Becas comedor
Un porcentaje significativo de la poblaci¨®n m¨¢s necesitada sigue sin acceso a ayudas sociales vitales
En un contexto de crisis social y subida brusca de la inflaci¨®n, en que muchas familias han de elegir entre comer o calentarse, sorprende que solo uno de cada diez escolares tenga acceso a una beca comedor. En concreto, se trata del 11,2% de los ni?os y ni?as de educaci¨®n obligatoria, cuando el porcentaje de ni?os que viven en situaci¨®n de pobreza alcanza el 27,4%, seg¨²n Save the Children. Eso indica que el programa de becas comedor, gestionado de forma centralizada por autonom¨ªas y ayuntamientos y casi siempre p...
En un contexto de crisis social y subida brusca de la inflaci¨®n, en que muchas familias han de elegir entre comer o calentarse, sorprende que solo uno de cada diez escolares tenga acceso a una beca comedor. En concreto, se trata del 11,2% de los ni?os y ni?as de educaci¨®n obligatoria, cuando el porcentaje de ni?os que viven en situaci¨®n de pobreza alcanza el 27,4%, seg¨²n Save the Children. Eso indica que el programa de becas comedor, gestionado de forma centralizada por autonom¨ªas y ayuntamientos y casi siempre por v¨ªa telem¨¢tica, no est¨¢ actuando en la medida en que debiera como amortiguador de la desigualdad. Lo m¨¢s grave es que este recurso vital para muchos ni?os ni siquiera llega a todas las familias que m¨¢s lo necesitan y que cumplen todos los requisitos de acceso.
El dato que ha encendido las alarmas lo ha proporcionado la ONG Educo a trav¨¦s de una encuesta a m¨¢s de 2.000 hogares con ni?os que cursan educaci¨®n primaria. Seg¨²n este estudio, el 13,5% de las familias de renta baja con derecho a beneficiarse de una beca comedor no llega siquiera a pedirla porque no sabe c¨®mo hacerlo o desconoce que existe. Que eso ocurra con una ayuda tan b¨¢sica y que lleva tantos a?os implantada revela que la brecha cultural sigue siendo una barrera no solo para la igualdad de oportunidades sino incluso para poder acceder a los programas de ayuda social. Del 30,3% de las familias encuestadas que hab¨ªa solicitado una beca, solo la hab¨ªa obtenido el 54,8%. Y tres de cada cuatro de las solicitudes denegadas fue por superar el nivel m¨¢ximo de renta exigido.
En la actual configuraci¨®n de las becas, las rentas altas se benefician en mayor medida que las bajas. Entre las familias con m¨¢s recursos, la mitad utilizan el comedor escolar, mientras en las de renta baja, el porcentaje cae hasta el 36%. Hay una franja de ni?os que comen en casa y sin beca porque no cumplen los requisitos de renta exigidos o no conocen que existe o no saben c¨®mo tramitarla. Todo indica que los procedimientos de acceso a las ayudas y los baremos de exclusi¨®n por renta no se ajustan ya a la realidad social del pa¨ªs y deber¨ªan revisarse.