No ando tranquila por la calle
Como madre espa?ola tengo derecho a no preocuparme cuando mis hijos anden solos, a que no los paren para pedirles papeles, a que no tengan que responder siempre como sospechosos habituales
Tiene raz¨®n N¨²?ez Feijoo cuando dice que los espa?oles tenemos derecho a andar tranquilos por la calle. Como espa?ola no puedo estar m¨¢s de acuerdo. Como madre espa?ola tengo derecho a no preocuparme cuando mis hijos anden solos, a que no los paren para pedirles papeles, a que no tengan que responder siempre como ...
Tiene raz¨®n N¨²?ez Feijoo cuando dice que los espa?oles tenemos derecho a andar tranquilos por la calle. Como espa?ola no puedo estar m¨¢s de acuerdo. Como madre espa?ola tengo derecho a no preocuparme cuando mis hijos anden solos, a que no los paren para pedirles papeles, a que no tengan que responder siempre como sospechosos habituales. Tengo derecho a que nadie les niegue un trabajo por ser m¨¢s morenos de la cuenta o les paguen menos por lo mismo o les impidan la entrada a los sitios o les dificulten el alquiler de una vivienda por no ser percibidos como de aqu¨ª o insistan en preguntarles de d¨®nde son o les hablen muy despacio o gritando. Tengo derecho a no inquietarme temiendo que puedan ser m¨¢s agredidos y m¨¢s discriminados que los hijos de otras madres.
Durante a?os en Espa?a sacamos pecho porque no ten¨ªamos extrema derecha, maravillosa anomal¨ªa, dec¨ªan. Puro espejismo dado que los discursos ultras y xen¨®fobos estaban m¨¢s que normalizados en el PP y en CiU. Los ciudadanos que no han sentido nunca el aliento f¨¦tido del racismo en la nuca cre¨ªan vivir en un pa¨ªs muy distinto del que habit¨¢bamos quienes nos d¨¢bamos de bruces contra las barreras administrativas, sociales y laborales de la exclusi¨®n por origen. Ojal¨¢ haber vivido en ese lado y no en ¨¦ste, donde cada mil¨ªmetro de avance supone un esfuerzo contra elementos que los aut¨®ctonos ni siquiera pueden imaginar. Cuando despu¨¦s de la crisis de 2008 todos celebraban que aqu¨ª no hab¨ªa extrema derecha yo dej¨¦ de leer los comentarios que se vert¨ªan sobre cada columna que publicaba en otro peri¨®dico por resultarme insoportable la violencia racista que expresaban. Y no, no va en el cargo porque una cosa es que te digan ¡°no estoy de acuerdo contigo¡± y otra muy distinta es que te manden cada d¨ªa a tu pa¨ªs. Cuando surgi¨® Vox, Santiago Alba Rico dio con una imagen genial para describir su nacimiento: era un prolapso del PP, algo que tambi¨¦n se puede aplicar a Alian?a Catalana con Junts. Ambas formaciones parecen ahora querer recuperar este desprendido sector de su electorado. Por eso olvidan que hay espa?oles (y catalanes) que estamos lejos de sentirnos fuera de peligro en nuestro propio pa¨ªs, m¨¢s cuando alguien con tanto poder medi¨¢tico como el presidente del PP se?ala p¨²blicamente a los extranjeros y los asocia con una peligrosidad inherente que se desprende del color de su piel o del n¨²mero de aspiradas y guturales que tengan en sus apellidos. No, con racistas como ¨¦stos es imposible andar tranquila por la calle.