Maz¨®n, desesperada huida hacia adelante
El presidente valenciano enturbia la reconstrucci¨®n y ofende a las v¨ªctimas de la dana con sucesivas estratagemas para sacudirse la responsabilidad
Apuntan bien quienes en la Generalitat Valenciana sostienen que volver a revisar lo que sucedi¨® el d¨ªa 29 de octubre, cuando unas extraordinarias lluvias torrenciales provocaron la muerte de 227 personas, siempre va a terminar con la pregunta de por qu¨¦ no estaba Carlos Maz¨®n al mando en las horas cr¨ªticas. El presidente valenciano no sale bien parado de ninguna informaci¨®n nueva sobre las horas cruciales en las que estuvo ilocalizable. Esta realidad es cada vez m¨¢s evidente tras el inicio de la investigaci¨®n judicial sobre lo ocurrido. El dirigente del PP lleva desde entonces intentando centrifugar la responsabilidad hacia cualquiera que no sea ¨¦l, y en esa estrategia casi todo le vale.
El centro de la defensa de Maz¨®n es que, aquel d¨ªa, todo cambi¨® a partir de las siete de la tarde ¡ªpara as¨ª justificar las horas que pas¨® de comida y sobremesa incomunicado¡ª y que las instituciones dependientes del Gobierno central, la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet) y la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del J¨²car (CHJ), no avisaron de lo que iba a pasar. En ese empe?o, y con un claro desprecio a la verdad, dej¨® que se filtrara a los medios una conversaci¨®n entre el presidente de la CHJ y un alto cargo de la Generalitat. Hizo lo mismo con otra llamada, esta entre una meteor¨®loga y una t¨¦cnica del servicio auton¨®mico de Emergencias. Pero la llamada estaba cortada para dar la falsa impresi¨®n de que la Generalitat no ten¨ªa informaci¨®n precisa de lo que ocurr¨ªa. El propio Maz¨®n retuite¨® la versi¨®n cortada que falseaba la conversaci¨®n.
Ambos intentos de manipulaci¨®n duraron apenas unas horas. Los audios completos de las dos conversaciones vuelven a dejar en evidencia a Maz¨®n. En la primera se habla de un sistema autom¨¢tico de informaci¨®n que transmite datos actualizados cada cinco minutos; en la segunda, la meteor¨®loga advierte, a las doce de la ma?ana, de que lo peor llegar¨ªa entre las tres y las seis de la tarde, justo las horas en las que Maz¨®n estuvo ilocalizable.
Resulta asombroso que Maz¨®n realmente pensara que los audios completos no iban a salir a la luz, cuando no solo hay una investigaci¨®n judicial, sino otra en las Cortes. Al presidente, que a¨²n no ha dado explicaciones de su ausencia a los valencianos mostrando facturas u horarios contrastados, parece bastarle con algo de ruido a corto plazo en redes sociales para sentirse reivindicado. No est¨¢ claro si es iniciativa de Maz¨®n o del coro de cobistas que le rodea, pero sea cual sea la raz¨®n de la estrategia, esta solo reporta tensi¨®n con el Gobierno central, con quien tiene que entenderse para la reconstrucci¨®n, y m¨¢s dolor en las v¨ªctimas.
Entra en la l¨®gica que en la Generalitat sobrevuele el nerviosismo por la investigaci¨®n judicial, cuando lo que se dirime es una posible responsabilidad penal por las muertes y los cuantiosos da?os materiales. Pero nada justifica el insulto a los ciudadanos que representa entregarse al enga?o y la manipulaci¨®n.