Elogio de lo grotesco

Grotesco: aquello que llama nuestra atenci¨®n por resultar rid¨ªculo, exagerado, extravagante, inveros¨ªmil, irreal, contrahecho, deforme. Las reacciones que provoca lo grotesco son muy variadas, pueden ir del horror y la repugnancia a la carcajada, pasando por el asombro de que cosas as¨ª existan.

Espa?a es pa¨ªs sobresaliente en aspectos grotescos. Muchos de nuestros grandes artistas (pintores, escritores, cineastas) han construido algunas de sus mejores obras explotando el car¨¢cter grotesco de nuestra vida p¨²blica. Si Espa?a resulta tan divertida es porque ofrece abundante material grotes...

Grotesco: aquello que llama nuestra atenci¨®n por resultar rid¨ªculo, exagerado, extravagante, inveros¨ªmil, irreal, contrahecho, deforme. Las reacciones que provoca lo grotesco son muy variadas, pueden ir del horror y la repugnancia a la carcajada, pasando por el asombro de que cosas as¨ª existan.

Espa?a es pa¨ªs sobresaliente en aspectos grotescos. Muchos de nuestros grandes artistas (pintores, escritores, cineastas) han construido algunas de sus mejores obras explotando el car¨¢cter grotesco de nuestra vida p¨²blica. Si Espa?a resulta tan divertida es porque ofrece abundante material grotesco. En mi caso, soy amante incondicional de este g¨¦nero. No s¨¦ si me siento espa?ol porque adoro lo grotesco o adoro lo grotesco porque he nacido en Espa?a.

Me interesa lo grotesco en todas sus dimensiones, desde la f¨ªsica hasta la intelectual. En la televisi¨®n norteamericana, a la que nada humano le es ajeno, hay multitud de programas sobre cuerpos grotescos (el m¨¢s espectacular es Embarrasing Bodies, un compendio de las peores deformidades que puede sufrir el ser humano). Hoy, aprovechando el relajo navide?o y que nos encontramos en los ¨²ltimos d¨ªas del a?o, quisiera traerles una lista, personal y caprichosa, de 10 momentos indiscutiblemente grotescos en la vida p¨²blica espa?ola de 2023. Espero que los hayan disfrutado tanto como yo.

Primero. Manifestaciones en la calle Ferraz de Madrid. Las escenas que hemos visto van m¨¢s all¨¢ de lo que Luis Garc¨ªa Berlanga o Jos¨¦ Luis Garc¨ªa S¨¢nchez podr¨ªan haber imaginado nunca. El pijo agitado que, con el tono irrepetible de su condici¨®n social, dice aquello de ¡°nos tira gases lacrim¨®genos la polic¨ªa por ¡®putodefender¡¯ Espa?a¡±; un se?or mayor, exaltado y bien vestido, que, altavoz en mano, grita a ritmo de rap ¡°hay que echar a las ratas de Ferraz¡± y le dedica a Pedro S¨¢nchez este bonito verso: ¡°Hijo de puta, tienes que morir¡±; otro se?or, con una bandera enorme, se queja de la incultura de los ministros de izquierdas, a quienes atribuye la creencia de que ¡°los pollos violan a las gallinas¡±; el rezo del rosario entre banderas nacionales y carlistas, pidiendo la salvaci¨®n mariana de Espa?a mientras se oyen de fondo cantos de ¡°?Puigdemont, a prisi¨®n!¡±; el desfile de mu?ecas hinchables a las puertas de la sede del PSOE, con las masas insurgentes motejando a dicho edificio de ¡°puticlub¡±. Sencillamente insuperable.

Segundo. Chema de la Cierva (hijo del historiador franquista y ministro de UCD, Ricardo de la Cierva), que, cuando iba a ser entrevistado a prop¨®sito de un radar de carretera en un programa de RTVE, se salt¨® el guion y dijo estas inmortales palabras con voz de pito: ¡°Que te vote Txapote, S¨¢nchez, que te vote Txapote, socialista, hijo de puta, genocida, que te den por culo S¨¢nchez, hijo de la gran puta, socialista, rojo de mierda¡­¡±. Era enero de 2023. El eslogan, como ustedes sabr¨¢n, hizo fortuna. El diario El Mundo, siempre atento a la novedad, le hizo una entrevista y De la Cierva dej¨® esta declaraci¨®n que da para pensar mucho: ¡°Con Franco no hab¨ªa IVA. Con Franco no hab¨ªa libertad para pensar en marxismo, pero una persona de bien, honrada, pod¨ªa pagarse una segunda residencia en 15 a?os¡±. Qu¨¦ l¨ªo, ?paga IVA el Manifiesto Comunista?

Tercero. Las entrevistas a Alfonso Guerra y, en especial, la que le realiz¨® Pablo Motos en El Hormiguero. Recuerden sus palabras solidarias con los humoristas reprimidos y represaliados por el r¨¦gimen bolivariano que preside Pedro S¨¢nchez: ¡°Me dan mucha pena los humoristas, ya no pueden hablar de nada. Antes hab¨ªa [chistes] de homosexuales, de enanos, de todo. Ahora no, ahora es: ?Esto no! ?Esto no!¡±.

