La pr¨®xima crisis: el ¡®apartheid¡¯ vacunal nos pone a todos en peligro
Occidente ha comprado r¨¢pidamente miles de millones de vacunas contra la covid-19 por poco dinero, y deja que los pa¨ªses m¨¢s pobres, con el grueso de la poblaci¨®n mundial, queden segregados y paguen un alt¨ªsimo precio futuro
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Senam Agbesi intent¨® sacar el mayor partido del confinamiento en Londres. ¡°Tuve muchos encuentros por Zoom y di muchos paseos¡±, cuenta. Agbesi, de 34 a?os, es gerente del Servicio Nacional de Salud, y cree que posiblemente lo vacunar¨¢n este mes, ya que va a empezar a trabajar en un puesto en el que tendr¨¢ que hacer frecuentes visitas a los hospitales. A pesar de las buenas noticias sobre su vacunaci¨®n, le preocupa su padre, Yao, que vive en la ciudad ghanesa de Acra. Yao tiene 65 a?os y padece drepanocitosis, una afecci¨®n que aumenta el riesgo de sufrir una forma grave de covid-19 en caso de contraer la enfermedad.
Un amigo ¨ªntimo de la familia muri¨® hace poco a causa del virus, y a Agbesi le gustar¨ªa que su padre tuviese m¨¢s cuidado. ¡°Piensa que es invencible. Por la ma?ana se toma una tacita de infusi¨®n de jengibre y zumo de lima y cree que est¨¢ rodeado por una fortaleza invisible¡±, bromea. A Yao no le han avisado de que vayan a vacunarlo, ni ha visto ninguna informaci¨®n concreta en los medios de comunicaci¨®n acerca de la fecha de llegada de los viales. Las previsiones indican que la mayor¨ªa de la poblaci¨®n ghanesa no ser¨¢ vacunada hasta 2023, y otros pa¨ªses de ?frica subsahariana esperar¨¢n hasta 2024.
Los pa¨ªses pobres no solo se ver¨¢n obligados a esperar, sino que a muchos ya se les est¨¢n cobrando precios mucho m¨¢s altos por dosis. Uganda, por ejemplo, ha anunciado un acuerdo de compra de millones de vacunas de AstraZeneca a siete d¨®lares la dosis, m¨¢s de tres veces lo que la Uni¨®n Europea ha pagado por la misma inyecci¨®n. Incluidas las tasas de transporte, administrar la vacuna completa a un ugand¨¦s costar¨¢ 17 d¨®lares.
Los activistas y los cient¨ªficos advierten de que nos dirigimos a un ¡°apartheid vacunal¡± en el que los habitantes del sur global recibir¨¢n la inyecci¨®n a?os despu¨¦s que los de Occidente. Esta desigualdad tendr¨¢ importantes consecuencias. Las proyecciones de la Northeastern University de Boston y otras indican que si los primeros 2.000 millones de dosis de vacunas contra la covid-19 se distribuyeran en proporci¨®n a la poblaci¨®n de los pa¨ªses, la mortalidad mundial podr¨ªa reducirse en un 61%. En cambio, si los 47 pa¨ªses m¨¢s ricos del mundo monopolizan las dosis, solo habr¨¢ un 33% menos de muertes.
Mientras la Uni¨®n Europea discut¨ªa la semana pasada con AstraZeneca para asegurarse m¨¢s vacunas, los l¨ªderes repet¨ªan mec¨¢nicamente el mantra ¡°nadie est¨¢ a salvo mientras no lo estemos todos¡±. La distribuci¨®n desigual a escala mundial ser¨¢ perjudicial para todos nosotros, ya que dejar¨¢ reservorios del virus repartidos por el planeta, en los que surgir¨¢n y desde los que se propagar¨¢n variantes nuevas y quiz¨¢ m¨¢s peligrosas. Distra¨ªdos por las luchas internas y el proteccionismo de Occidente, nos dirigimos como son¨¢mbulos a un mundo con m¨¢s casos, m¨¢s caos econ¨®mico y m¨¢s muertes.
