Paro contra Netanyahu
El primer ministro israel¨ª sigue utilizando la guerra en Gaza para desviar la atenci¨®n?sobre?su?gesti¨®n
En una nueva muestra de rechazo a Benjam¨ªn Netanyahu, la noticia del asesinato perpetrado por Ham¨¢s de seis de los rehenes israel¨ªes secuestrados el pasado 7 de octubre fue el detonante de una huelga general celebrada el lunes en Israel contra la devastadora estrategia que el primer ministro lleva a cabo desde entonces contra Gaza, que ha producido la muerte de m¨¢s de 40.000 palestinos sin conseguir el retorno de todos los rehenes que a¨²n est¨¢n en manos de la milicia islamista.
El seguimiento de la convocatoria fue desigual y esta qued¨® anulada a las pocas horas de comenzar por un tribunal que consider¨® que la aut¨¦ntica raz¨®n del paro, convocado por el principal sindicato del pa¨ªs, era pol¨ªtica y no la esgrimida al pedir que se autorizara: la exigencia a Netanyahu de una negociaci¨®n para la liberaci¨®n de los rehenes. La decisi¨®n judicial es cuestionable porque en Israel es imposible separar el rechazo al l¨ªder del Likud de la cr¨ªtica a su desproporcionada ofensiva en la Franja, que ha sumido al pa¨ªs en un estado de guerra permanente, con miles de ciudadanos israel¨ªes desplazados en el norte por los intercambios de fuego con Hezbol¨¢, bombardeos desde Yemen por los aliados de Ir¨¢n y una cr¨ªtica internacional casi un¨¢nime por las violaciones de los derechos humanos en Gaza y Cisjordania.
Hay que recordar que las masivas protestas contra Benjam¨ªn Netanyahu ¡ªprocesado por corrupci¨®n y abuso de poder y cuya inmunidad actual se apoya solo en que ocupa el cargo de primer ministro¡ª se ven¨ªan produciendo semanalmente antes del atroz ataque de Ham¨¢s en octubre. Es precisamente la guerra la que le ha permitido no solo desviar la atenci¨®n sobre su gesti¨®n, sino tambi¨¦n recuperar popularidad en las encuestas. A Netanyahu le conviene la guerra, pero no a sus conciudadanos, muchos de los cuales exigen un alto el fuego inmediato.
El mandatario israel¨ª permanece impasible ante las protestas internas y ante cualquier gesto de presi¨®n de sus aliados exteriores. El anuncio de Reino Unido de que considera la suspensi¨®n del env¨ªo de armas no pasa de ser una declaraci¨®n. Tras la previsible reacci¨®n hiperb¨®lica de Netanyahu, la administraci¨®n laborista se ha apresurado a aclarar que la medida ¡ªque afectar¨ªa a 30 licencias de exportaci¨®n¡ª no debilita la seguridad de Israel, es decir, su capacidad militar. Es un caso similar al embargo parcial de bombas decretado por EE UU antes del verano y que no ha tenido consecuencia alguna sobre el terreno. As¨ª, el Gobierno israel¨ª sigue haciendo o¨ªdos sordos, los civiles palestinos muriendo bajo sus bombardeos indiscriminados y el calendario acerc¨¢ndose al primer a?o de infierno en Gaza.