Explicaciones frente a cacer¨ªa
Teresa Ribera informa con detalle al Congreso sobre la actuaci¨®n del Estado el d¨ªa de la dana ante un PP volcado en exculparse
La vicepresidenta Teresa Ribera compareci¨® ayer en el Congreso para explicar la gesti¨®n del Gobierno central sobre la riada de Valencia, en la que probablemente ser¨¢ su ¨²ltima intervenci¨®n antes de ocupar una vicepresidencia europea. Era una comparecencia contaminada de antemano por la decisi¨®n del PP de tratar de convertir a Ribera en chivo expiatorio con el que tapar las manifiestas negligencias del president valenciano Carlos Maz¨®n y su Ejecutivo el 29 de octubre. El PP utiliz¨® la sesi¨®n de ayer para teatralizar una cacer¨ªa pol¨ªtica contra Ribera con un guion insultante en el que pareci¨® que no hubiera administraci¨®n auton¨®mica en Valencia. Maz¨®n no estuvo ayer en el discurso del PP como no estuvo en la prevenci¨®n a sus ciudadanos ante la tragedia. El partido del presidente auton¨®mico que comi¨® durante cuatro horas mientras Valencia se anegaba acus¨® a Ribera de estar desaparecida aquel d¨ªa.
La vicepresidenta detall¨® pormenorizadamente los m¨²ltiples avisos que tanto la Aemet como la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del J¨²car (CHJ) hicieron el fat¨ªdico 29 y los d¨ªas anteriores a las instituciones valencianas. Los de la Aemet fueron, adem¨¢s, reproducidos con insistencia por los medios de comunicaci¨®n desde casi una semana antes. La irresponsable gesti¨®n de la Generalitat, m¨¢xima autoridad en la emergencia, suma el dato que ayer record¨® Ribera: los responsables estatales que participaban en el equipo de coordinaci¨®n de emergencias por videoconferencia en los momentos cr¨ªticos de la riada se encontraron con la pantalla de la reuni¨®n ¡°en negro¡± entre las seis y las siete de la tarde.
El minucioso relato del trabajo realizado por los responsables de la Aemet y la confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del J¨²car no encontr¨® ning¨²n eco en el principal partido de la oposici¨®n en Espa?a y gobernante en la Comunidad Valenciana. El objetivo ayer era salir indemne de una gesti¨®n catastr¨®fica y torpedear la carrera europea de Ribera. La segunda parte qued¨® desautorizada en mitad de la sesi¨®n, cuando se conoci¨® que el pacto de socialdem¨®cratas y populares europeos para que Ribera sea vicepresidenta de la Comisi¨®n sigue adelante. Ning¨²n diputado del PP por Valencia subi¨® ayer a la tribuna del Congreso a ejecutar el papel que le toc¨® representar a la diputada por Le¨®n Ester Mu?oz. Veintid¨®s d¨ªas despu¨¦s de la peor gota fr¨ªa del siglo, el presidente valenciano sigue sin aclarar qu¨¦ hizo en las horas cruciales en las que ya eran evidentes las dimensiones del desastre y ni ¨¦l ni sus subordinados tomaron ninguna decisi¨®n.
Una de las principales lecciones que debe dejar la dana es c¨®mo abordar la construcci¨®n en zonas inundables, la pol¨ªtica hidrol¨®gica del futuro o la gesti¨®n de las alertas de emergencias. Este era el debate que los valencianos, y todos los espa?oles, se merec¨ªan ayer. La meteorolog¨ªa extrema va a ser la nueva normalidad. Ribera s¨ª incidi¨® en ello, en la necesidad de anticiparse a los riesgos, en la importancia de la prevenci¨®n y en la alarma que provocaba escuchar en el hemiciclo expresiones como ¡°sectarismo clim¨¢tico¡±. Desgraciadamente, no es solo ret¨®rica. Este martes, el PP y Vox acordaron en las cortes valencianas permitir la construcci¨®n de hoteles a 200 metros de la costa, como si nada hubiera pasado.