La supervivencia de los m¨¢s r¨¢pidos
Con las prisas por asegurarse vacunas para sus ciudadanos, y antes de saber cu¨¢les ser¨ªan m¨¢s eficaces, los pa¨ªses cerraron r¨¢pidamente acuerdos para recibir miles de millones de dosis. Hasta ahora se han vendido unos 12.700 millones de dosis de varias vacunas contra el coronavirus, una cantidad suficiente para inmunizar a alrededor de 6.300 millones de personas. (De momento, todas las vacunas aprobadas necesitan dos inyecciones, pero algunos pa¨ªses ya han encargado un preparado en una dosis ¨²nica que todav¨ªa tiene que ser aprobado).
M¨¢s de la mitad de las dosis ?4.200 millones aseguradas, con la opci¨®n de comprar otras 2.500 millones? ha sido adquirida por los pa¨ªses ricos, en los que residen tan solo 1.200 millones de personas. Canad¨¢ ha comprado dosis suficientes para inocular a cada canadiense cinco veces, mientras que las adquiridas por Estados Unidos, Reino Unido, la Uni¨®n Europea, Australia, Nueva Zelanda y Chile bastan para vacunar a su poblaci¨®n al menos dos veces, si bien algunos de los preparados todav¨ªa no han sido aprobados.
Los pa¨ªses de ingresos medios y bajos han cerrado acuerdos con las empresas farmac¨¦uticas, pero hasta ahora solo se han asegurado el 32% del suministro, con el que tienen que inmunizar al 84% de la poblaci¨®n mundial
Estos enormes pedidos ya realizados dejan menos dosis para las regiones m¨¢s pobres y plantean dudas sobre si COVAX, una organizaci¨®n creada para garantizar que los pa¨ªses de bajos ingresos puedan acceder a las vacunas, ser¨¢ capaz de alcanzar su objetivo de inmunizar a los m¨¢s vulnerables en todo el mundo a lo largo de este a?o. (COVAX ha declarado a las autoras de The Bureau of Investigative Journalism que conf¨ªa en lograr su prop¨®sito y que espera superarlo). Los pa¨ªses de ingresos medios y bajos han cerrado acuerdos directamente con las empresas farmac¨¦uticas, pero hasta ahora solo se han asegurado el 32% del suministro, con el que tienen que llegar al 84% de la poblaci¨®n mundial.
En Israel, el pa¨ªs con el programa de vacunaci¨®n m¨¢s r¨¢pido del mundo, m¨¢s de una tercera parte de la poblaci¨®n ha recibido una dosis, y a m¨¢s de una quinta parte se le han administrado las dos. Los Territorios Palestinos todav¨ªa est¨¢n esperando que les lleguen las vacunas de COVAX, aunque Israel anunci¨® recientemente que enviar¨ªa 5.000 dosis para inmunizar al personal sanitario palestino de primera l¨ªnea.
¡°Nos encontramos ante una crisis de proporciones gigantescas¡±, afirma Fatima Hassan, fundadora de Iniciativa por la Justicia Sanitaria de Sud¨¢frica. ¡°Si ni siquiera en Sud¨¢frica podemos lograr que se vacune pronto al menos a la mitad de la poblaci¨®n, no me puedo imaginar c¨®mo se las van a arreglar en Zimbabue, Lesoto, Namibia y el resto de ?frica. Si esto sigue otros tres a?os, no vamos a conseguir la inmunidad continental ni mundial¡±.
La demanda supera a la oferta
Este acaparamiento fren¨¦tico de vacunas se debe a que la oferta es finita. Una vez desarrollada la vacuna, las empresas farmac¨¦uticas tienen que modificar el producto de manera que se pueda fabricar a escala industrial, antes de transferir la tecnolog¨ªa a las f¨¢bricas autorizadas de todo el mundo.
