Los siete errores que siempre lastrar¨¢n a Feij¨®o
El l¨ªder del Partido Popular ha cometido desaciertos que pueden lastrar su futuro si aspira a presidir un pa¨ªs y no un partido
Hay errores que se olvidan y se corrigen y otros que se recordar¨¢n para siempre. Feij¨®o ha cometido algunos que pueden lastrar su futuro si aspira a presidir un pa¨ªs y no un partido.
1. El PP pactaba con Vox mientras renegaba de Vox. Y renegaba de S¨¢nchez mientras le ped¨ªa pactar. El matrimonio con una ultraderecha que excluye a media Espa?a de su ecuaci¨®n de poder no se olvidar¨¢ nunca. Y el intento posterior de distanciarse de ella como si no la conociera, tampoco.
2. La arrogancia y ...
Hay errores que se olvidan y se corrigen y otros que se recordar¨¢n para siempre. Feij¨®o ha cometido algunos que pueden lastrar su futuro si aspira a presidir un pa¨ªs y no un partido.
1. El PP pactaba con Vox mientras renegaba de Vox. Y renegaba de S¨¢nchez mientras le ped¨ªa pactar. El matrimonio con una ultraderecha que excluye a media Espa?a de su ecuaci¨®n de poder no se olvidar¨¢ nunca. Y el intento posterior de distanciarse de ella como si no la conociera, tampoco.
2. La arrogancia y persistencia en la mentira que exhibi¨® ante una periodista de RTVE que solo estaba haciendo su trabajo no casa bien con el respeto a la libertad de expresi¨®n que se supone a los dirigentes democr¨¢ticos y tambi¨¦n quedar¨¢ para los anales. La negativa a acudir al ¨²ltimo debate, tambi¨¦n.
3. El machismo que mostr¨® al referirse al aspecto de Yolanda D¨ªaz por su maquillaje le puso a la altura de su lugarteniente, Esteban Gonz¨¢lez Pons, y del representante de Vox, que tuteaban y llamaban por su nombre de pila a la ministra Morant mientras ella se dirig¨ªa a ellos con m¨¢s educaci¨®n. Los tiempos, por fortuna, han cambiado.
4. La inconcreci¨®n a la hora de explicar su relaci¨®n con el narcotraficante Marcial Dorado y las p¨¦simas excusas ¡ª¡±entonces no hab¨ªa internet¡±¡ª tambi¨¦n le pasar¨¢n factura.
5. Los bulos sobre una mano negra en Correos y las dudas sobre el funcionamiento de las instituciones del Estado tambi¨¦n nos recordar¨¢n siempre las excusas de Donald Trump para victimizarse ante una posible derrota. La culpa no est¨¢ en los dem¨¢s.
6. Feij¨®o pudo ganar el debate a dos ante Pedro S¨¢nchez, pero la ametralladora cargada de medias verdades e inexactitudes no le hizo ganar en altura. Centrar la campa?a en las supuestas mentiras del contrario mientras ¨¦l lanzaba las suyas propias tambi¨¦n pasar¨¢ a la historia como ejemplo de lo que no hay que hacer.
Y 7. El lema que parec¨ªa infalible, la derogaci¨®n del sanchismo como territorio de maldades y manipulaci¨®n, se convirti¨® en un bumer¨¢n cuando el susodicho, el sanchismo, aprendi¨® a utilizarlo a su favor. La rabia de ese eslogan moviliz¨® a los socialistas hasta el punto de hacer suyo incluso el insulto m¨¢s usado: perro sanxe. El presidente abraz¨® la canci¨®n de Rigoberta Bandini (¡°yo nac¨ª para ser perra¡ pero no quiero llevar nunca el bozal¡ porque nadie me puede prohibir ladrar¡±) y sus seguidores pudieron bailarlo a rabiar en la noche electoral. Se estudiar¨¢ en la historia electoral.
Todos los l¨ªderes cometen en errores. En la talla de su liderazgo estar¨¢ corregirlos, especialmente si quieren ganar.