No permitiremos ni un paso atr¨¢s
Los lectores escriben sobre la lona colgada por Vox en Madrid y la LGTBIfobia, la precariedad de las familias y el fin de las mascarillas
La lona del odio que ha colocado recientemente Vox en Madrid es proporcional al descaro y la desfachatez de sus miembros. Bajo el eslogan ¡°Decide lo que importa¡±, tiran a la basura todo lo que no les gusta, como, por ejemplo, la bandera del movimiento LGTBI. No saben estos se?ores que nuestra lucha, nuestra dignidad y nuestro respeto a la diversidad no caben en ninguna papelera. No somos despojos, sino persona...
La lona del odio que ha colocado recientemente Vox en Madrid es proporcional al descaro y la desfachatez de sus miembros. Bajo el eslogan ¡°Decide lo que importa¡±, tiran a la basura todo lo que no les gusta, como, por ejemplo, la bandera del movimiento LGTBI. No saben estos se?ores que nuestra lucha, nuestra dignidad y nuestro respeto a la diversidad no caben en ninguna papelera. No somos despojos, sino personas que amamos como queremos y a quien queremos. ?Claro que eso importa! Para su intransigencia nauseabunda y su LGTBIfobia repugnante, en cambio, necesitamos un vertedero enorme. A las puertas del D¨ªa Internacional del Orgullo LGTBI+, hay que decir bien alto y claro que no permitiremos ni un paso atr¨¢s en los derechos logrados en materia de igualdad afectivo-sexual por parte del colectivo. M¨¢s que nunca, debemos visibilizarnos ante este extremismo radical que propugna una serie de involuciones que no tienen cabida en una sociedad moderna, avanzada y del siglo XXI como la nuestra.
?scar Banegas Garrido. Alicante
?Es esto normal?
En mi casa somos dos adultos y un ni?o de 12 a?os, entran dos sueldos, uno de 1.100 y otro de 1.300 euros, y no nos da para vivir. Tenemos una casa y un coche que pagar, algo que visto lo visto se puede considerar un lujo. Mi pareja y yo nos volvemos locos de tanto darle vueltas a c¨®mo podr¨ªamos hacer para cambiar de situaci¨®n, a qu¨¦ m¨¢s nos quitamos... ?Qu¨¦ desastre! Tenemos cuarenta y tantos a?os y cero ahorrado. Nos encontramos en un bucle infinito que, l¨®gicamente, nos est¨¢ pasando factura. ?Acaso esto es normal en un pa¨ªs europeo desarrollado? Ya os lo digo yo: no lo es.
Silvia P¨¦rez Rubio. Elche (Alicante)
Fin de las mascarillas
Llega el fin de las mascarillas en centros sanitarios y seguimos sin haber instruido a la poblaci¨®n en un nuevo civismo basado en proteger a los vulnerables del contagio de enfermedades. En los centros sanitarios, a diferencia de un restaurante o un teatro, hay enfermos, ancianos y poblaci¨®n vulnerable que pueden sufrir las consecuencias del incivismo de una visita inapropiada, o de un trabajador enfermo. Esto ya era as¨ª antes de la pandemia aunque no lo tuvi¨¦ramos en cuenta. Hay que decirlo: la retirada de las mascarillas en centros sanitarios no responde a una evidencia cient¨ªfica sino a otros motivos. ?Deber¨ªamos mantener esta precauci¨®n, por responsabilidad y no por obligaci¨®n? ?Puede ser una ense?anza de la pandemia?
Demetrio Carriedo Gonz¨¢lez. Madrid
Amigos gays
En esta semana del Orgullo y de precampa?a electoral, me ofrezco en mi condici¨®n de gay para amistad con pol¨ªtica o pol¨ªtico que lo necesite. De esta forma, e independientemente de su adscripci¨®n o declaraciones previas, podr¨¢ afirmar sin rubor su modernidad con alusiones a nuestra relaci¨®n en entrevistas. ?Ning¨²n candidato sin un amigo gay!
Ignacio Alonso Mart¨ªnez. Madrid