AstraZeneca, la empresa que est¨¢ detr¨¢s de la vacuna basada en adenovirus creada junto con la Universidad de Oxford, ha otorgado licencias para fabricar su producto a otras 10 empresas de Reino Unido, India, Brasil, Jap¨®n, Corea del Sur, China, Australia, Espa?a, M¨¦xico y Argentina, que se suman a sus propias f¨¢bricas en Reino Unido y Europa. Si bien la mayor¨ªa de estas compa?¨ªas solo tienen permiso para producir la vacuna para una zona geogr¨¢fica determinada, se trata al menos de un intento de fabricaci¨®n a escala global. Los activistas han criticado a otros gigantes farmac¨¦uticos por no otorgar licencias a m¨¢s fabricantes de todo el mundo.
Muchos de ellos se han centrado m¨¢s bien en abastecer a los pa¨ªses occidentales. La fundaci¨®n estadounidense Public Citizen ha descubierto que Pfizer/BioNTech ha garantizado solamente el 2% de su producci¨®n mundial a COVAX, mientras que el a?o pasado quienes conoc¨ªan los planes de Moderna pensaban que la empresa estadounidense se propon¨ªa dar prioridad a los pa¨ªses de renta alta. En enero, el Gobierno sudafricano hizo p¨²blico que Moderna no ten¨ªa la intenci¨®n de registrar su vacuna en el pa¨ªs.
Las vacunas de Pfizer y Moderna tambi¨¦n son mucho m¨¢s caras. Aunque muchos de los acuerdos de adquisici¨®n se han mantenido en secreto, la informaci¨®n filtrada por un alto cargo belga revel¨® que la Uni¨®n Europea pagaba entre dos y 18 d¨®lares por dosis, y que los preparados de ARN mensajero de Pfizer y Moderna eran los m¨¢s caros, con un precio superior a los 14 d¨®lares, mucho m¨¢s de lo que pueden permitirse los pa¨ªses de bajos ingresos.
Pfizer declar¨® que hab¨ªa ¡°reservado dosis para abastecer a pa¨ªses de rentas medias y bajas a un precio sin ¨¢nimo de lucro¡±.
En Uganda, al menos una empresa china ha sido autorizada a importar dosis para inmunizar a sus trabajadores chinos y a los familiares de estos antes que a los ugandeses
AstraZeneca ha prometido que su vacuna estar¨¢ disponible a perpetuidad a precio de coste en el Sur global (en los pa¨ªses occidentales hay un l¨ªmite de tiempo a¨²n no especificado para este precio). No obstante, algunos pa¨ªses pobres ya han pagado m¨¢s por la vacuna comercializada con otro nombre.
En India, donde se localiza gran parte de la producci¨®n farmac¨¦utica mundial, el Instituto Serum est¨¢ fabricando las mayores remesas de vacunas de AstraZeneca y Novavax. Sin embargo, dado que tiene una licencia no comercial para el preparado de AstraZeneca, puede exportar su propia versi¨®n ?Covishield? a 92 de los pa¨ªses m¨¢s pobres del mundo. A diferencia de AstraZeneca, el Instituto Serum no ha prometido mantener el precio de coste, y cobra tres d¨®lares la dosis a India, cinco a Sud¨¢frica y Brasil, y siete a Uganda, mientras que la Uni¨®n Europa pag¨® a AstraZeneca solamente dos d¨®lares. Ni AstraZeneca ni el Instituto Serum respondieron a la solicitud de comentarios.
Muchos pa¨ªses, en particular de Latinoam¨¦rica, Asia y Oriente Pr¨®ximo han recurrido a las vacunas rusas y chinas, que a¨²n no han sido aprobadas por lo que la Organizaci¨®n Mundial de la Salud denomina un regulador estricto. Seg¨²n la p¨¢gina web del fabricante, m¨¢s de 50 pa¨ªses han solicitado la vacuna rusa Sputnik V.