Cuarto. El magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n. Un juez conservador a punto de jubilarse, obsesionado con Podemos y los independentistas, dispuesto a poner el pa¨ªs patas arriba y a explotar la muerte por infarto de un ciudadano franc¨¦s en el aeropuerto de Barcelona durante los disturbios de 2019 para acusar de terrorismo a Carles Puigdemont y Marta Rovira cuatro a?os despu¨¦s e impedir de este modo que puedan beneficiarse de la ley de amnist¨ªa. Si el derecho puede volverse grotesco, no hay mejor ilustraci¨®n que esta.

Quinto. La conversi¨®n de Macarena Olona, hoy la pol¨ªtica m¨¢s iluminada y visionaria de Espa?a. Afirma que la vida es como un gran botell¨®n, tiene a Julio Anguita como uno de sus referentes y, tras su paso por Vox, ha desarrollado una aguda sensibilidad social.

Sexto. Jaime del Burgo, el excu?ado impredecible que quiere vengarse de Letizia y Felipe VI por haber permitido que Pedro S¨¢nchez gobierne con el apoyo de Bildu. Ha llamado al nuevo Ejecutivo ¡°el Gobierno de las balas¡±. Entrevera sus amenazas con recomendaciones bibliogr¨¢ficas propias de Babelia, como un libro sobre hermen¨¦utica, sem¨¢ntica y pol¨ªtica. Dice que solo reconoce a un rey, Jes¨²s de Nazaret, que al parecer le juzgar¨¢ en el cielo. Quedamos a la espera.

S¨¦ptimo. Los mon¨®logos de Federico Jim¨¦nez Losantos. No es que en 2023 hayan destacado especialmente, es que deber¨ªan estar en la lista de todos los a?os. Se trata de nuestro mejor comediante, superior incluso a Los Morancos, nadie le iguala en el g¨¦nero del absurdo pol¨ªtico. Sus accesos de ira son tan tronchantes como los motes que pone a unos y otros. Los motes se han recogido para la posteridad en la Federicopedia. ?l se cree una luminaria, lo que no sorprende a la vista de los colaboradores que le acompa?an en sus tertulias. Una de las bromas m¨¢s conseguidas es cuando se define como liberal (carcajada del p¨²blico). ?ltimamente, afirma que Pedro S¨¢nchez har¨¢ un refer¨¦ndum, Catalu?a se independizar¨¢ y el presidente nos sacar¨¢ de la Uni¨®n Europea para poder gobernar a sus anchas como un bolivariano (gran carcajada del p¨²blico).

Octavo. La respuesta de Alberto N¨²?ez Feij¨®o cuando, en una entrevista en plena campa?a electoral, le preguntaron por su pasada amistad con el narcotraficante Marcial Dorado. Estas fueron sus palabras: ¡°En aquel momento era contrabandista, cuando yo le conoc¨ª. Contrabandista, nunca narcotraficante.¡± Y aqu¨ª seguimos, como si nada.

Noveno. El excomisario Villarejo, perejil de todas las salsas nacionales. Todas las tramas pasan por ¨¦l, todos confiaban en ¨¦l mientras ¨¦l les grababa a todos. Su oratoria es inigualable y ser¨¢ estudiada en los tiempos venideros. Aqu¨ª va una frase antol¨®gica, que alude al misterio mayor del reino, la cuenta de nombre Soleado de Suiza: ¡°con todo el chocho que tienen de Catalu?a y tal y cual, prefirieron preservar la cuenta de Soleado a seguir una l¨ªnea de investigaci¨®n¡­¡±.

D¨¦cimo. Y de la cuenta Soleado al rey em¨¦rito, Juan Carlos I, quien, en Sanxenxo, ante las preguntas de una periodista sobre si dar¨¢ o no explicaciones, se encoge de hombros, se pregunta con fingida extra?eza ¡°?explicaciones de qu¨¦?¡±, se echa unas risas burlonas y sale pitando con su veh¨ªculo. Ya, ya s¨¦ que esta respuesta grotesca tuvo lugar en mayo de 2022, pero algunos episodios se vuelven intemporales.

Han salido 10 elementos para la lista sin recurrir al peque?o Nicol¨¢s. ?Hay acaso alg¨²n otro pa¨ªs de nuestro entorno en el que puedan encontrarse muestras tan abundantes de lo grotesco? Estoy seguro de que en otros lugares habr¨¢ personajes no menos estrafalarios que muchos de los que aqu¨ª han sido citados. Ahora bien, sospecho que ni reciben tanta atenci¨®n, ni est¨¢n tan bien integrados en el sistema. Parafraseando al gran Ricardo Costa, en Espa?a la fiesta no se acaba nunca. Muera el aburrimiento.