Cuando Jagger no es Mick sino Alberto
Un popular y surrealista ¡®youtuber¡¯ de nombre similar al del cantante de los Rolling Stones y al de un conocido orujo, que empleaban los nazis como anest¨¦sico, genera tendencia y un poco de confusi¨®n
Cuando vio que Jagger era tendencia en Twitter, un usuario y fan de los Rolling Stones se pens¨® lo peor. Pero en seguida se percat¨® de que no iban por ah¨ª los tiros. El cantante sigue vivito y coleando a sus 79 a?os. Lo que encontr¨® en la red del pajarito azul es un amasijo de tuits y comentarios generados al principio en torno a un tipo surrealista e ingenioso, joven y fornido, madrile?o de aspecto jevil¨®n, que s...
Cuando vio que Jagger era tendencia en Twitter, un usuario y fan de los Rolling Stones se pens¨® lo peor. Pero en seguida se percat¨® de que no iban por ah¨ª los tiros. El cantante sigue vivito y coleando a sus 79 a?os. Lo que encontr¨® en la red del pajarito azul es un amasijo de tuits y comentarios generados al principio en torno a un tipo surrealista e ingenioso, joven y fornido, madrile?o de aspecto jevil¨®n, que se llama Alberto Redondo. En Twitter, Instagram o Twitch, redes en las que tiene millones de seguidores, todo el mundo lo conoce como M¨ªster J?gger, con di¨¦resis. Ya era conocido en las redes por sus contenidos en YouTube, con sus astracanadas y v¨ªdeos de humor dif¨ªcil de calificar, pero su combate de boxeo contra el cantante Bustamante en la Velada del A?o 2, organizada el pasado a?o en el Pabell¨®n Ol¨ªmpico de Badalona por el presentador Ibai Llanos, catapult¨® a¨²n m¨¢s su popularidad.
?Y por qu¨¦ J?gger empez¨® a convertirse en tendencia? Porque no participar¨¢ en la Velada del A?o 3, que este a?o tendr¨¢ lugar en el estadio Metropolitano de Madrid el 1 de julio, tras el ¨¦xito en Espa?a y Latinoam¨¦rica de la anterior edici¨®n. Enfrentar a famosos de las redes y celebrities de otros menesteres y retransmitirlo por Twitch, con los comentarios de ese maestro de la labia y el marketing que es Llanos, se ha revelado como un acontecimiento ya planetario. J?gger se refiri¨® a su ausencia en su cuenta personal de Twitter en la que se presenta con el ep¨ªteto ¨¦pico de ¡°hijo del sol y enemigo del viento¡±: ¡°Si cre¨¦is que no participar¨¦ en la Velada III est¨¢is muy equivocados. Me infiltrar¨¦ ps¨ªquicamente en el cuerpo de un peleador de cada combate para hacerlo fatal y que el otro pueda derrotarle¡±. Las respuestas y lamentos han sido m¨²ltiples, algunos de esta guisa: ¡°Jagger te echo de menos, cu¨¢ndo quedamos para hacer una danza de hadas de la digesti¨®n de los ¨¢rboles y la fotos¨ªntesis¡±.
Si el lector que ha llegado hasta aqu¨ª no sale de su perplejidad, no entiende nada y le parece todo una marcianada, tal vez se deba a eso que se llama brecha generacional o digital. O no. Uno puede ser boomer o generaci¨®n X o lo que sea y estar al loro, si bien emplear esta expresi¨®n ya te sit¨²a en una posici¨®n como muy del siglo XX. En cualquier caso, siempre se puede disfrutar de las estupendas fotograf¨ªas del cantante de los Stones subidas por algunos de sus devotos y que han alimentado la tendencia: Mick Jagger, Bob Dylan y Keith Richards en la fiesta del 29? cumplea?os del primero en 1972; unos jovenc¨ªsimos Mick y Jimi Hendrix; con Raquel Welch, fallecida el pasado mes, y Liza Minnelli en 1970...
No deja de ser un peque?o homenaje a Mick Jagger con la elegancia del blanco y negro de las fotograf¨ªas que han ido ganando presencia en la red y que contrasta tanto con el estr¨¦pito en torno al youtuber como con los mensajes sobre el orujo de 56 hierbas J?germeister, conocido coloquialmente como J?gger, que tambi¨¦n ha nutrido la tendencia. Desde hace unos a?os, se ha popularizado esta antigua bebida de origen alem¨¢n, que los nazis empleaban como anestesia y para enviar a sus soldados al matadero de la guerra. Se combina con bebidas energ¨¦ticas y refrescos y Espa?a ha llegado a ser uno de sus mercados clave en el mundo. La estrategia de la marca ten¨ªa un enfoque muy claro: la juventud, la m¨²sica alternativa y tribus urbanas como los hipsters. Se ha extendido entre los adolescentes, seg¨²n una de esas encuestas de proximidad, no muy rigurosas pero s¨ª inmediatas, que consisten en preguntar al entorno de uno, ya talludito.