China ha administrado al menos 30 millones de dosis de su vacuna a sus ciudadanos, y Turqu¨ªa e Indonesia han empezado a hacerlo. El pasado mes de junio, el presidente chino Xi Jinping prometi¨® a los pa¨ªses africanos que ¡°ser¨ªan de los primeros en beneficiarse¡± de las vacunas chinas, pero no est¨¢ claro si les ha llegado alguna. En Uganda, al menos una empresa china ha sido autorizada a importar dosis para inmunizar a sus trabajadores chinos y a los familiares de estos antes que a los ugandeses.
Dado que el suministro inadecuado es la causa de los retrasos y la falta de equidad, muchos activistas y expertos en salud p¨²blica han pedido a las empresas farmac¨¦uticas que renuncien a las patentes a fin de permitir que m¨¢s f¨¢bricas produzcan vacunas. A los dos meses de que se declarara la pandemia, la OMS cre¨® un mecanismo para compartir la propiedad intelectual y los datos. La adhesi¨®n era voluntaria. Ni una sola empresa farmac¨¦utica ha participado en ¨¦l.
En octubre de 2020, un grupo de pa¨ªses, encabezados por India y Sud¨¢frica, pidi¨® a la Organizaci¨®n Mundial del Comercio que suspendiera temporalmente los derechos de propiedad intelectual sobre las vacunas y los medicamentos contra la covid-19, lo que significar¨ªa que cualquier fabricante de gen¨¦ricos podr¨ªa empezar a producirlos. Mientras que la OMS apoya la iniciativa, pa¨ªses como Estados Unidos, Canad¨¢, Australia, la Uni¨®n Europea y Reino Unido se han puesto de parte de las farmac¨¦uticas para oponerse a ella. Sin embargo, a consecuencia de la reciente disputa por los retrasos en el suministro de AstraZeneca en Europa, incluso el Consejo de la Uni¨®n Europea est¨¢ debatiendo la renuncia a los derechos de propiedad intelectual.
¡°Todos luchamos por un trozo de un pastel peque?o. ?Por qu¨¦ no aumentar el tama?o del pastel, de manera que todo el mundo pueda recibir el trozo que le corresponda?¡±, preguntaba Mogha Kamal-Yanni, asesora de pol¨ªtica sanitaria mundial de la Alianza Popular para las Vacunas, a la Oficina de Periodismo de Investigaci¨®n.
Pfizer declar¨® a dicha Oficina que quienes piden la suspensi¨®n de la propiedad intelectual ¡°no tienen en cuenta las circunstancias espec¨ªficas de cada situaci¨®n, cada producto y cada pa¨ªs¡±. Y a?adi¨®: ¡°Mucho despu¨¦s de que haya pasado la pandemia, la propiedad intelectual seguir¨¢ desempe?ando un papel fundamental para garantizar que el mundo est¨¢ preparado para dar soluciones innovadoras a futuras crisis sanitarias a escala planetaria, adem¨¢s de a otras necesidades m¨¦dicas urgentes¡±.
Voces cr¨ªticas de la industria farmac¨¦utica sostienen que no hay capacidad para producir excedentes por falta tanto de f¨¢bricas aprobadas como de t¨¦cnicos preparados, de manera que suspender las patentes no har¨ªa que aumentase el suministro.
Contar con COVAX
Debido a las dificultades para garantizar el suministro de vacunas, muchos pa¨ªses pobres depender¨¢n de COVAX, una organizaci¨®n creada en abril de 2020 para facilitar ¡°el acceso innovador y equitativo al diagn¨®stico, los tratamientos y las vacunas contra la covid¡±. El fondo est¨¢ coordinado por la OMS, la Coalici¨®n para las Innovaciones en Preparaci¨®n para Epidemias (CEPI) , y Gavi, la Alianza para la Vacunaci¨®n.
