La econom¨ªa como bandera

Siempre que aparece en Espa?a una crisis econ¨®mica, parece que los espa?oles miran al Partido Popular. La fama de que son buenos gestores no es una imagen que se haya creado como consecuencia de una gesti¨®n real, sino m¨¢s bien ha sido producto de una magn¨ªfica campa?a de marketing, plagada de falsedades y muy alejadas de la realidad. Pero esa creencia empieza a desmontarse. Ha tenido que venir un Gobierno de coalici¨®n de izquierdas, y ...

Siempre que aparece en Espa?a una crisis econ¨®mica, parece que los espa?oles miran al Partido Popular. La fama de que son buenos gestores no es una imagen que se haya creado como consecuencia de una gesti¨®n real, sino m¨¢s bien ha sido producto de una magn¨ªfica campa?a de marketing, plagada de falsedades y muy alejadas de la realidad. Pero esa creencia empieza a desmontarse. Ha tenido que venir un Gobierno de coalici¨®n de izquierdas, y poner en pr¨¢ctica una econom¨ªa expansiva, mirando a los ciudadanos y de forma muy especial a los m¨¢s vulnerables para demostrar que el mito de que el PP sabe gestionar la econom¨ªa era una aut¨¦ntica falacia. Ya no hablan tanto de econom¨ªa. As¨ª, no les queda otra opci¨®n que recurrir a las ¡°amistades de Pedro S¨¢nchez¡±.

Julio Garc¨ªa-Casarrubios Sainz. Valdepe?as (Ciudad Real)

Carta a los Reyes

La sociedad de consumo tambi¨¦n se consume a s¨ª misma. El deseo de poseer cosas materiales nos ha llevado al absurdo de acumular mucho m¨¢s de lo que necesitamos. A medir el ¨¦xito no usando el curr¨ªculum sino el extracto bancario. Muchos siguen creyendo que es el dinero lo que da la felicidad. Yo creo, en cambio, que la felicidad tiene que ver con el tiempo libre disponible, con las relaciones personales gratificantes y con la salud f¨ªsica y psicol¨®gica. Nada de esto exige comprar cosas concretas, m¨¢s bien al contrario. El mundo ser¨ªa mejor si aprendi¨¦ramos a vivir gastando apenas lo necesario. Ofrecer momentos en lugar de cosas o dinero. Porque ser felices y hacer felices a los que nos rodean suelen ser la misma cosa. Llenar el tiempo de conversaciones y abrazos y prometernos ¨²nicamente que el a?o que viene seguiremos apoy¨¢ndonos el uno en el otro. ?Puede haber mejor regalo?

Pablo Gonz¨¢lez Caballero. Boadilla del Monte (Madrid)

Equidad intergeneracional

En 2023 todos los afiliados a la Seguridad Social comenzaremos a pagar el Mecanismo de Equidad Intergeneracional, dise?ado para rellenar la hucha de las pensiones que vaci¨® a conciencia el expresidente Mariano Rajoy. Es un buen mecanismo: se garantizar¨¢n las pensiones de la generaci¨®n del baby boom y se evitar¨¢ que los j¨®venes dejen de creer en el sistema p¨²blico de pensiones. Pero, si hay equidad intergeneracional hacia los m¨¢s mayores, tambi¨¦n debe haberla hacia los m¨¢s j¨®venes. La reducci¨®n y limitaci¨®n de los precios de los alquileres, propiedades en su mayor¨ªa en manos de peque?os tenedores, es un buen punto de partida, al que deber¨ªamos sumar una aut¨¦ntica pol¨ªtica de promoci¨®n de vivienda p¨²blica a precios asequibles. Equidad intergeneracional s¨ª, pero para todos.

Jorge Fern¨¢ndez. Vigo

?Leer en la calle!

Caminando por el paseo mar¨ªtimo, decid¨ª sentarme en un banco, comprob¨¦ la hora en mi m¨®vil y saqu¨¦ un libro. Extra?¨¦ sus dimensiones, pues no se corresponden en absoluto con las del artefacto con el que suelo matar el tiempo. R¨¢pidamente comenc¨¦ a sentirme observado. Todos los transe¨²ntes me miraban estupefactos. ¡°Estudiando. ?Qu¨¦ bueno!¡±, me dijo un se?or, mientras otros miraban de reojo desde sus patinetes el¨¦ctricos. Leer en la calle se ha convertido en algo impensable.

Salvador Manzanares. M¨¢laga