Harta de los negacionistas
Los lectores opinan sobre quienes consideran que no existe el cambio clim¨¢tico, los incendios forestales, el concepto de responsabilidad y los resultados de los viajes oficiales de los pol¨ªticos
Estoy en la terraza de mi casa en una playa de Alicante con demasiado fr¨ªo para esta ¨¦poca del a?o cuando hace cuatro d¨ªas nos asfixi¨¢bamos debido a la segunda ola de calor que ya hemos padecido en mayo y junio. Estoy triste y decepcionada porque sigue habiendo tantos negacionistas que no paran de decir que estos son solamente ¡°ciclos¡± y que se niegan a...
Estoy en la terraza de mi casa en una playa de Alicante con demasiado fr¨ªo para esta ¨¦poca del a?o cuando hace cuatro d¨ªas nos asfixi¨¢bamos debido a la segunda ola de calor que ya hemos padecido en mayo y junio. Estoy triste y decepcionada porque sigue habiendo tantos negacionistas que no paran de decir que estos son solamente ¡°ciclos¡± y que se niegan a aceptar el calentamiento global por puro ego¨ªsmo. Aceptarlo no entra en sus planes porque implicar¨ªa bajar su nivel de vida: andar, ir en bici o en transporte p¨²blico, usar menos el coche o adquirir un veh¨ªculo h¨ªbrido o el¨¦ctrico, bajar el aire acondicionado o la calefacci¨®n unos grados o prescindir de ello visti¨¦ndose de acorde, viajar en tren o autobuses que no contaminan en vez de aviones, comer menos carne y un sinf¨ªn de otros sacrificios que ayudar¨ªan a salvar a nuestro tan castigado planeta. La naturaleza est¨¢ abatida y si no ponemos de nuestra parte inmediatamente, quiz¨¢s se enfade de verdad y nos engulla en forma de un tsunami tremendo. ?Socorro!
Charlotte Stern Barkerding. Murcia
La responsabilidad
Cada d¨ªa observo una sociedad en la que cuando cometemos un error es casi imposible encontrar quien asuma su responsabilidad. M¨¢s veces de las que me gustar¨ªa me hallo en situaciones personales, profesionales o pol¨ªticas en las que la responsabilidad siempre es de otro. ?Tan dif¨ªcil es asumir que podemos cometer un error? Nadie es perfecto. Cuando se asume un error, ?se alaba extraordinariamente! Tiendo a pensar que es por orgullo, por no asumir que somos seres fr¨¢giles. Nos creemos que somos divinos. Y aqu¨ª cometemos tambi¨¦n un error y del que nadie tampoco se ha responsabilizado.
Patricia Gonz¨¢lez G¨®mez. Madrid
Almacenes de llamas
No son bosques, son almacenes de llamas esperando a que les abramos las puertas. Todas esas repoblaciones de pino, tan densas y sin cuidar en 20 o 30 a?os, no nos preguntan si su destino ser¨¢ el de la sierra de la Culebra sino cu¨¢ndo. En Espa?a tenemos hect¨¢reas y hect¨¢reas que, adem¨¢s, podr¨ªamos convertir en almacenes de empleo y sostenibilidad. Un rayo que cae en mal sitio puede ser mala suerte. Todo lo dem¨¢s, antes y despu¨¦s, es negligencia, desidia, falta de ideas, de proyecto y de voluntad pol¨ªtica.
Ignacio ?lvarez-Borr¨¢s Feijo¨®. Madrid
Resultados
Me dijo el exministro de Asuntos Exteriores Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Margallo que hab¨ªa viajado durante su tiempo en el cargo el equivalente a 16 vueltas al mundo. Me falt¨® preguntarle por los resultados de su esfuerzo. Alguno sin duda habr¨ªa. Pero viene al caso el dato ante la visita de Isabel D¨ªaz Ayuso a Miami. Estar¨ªa bien que antes informase sobre los resultados de su visita a Nueva York, donde en la Hispanic Society mantuvo una reuni¨®n tambi¨¦n buscando inversores, de la que una fotograf¨ªa dio buena cuenta. Creo que en temas de comercio exterior ser¨ªa deseable una acci¨®n conjunta, soportada por las empresas con capacidad para conseguir resultados. Acciones individuales pueden llamar la atenci¨®n de los medios, pero creo que ninguna empresa espa?ola de las que con ¨¦xito est¨¢n presentes en pa¨ªses importantes, ha necesitado nunca que el presidente de su Comunidad les preparara el terreno.
Miguel Teixidor de Otto. J¨¢vea (Alicante)