COVAX se ha propuesto suministrar 2.000 millones de dosis en todo el mundo de aqu¨ª a finales de 2021, incluidos al menos 1.300 millones para 92 pa¨ªses de ingresos medios y bajos. Con ello bastar¨ªa para inocular al 20% de la poblaci¨®n de cada pa¨ªs ?se dar¨ªa prioridad a los trabajadores de la salud, los ancianos y las personas con patolog¨ªas previas?, si bien este objetivo ha sido criticado por considerarlo insuficiente para luchar contra la pandemia.
COVAX ha negociado acuerdos por adelantado para estos 2.000 millones de dosis. Sin embargo, los analistas de la Universidad Duke creen que las dosis solo se podr¨¢n entregar este a?o, como estaba previsto, si el Instituto Serum puede producir los 900 millones encargados como ¡°opciones¡±, algo que consideran improbable dada la capacidad declarada p¨²blicamente por la empresa y los pedidos realizados. Los analistas calculan que COVAX suministrar¨¢ m¨¢s bien entre 650 y 950 millones de dosis repartidas entre 145 pa¨ªses, incluidos algunos con acuerdos confirmados para recibir un n¨²mero de vacunas suficiente para inmunizar varias veces a su poblaci¨®n.
¡°El problema es que Gavi nunca ha trabajado en una situaci¨®n de competencia por las vacunas con los pa¨ªses ricos¡±, observa Achal Prabhala, de AccessIBSA. ¡°Nunca se ha encontrado en una situaci¨®n en la que intentase proporcionar vacunas con una alt¨ªsima demanda a pa¨ªses en desarrollo y a pa¨ªses occidentales¡±. Se entiende que COVAX se basa en un acuerdo jur¨ªdicamente vinculante con el Instituto Serum para entregar todas sus dosis opcionales, y que sus cifras no incluyen las donadas por otros pa¨ªses.
Aunque muchos pa¨ªses con derecho a recibir las vacunas de la alianza ya han llegado a otros acuerdos para obtener dosis m¨¢s que suficientes, la incertidumbre sobre los retrasos hace que los pa¨ªses ricos, incluidos Canad¨¢ y Nueva Zelanda, hayan optado por recibir las vacunas de COVAX en la primera oleada, en lugar de esperar a que los pa¨ªses m¨¢s pobres recibiesen las suyas primero.
La organizaci¨®n declara: ¡°Hasta ahora no se hab¨ªa intentado nada como COVAX, pero sabemos lo que pasar¨ªa sin ella. Como vimos en la pandemia de H1N1 de 2009, los pa¨ªses que no pudieran pagar se quedar¨ªan sin vacunas durante un a?o o m¨¢s que los pa¨ªses m¨¢s ricos. Actualmente vamos bien encaminados para reducir este desfase a un par de meses¡±.
En enero, Cyril Ramaphosa, presidente de la Uni¨®n Africana, anunci¨® un acuerdo para 270 millones de vacunas de varios proveedores, e insinu¨® que el continente no depender¨ªa solamente de COVAX.
?Una v¨ªa m¨¢s justa?
Los expertos difieren en cuanto a las soluciones a la crisis de suministro de vacunas. La OMS ha pedido a los fabricantes que den prioridad al abastecimiento de COVAX, y ha instado a los pa¨ªses que han pedido m¨¢s dosis de las necesarias que hagan donaciones, si bien esto parece cada vez m¨¢s inaceptable desde el punto de vista pol¨ªtico dados los retrasos en las entregas que se est¨¢n produciendo.
Hasta hace poco, COVAX no hab¨ªa establecido un mecanismo de donaci¨®n y, por ahora, solo Noruega, que ha registrado menos de 600 muertes por covid-19, ha accedido a donar dosis al mismo tiempo que lleva a cabo su programa nacional de vacunaci¨®n. Canad¨¢ aportar¨¢ hasta cinco millones de d¨®lares canadienses al mecanismo, pero no puede comprometerse a fijar una fecha para empezar a entregar viales.
