El invierno se acerca
Putin despliega distintas formas de presi¨®n para debilitar a Europa tras haber estabilizado el frente de Donb¨¢s
Una vez estabilizado el frente de Donb¨¢s, la regi¨®n fronteriza pr¨¢cticamente controlada por entero por Rusia, se atisba el nuevo movimiento de Mosc¨², ya denunciado desde la Casa Blanca, de una pr¨®xima anexi¨®n en septiembre del territorio conquistado, las dos rep¨²blicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk, como nuevas provincias rusas. Tal medida, un atentado al derecho internacional del mismo calibre que ...
Una vez estabilizado el frente de Donb¨¢s, la regi¨®n fronteriza pr¨¢cticamente controlada por entero por Rusia, se atisba el nuevo movimiento de Mosc¨², ya denunciado desde la Casa Blanca, de una pr¨®xima anexi¨®n en septiembre del territorio conquistado, las dos rep¨²blicas autoproclamadas de Donetsk y Lugansk, como nuevas provincias rusas. Tal medida, un atentado al derecho internacional del mismo calibre que la anexi¨®n de Crimea en 2014, suscita una doble conjetura, como se?al de un prop¨®sito negociador a partir de las posiciones conquistadas y como base para desenfundar de nuevo la amenaza nuclear para evitar su recuperaci¨®n por parte de Ucrania, con la excusa de un peligro existencial sobre territorio ruso.
La principal palanca de Vlad¨ªmir Putin para la eventualidad de una negociaci¨®n radica en el gas y en el petr¨®leo, instrumentos con los que pretende ablandar las posiciones de los pa¨ªses europeos dependientes del suministro. Las maniobras de reparaci¨®n del gasoducto Nord Stream y el juego amenazador de cerrar el grifo no tienen otra funci¨®n que despertar el apetito negociador de los europeos ante la eventualidad de un duro invierno en los hogares y todav¨ªa m¨¢s duro en las empresas, especialmente alemanas, que podr¨ªan arrastrar a la recesi¨®n al conjunto de la econom¨ªa europea. Es en este contexto en el que se debe entender la propuesta de ahorro energ¨¦tico de la Comisi¨®n Europea de reducir el consumo en un 15% por parte de cada uno de los pa¨ªses socios, y en caso de que no sea suficiente, la introducci¨®n de un reparto obligatorio, a pesar de que pueda exacerbar las diferencias entre algunos pa¨ªses.
Putin va a jugar con estas contradicciones para dividir a los europeos, como lo ha hecho ya con los ucranios. La crisis pol¨ªtica en Italia, trascendental para Europa, o la ca¨ªda de Boris Johnson en el Reino Unido son otros elementos de los que puede servirse Mosc¨². La purga efectuada por el presidente Volod¨ªmir Zelenski en los servicios secretos y en la Fiscal¨ªa, bajo graves acusaciones de espionaje en favor de Rusia, tiene mucho que ver con la dificultad de compaginar las posiciones m¨¢s negociadoras con la defensa militar sin cuartel ante la invasi¨®n, aunque no se puede excluir tambi¨¦n la directa infiltraci¨®n de Mosc¨². Tambi¨¦n el anuncio de una incipiente contraofensiva ucrania para reconquistar el territorio perdido alrededor de Jers¨®n pretende responder a la p¨¦rdida de las ciudades clave del Donb¨¢s que son Severodonetsk y Lisichansk. Son mensajes dirigidos a los aliados europeos para evitar una negociaci¨®n que parta de la concesi¨®n previa a Rusia del territorio conquistado desde 2014 hasta hoy.
La ofensiva diplom¨¢tica de Putin, con su viaje a Teher¨¢n, el primero que realiza a territorio exterior del antiguo imperio sovi¨¦tico desde que empez¨® la guerra, trabaja tambi¨¦n en la misma direcci¨®n negociadora. Bajo la f¨®rmula del proceso de Astan¨¢, dirigida a buscar la paz en Siria, el presidente ruso ha obtenido la solidaridad m¨¢s rotunda del ayatol¨¢ Al¨ª Jamenei, el l¨ªder supremo de la revoluci¨®n isl¨¢mica iran¨ª, y ha empezado a negociar con Recep Tayyip Erdogan la salida del trigo ucranio, la otra arma econ¨®mica globalizada con la que el Kremlin pretende presionar sobre Ucrania y sus aliados. Si en un primer momento Putin parece buscar el desbloqueo del trigo almacenado, que le permitir¨ªa presentarse como un l¨ªder responsable y recabar luego la solidaridad diplom¨¢tica de los pa¨ªses del sur global, no est¨¢ en ning¨²n caso descartado que, en caso de nuevos fracasos militares, sus amenazas lleguen a traducirse en hambrunas y movimientos de poblaci¨®n dirigidos hacia Europa que compliquen todav¨ªa m¨¢s el duro invierno que se acerca.