El inimaginable ¡®reality¡¯ trumpiano
Los lectores escriben sobre Donald Trump, el 8-M, la imposible emancipaci¨®n de los j¨®venes, y los padres que exponen a sus hijos en las redes sociales
Hace tan solo unos d¨ªas nos hubiera parecido inimaginable lo que vimos en la Casa Blanca: la encerrona y la humillaci¨®n de Trump a Zelenski, en medio de un grupo de espectadores en directo, y de muchos millones de telespectadores a trav¨¦s de la televisi¨®n. Un periodista se mof¨® de su vestimenta.Tras haberlo acusado previamente de dictador y acusarle de ser el responsable de la guerra, Trump ofreci¨® un ¨²nico acuerdo posible: la rendici¨®n. Un reality trumpiano en el que se dinamitaron todos los principios de la diplomacia. Una ruptura humillante, sin respeto, sin educaci¨®n y con maneras propias de mat¨®n de patio. Y por si fuera poco, Trump no solo retir¨® toda la ayuda a Ucrania, sino que se ha puesto del lado de Putin. Inimaginable.
Sebasti¨¢n Fern¨¢ndez Izquierdo. Petrer (Alicante)
Resiliencia, pan y circo
Todos los a?os, en v¨ªsperas del 8-M, me dispongo a confeccionar una pancarta con la cual participo junto con unas amigas en la manifestaci¨®n que organizan en mi pueblo. Antes de que finalice febrero nos ponemos en contacto todas a trav¨¦s de un grupo de WhatsApp para concretar aspectos de la quedada. Este a?o, por primera vez, no lo hemos hecho a¨²n. Se percibe el des¨¢nimo. Son tantos los frentes abiertos, tan importantes y tan inciertos, que estoy segura de que, al menos aqu¨ª, la mayor parte de la poblaci¨®n optar¨¢ por mirar hacia otro lado; es decir, elegir¨¢ participar en el desfile de carnaval que el Ayuntamiento ha contraprogramado para la tarde del D¨ªa de la Mujer. Resiliencia, pan y circo.
Mayte Olcina Valls. Alcoy (Alicante)
Un sue?o inalcanzable
Tengo 27 a?os, trabajo y, aun as¨ª, sigo viviendo con mis padres. Como yo, miles de j¨®venes en Espa?a vemos la independencia como un sue?o inalcanzable. El alquiler est¨¢ por las nubes, los sueldos apenas han subido y ahorrar para una entrada de piso es misi¨®n imposible. Cada mes hago cuentas y el resultado es el mismo: con un sueldo medio, dedicar m¨¢s de la mitad a un alquiler es inviable. Y si uno quiere compartir piso, los precios tampoco ayudan. Mientras en otros pa¨ªses emanciparse en la veintena es lo normal, aqu¨ª la media supera los 30. No porque queramos, sino porque no hay opci¨®n. Las ayudas son insuficientes, la oferta de vivienda asequible escasea y la precariedad laboral se extiende. ?Hasta cu¨¢ndo tendremos que retrasar nuestra vida adulta? Independizarse no deber¨ªa ser un privilegio, sino un derecho real.
Nacho Caparr¨®s Ayll¨®n. Castelldefels (Barcelona)
La infancia no es un escaparate
Tan solo soy una ni?a y ya todo el mundo me conoce. Miles de personas saben c¨®mo me llamo, d¨®nde vivo y c¨®mo me veo, sin que yo tenga la menor idea de qui¨¦nes son ellos. Nadie me ha preguntado nunca c¨®mo me siento al respecto, nadie me ha dejado elegir, y ahora ya es tarde. Esta es la realidad de miles de ni?os expuestos en redes por sus propios padres, influencers, que convierten a ni?os en contenido a cambio de visitas y likes. Es urgente actualizar la legislaci¨®n para protegerlos y garantizar que puedan crecer con privacidad. La infancia no es un escaparate y todos tenemos derecho a decidir qui¨¦n nos ve y qui¨¦n no.
Ana Soler Trias. Barcelona