Aparte de este sistema, hay intentos independientes de donaci¨®n. La Uni¨®n Europea ha dado marcha atr¨¢s en sus propuestas anteriores de realizar donaciones a COVAX con regularidad, y ha acordado mandar vacunas para inmunizar a los profesionales de la sanidad de ?frica y el oeste de los Balcanes. Australia y Nueva Zelanda tienen planes similares de vender o donar a los pa¨ªses vecinos del Pac¨ªfico, el sudeste de Asia y las islas Polinesias.
Seg¨²n el Times, el secretario de Salud de Reino Unido, Matt Hancock, reconoci¨® que los 400 millones de dosis que hab¨ªa pedido su departamento ¡°superaban las necesidades de la poblaci¨®n brit¨¢nica¡±, y afirm¨® que el Gobierno ser¨ªa generoso sin dejar por ello de cumplir su programa de vacunaci¨®n.
Algunos activistas creen que la OMS comete una ingenuidad si cree que pedir a los pa¨ªses que hagan donaciones es una buena soluci¨®n. ¡°Sinceramente, pienso que es la soluci¨®n m¨¢s rid¨ªcula, inviable... y problem¨¢tica que he visto en mi vida¡±, zanja Prabhala. ¡°No entiendo c¨®mo en este momento alguien podr¨ªa justificar la donaci¨®n de sus vacunas sin que eso tuviese consecuencias¡±.
Un retraso mortal y destructivo
Sin un acceso igualitario a las vacunas, se teme que muchos pa¨ªses de bajos ingresos no tendr¨¢n reservas suficientes para inmunizar a segmentos clave de la poblaci¨®n, entre ellos los sanitarios, en 2021. Sobre el terreno, los trabajadores de la salud est¨¢n realizando un gran esfuerzo. ¡°La situaci¨®n es muy tensa¡±, denuncia Ireen Mutombwa, coordinadora de gesti¨®n de cat¨¢strofes nacionales de Cruz Roja de Sud¨¢frica. ¡°La vida de todos corre peligro, sobre todo cuando se trata de alguien que trabaja con la comunidad¡±.
A los cient¨ªficos tambi¨¦n les preocupa que permitir que el virus se propague sin freno en algunos pa¨ªses suponga un riesgo mayor para todos. ¡°Cuanto m¨¢s circule, m¨¢s probabilidades habr¨¢ de que mute¡±, explica Marie-Paule Kieny, vir¨®loga y directora de investigaci¨®n del Instituto Nacional de Investigaci¨®n en Salud y Medicina de Francia. Las cepas mutadas podr¨ªan causar m¨¢s muertes directas en los pa¨ªses con insuficiente cobertura de inmunizaci¨®n y provocar que las vacunas perdiesen efectividad con el tiempo.
Las cepas mutadas podr¨ªan causar m¨¢s muertes directas en los pa¨ªses con insuficiente cobertura de inmunizaci¨®n y provocar que las vacunas perdiesen efectividad con el tiempo
El coste econ¨®mico para el mundo podr¨ªa ser enorme. Un estudio de RAND Corporation calculaba que no repartir las vacunas contra la covid-19 de manera equitativa podr¨ªa costar a la econom¨ªa mundial hasta 1,2 billones de d¨®lares al a?o (otro estudio eleva todav¨ªa m¨¢s la cifra, a siete veces esa cantidad). La simulaci¨®n de RAND muestra que, aunque los pa¨ªses ricos vacunen a sus poblaciones, podr¨ªan seguir perdiendo alrededor de 119.000 millones de d¨®lares anuales en caso de negar el suministro a los pobres.
