Dos genocidios
La operaci¨®n de aniquilamiento de Ucrania constituy¨® el n¨²cleo de la ¡°operaci¨®n militar especial¡±, incluidos cr¨ªmenes en cadena contra la humanidad como el de Bucha
Hace unos d¨ªas, Joe Biden sac¨® la l¨®gica consecuencia de su valoraci¨®n del ataque de Putin a Ucrania como ¡°criminal¡± y de su aversi¨®n a las grandes matanzas del siglo XX. Calific¨® cuanto sucede en Ucrania, como anta?o en Armenia, de genocidio. A?adi¨® una precisi¨®n: se i...
Hace unos d¨ªas, Joe Biden sac¨® la l¨®gica consecuencia de su valoraci¨®n del ataque de Putin a Ucrania como ¡°criminal¡± y de su aversi¨®n a las grandes matanzas del siglo XX. Calific¨® cuanto sucede en Ucrania, como anta?o en Armenia, de genocidio. A?adi¨® una precisi¨®n: se intentaba borrar la idea de una identidad ucrania. El presidente americano segu¨ªa fiel al concepto de genocidio, creado por Raphael Lemkin. No se trata solo de una sucesi¨®n de ¡°atrocidades¡± individuales, cometidas por responsables de ¡°cr¨ªmenes de guerra¡±, destinados al castigo ¡ªEstatuto de Roma de 1998¡ª, sino ante un proceso colectivo, tanto desde el punto de vista del genocida como desde la v¨ªctima. Cr¨ªmenes de guerra y cr¨ªmenes contra la humanidad pueden formar parte de la ejecuci¨®n de un genocidio, pero en s¨ª mismos carecen de su dimensi¨®n finalista. Bush Jr. cometi¨® sin duda un crimen contra la humanidad al invadir Irak, pero no buscaba exterminar al pueblo invadido; fusilar como rebeldes a los oficiales republicanos era un crimen de guerra, que en este caso s¨ª formaba parte del genocidio pensado y dirigido por Franco.
Atendiendo a los criterios de Lemkin, la guerra de Espa?a fue un genocidio: Franco y sus c¨®mplices no pretendieron solo un cambio de r¨¦gimen, sino una ¡°operaci¨®n quir¨²rgica¡± ¡ªFranco dixit, noviembre del 35¡ª para extirpar f¨ªsica, pol¨ªtica y culturalmente a la Antiespa?a del cuerpo nacional. Bien que lo llevaron a cabo, desde el manique¨ªsmo y la deshumanizaci¨®n propios del miles gloriosus africanista. Todo genocidio requiere esa base ideol¨®gica de un ¡°plan coordinado¡± para organizar una conspiraci¨®n preparatoria del ataque. Tambi¨¦n aqu¨ª la conjura militar precedi¨® al levantamiento de julio, orientado de inmediato al exterminio del otro; siendo esta su finalidad, subsisti¨® mucho m¨¢s all¨¢ del fin de la guerra.
Reencontramos en la agresi¨®n a Ucrania esas cuatro fases del proceso de exterminio, observables asimismo en los antecedentes armenio y jud¨ªo. Putin y sus turiferarios forjaron previamente una mitolog¨ªa contra la traici¨®n de los europe¨ªstas ucranios, pues Rusia y Ucrania son un pueblo. Por eso, restaurar dicha unidad constituye ¡°un objetivo sagrado¡±, que, como en la Espa?a del 36, convierte el amor a Ucrania en siembra de su destrucci¨®n y muerte. La conspiraci¨®n tuvo lugar aqu¨ª por v¨ªa del cerco militar, mendazmente sin prop¨®sito de invadir. Y la operaci¨®n de aniquilamiento de Ucrania constituy¨® el n¨²cleo de la ¡°operaci¨®n militar especial¡±, incluidos cr¨ªmenes en cadena contra la humanidad como el de Bucha. Para culminar con la inmediata ¡°rusificaci¨®n¡± de las zonas ocupadas. Genocidio de manual. Biden acert¨® de pleno. Lemkin sentenci¨® a Hitler, ¡°jefe de Estado y criminal com¨²n¡±. Lavrov une los hilos al acusar a Zelenski de tener como Hitler or¨ªgenes jud¨ªos.