El Caribe de Bad Bunny
Los lectores sobre el cantante puertorrique?o, el veto a TikTok en Estados Unidos, una iniciativa de reforestaci¨®n y el uso por los pol¨ªticos de las tragedias
Reducirlo a un mero cantante de reguet¨®n es limitarse a lo trivial. Bad Bunny es un artista irreverente, exuberante e intr¨¦pido, capaz de denunciar las desigualdades, las violencias de g¨¦nero o la homofobia. Lo admiro porque tiene la capacidad de reinventarse y atreverse. Demuestra que no es necesario ajustarse a los est¨¢ndares de belleza para ser atractivo e interesante, desafiando los c¨¢nones heteronormativos. En su ¨²ltimo ¨¢lbum unifica e identifica la esencia de Puerto Rico con ese tono alegre y melanc¨®lico a la vez. No solo captura la esencia de su tierra, sino que logra, en un momento de creciente polarizaci¨®n, recordarle a su gente el valor de sus ra¨ªces. Es un llamamiento de resistencia a la gentrificaci¨®n y colonizaci¨®n, un recordatorio de la identidad y la uni¨®n como fuerzas poderosas.
Minerva Cano Dom¨ªnguez. Madrid
TikTok en EE UU
El Supremo de EE UU ha avalado una ley que obliga a TikTok a cesar sus operaciones en ese pa¨ªs, argumentando riesgos para la seguridad nacional por su vinculaci¨®n con la empresa matriz en China. TikTok se ha convertido en un espacio clave para la expresi¨®n, la interacci¨®n social y la creaci¨®n de comunidades basadas en intereses compartidos. Su desaparici¨®n podr¨ªa generar sentimientos de aislamiento en algunos usuarios y afectar especialmente a los creadores de contenidos. La decisi¨®n tambi¨¦n abre la puerta a reflexionar sobre el impacto de las redes sociales en la vida cotidiana.
Alba Cruza Escudero. Castelldefels (Barcelona)
?rboles por goles
El futbolista keniano Lesein Mutunkei tuvo un d¨ªa una idea mientras daba toques al bal¨®n y ve¨ªa la llanura pelada: plantar 11 ¨¢rboles por cada gol que marcase. En poco tiempo llegaron a mil; ahora ya son parques inmensos. Mutunkei quiere que la FIFA haga lo mismo y adopte el plan Trees for Goals. No tenemos por qu¨¦ esperar a que los futbolistas profesionales consigan dianas. Podemos plantar ¨¢rboles por cada gol que marquemos, por cada canasta que encestemos, por cada kil¨®metro que corramos. Por cada vez que nos salga bien la comida, cada hora que dejemos de pelear con el m¨®vil, cada error que cometamos. Tambi¨¦n por cada acierto, por cada nuevo amigo que conozcamos, por cada canci¨®n que bailemos. Y por las que no bailemos. Once ¨¢rboles plantados por cada cosa.
Emmanuel Rueda Girondo. Vigo
Usar el sufrimiento como arma pol¨ªtica
Soy profesora de Lengua Castellana y Literatura. Igual que un zapatero se fija en los zapatos o un peluquero en los peinados, yo me fijo en c¨®mo utilizamos las palabras. Vivo en Getafe. No tengo familiares en Valencia. Ninguna persona querida ha perdido la vida, su casa, su trabajo¡ Tampoco he vivido una guerra. No he sentido el desgarrador dolor en las entra?as cuando alguien a quien quieres pierde la vida, un brazo, se muere de hambre o se va apagando de pena. Pero cuando escucho a los pol¨ªticos utilizar el sufrimiento de las personas como arma contra sus adversarios, me desgarro emocionalmente. Los pol¨ªticos deber¨ªan estar bien preparados, pero, sobre todo, deber¨ªan tener coraz¨®n.
Esther Garc¨ªa Ruiz. Getafe (Madrid)