¡°Si se pregunta a una persona al azar por la calle, nunca pensar¨ªa que podamos ser econ¨®micamente dependientes de los pa¨ªses de bajos ingresos¡±, se?ala Marco Hafner, autor principal del estudio. Sin embargo, dado que los pa¨ªses ricos dependen de los v¨ªnculos comerciales a escala planetaria, la desaceleraci¨®n econ¨®mica de los pa¨ªses pobres causada por las restricciones relacionadas con la pandemia tendr¨¢ un efecto en cadena en todo el mundo.
¡°[Hay] verdaderos incentivos econ¨®micos para dar acceso equitativo a todo el mundo en vez de considerarlo una especie de acto de caridad¡±, advierte Hafner. ¡°Si se comparan los costes [de financiar a COVAX] con los beneficios solo para los pa¨ªses ricos, son insignificantes¡±.
¡°Los Gobiernos se est¨¢n dando cuenta de que el mantra ¡®nadie est¨¢ a salvo mientras no lo estemos todos¡¯ que llevan repitiendo mientras hacen lo contrario, es verdad, y que est¨¢n en peligro¡±, resume Kamal-Yanni. ¡°Debido a las mutaciones, los pa¨ªses est¨¢n adquiriendo conciencia de que no pueden limitarse a vacunar a su propia poblaci¨®n¡±.
En Reino Unido, Senam Agbesi y sus dos hermanos esperan viajar a Ghana en Navidad, cuando ya los hayan vacunado. Les parece injusto que ellos vayan a recibir la inyecci¨®n probablemente antes que su padre, que es m¨¢s vulnerable. ¡°Es muy frustrante¡±, lamenta Agbesi. ¡°En las noticias vemos la pelea pueril entre la Uni¨®n Europea y AstraZeneca. ¡®Yo, yo, yo¡¯. No demuestra m¨¢s que el ego¨ªsmo del mundo occidental¡±.
C¨®mo ponerse los primeros en la cola
Financien la investigaci¨®n necesaria para una vacuna eficaz
Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y Reino Unido invirtieron miles de millones en la vacuna de AstraZeneca, desarrollada por la Universidad de Oxford. Alemania invirti¨® 445 millones de d¨®lares en la vacuna creada por Pfizer y su socio alem¨¢n BioNTech. La vacuna de Moderna fue financiada en Estados Unidos casi exclusivamente por el Gobierno.
Hagan sus reservas cuanto antes
Estados Unidos, la Uni¨®n Europea y Reino Unido compraron miles de millones de dosis meses antes de que las vacunas fuesen aprobadas por los reguladores. ¡°No solo fueron los primeros en financiar la investigaci¨®n y el desarrollo, sino tambi¨¦n en hacer las reservas¡±, recuerda Achal Prabhala, de AccessIBSA. ¡°Parece l¨®gico que sean los primeros en recibir las dosis¡±.
Pague m¨¢s por dosis
Israel cerr¨® un acuerdo para recibir 10 millones de dosis y obtuvo la promesa de un suministro continuo por parte de Pfizer a cambio de datos de los receptores de la vacuna. Al parecer, el pa¨ªs tambi¨¦n pag¨® 30 d¨®lares por dosis, el doble del precio pagado por la Uni¨®n Europea.
Sea capaz de fabricar la vacuna usted mismo
India garantiz¨® suficientes vacunas para sus 1.400 millones de habitantes encarg¨¢ndose del grueso de la producci¨®n mundial. El Instituto Serum fabrica la mayor parte de las vacunas de AstraZeneca y Novavax, as¨ª como su propia versi¨®n del preparado de la primera con el nombre de Covishield. La empresa india de gen¨¦ricos Dr Reddy¡¯s tambi¨¦n ha firmado un acuerdo para fabricar y comercializar en India la vacuna rusa Sputnik V.
Este art¨ªculo se ha publicado originalmente en ingl¨¦s en The Bureau of Investigative Journalism.
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