, a quienes pensaba comerse en pocos d¨ªas y lleg¨® a amenazar con un conflicto at¨®mico.

Ni Ucrania ni el mundo esta vez se han inclinado ante la prepotencia de quien se cree m¨¢s fuerte que nadie. Ni siquiera personajes que hasta ayer se dec¨ªan los amigos personales de Vlad¨ªmir Putin, como Trump en Estados Unidos o Jair Bolsonaro en Brasil, se han atrevido a salir en p¨²blico a defender la absurda guerra lanzada por el l¨ªder ruso.

En Brasil hasta la izquierda, que quiso estar al lado de Mosc¨² contra los Estados Unidos, ech¨® marcha atr¨¢s y Lula se vi¨® costre?ido a condenar la invasi¨®n rusa. La prensa brasile?a se ha colocado un¨¢nime del lado de Ucrania y hasta la derecha m¨¢s radical se ha revelado prudente.

Esa derrota de Putin ya constatada desde un punto de vista psicol¨®gico mundial podr¨ªa ser un importante term¨®metro para medir la capacidad de la gente de apostar por la paz m¨¢s que por los conflictos, convencida como est¨¢ que la violencia crea solo miseria y desgarros.

A¨²n sumergido en la guerra contra la pandemia, de la que parece estar saliendo, el mundo no se ha revelado contra nuevos conflictos que puedan complicar m¨¢s a¨²n su existencia. S¨ª, el mundo est¨¢ apostando por la paz y a favor de la resistencia contra las guerras. Es posible que desde Ucrania, gobernada por el antiguo actor c¨®mico Volod¨ªmir Zelenski, que est¨¢ siendo una revelaci¨®n de sensatez y de resistencia a la tiran¨ªa en uno de los momentos m¨¢s cr¨ªticos para Europa despu¨¦s de la Segunda Guerra mundial, acaben llegando nuevos deseos de paz y de seguridad para el mundo.

Es cierto que las guerras se sabe como comienzan y no como acaban, pero sin dejarse arrastrar por optimismos absurdos y peligrosos, lo cierto es que est¨¢ quedando evidente que Putin no va a ganar esta guerra y que Europa podr¨¢ salir de ella m¨¢s robustecida, al mismo tiempo que una cierta izquierda trasnochada est¨¢ revelando que contin¨²a anclada en sus viejos dogmas de estar contra los Estados Unidos a cualquier precio.

Hay momentos en la historia en los que se acaba escribiendo derecho con renglones torcidos, como dec¨ªa el viejo adagio. Yo, que ya viv¨ª de ni?o en mi carne la sangrienta guerra civil espa?ola y toda la miseria y retraso civilizatorio que arrastr¨®, quiero pensar, y ojal¨¢ no me equivoque, que esta guerra in¨²til de Putin contra Ucrania, que puede acabar convulsionando a toda Europa y m¨¢s all¨¢, pueda llevar a repensar, parad¨®jicamente, un mundo m¨¢s seguro y en paz.