?Puede la Inteligencia Artificial ¡®made in Africa¡¯ ayudar a Kenia a combatir la deforestaci¨®n?

En los ¨²ltimos a?os, los ¨¢rboles de Kenia se han visto amenazados. Franjas enteras de bosque se talan r¨¢pidamente, a menudo de forma ilegal, para dejar paso al ganado y los cultivos, y se cortan cantidades alarmantes de ¨¢rboles para fabricar carb¨®n vegetal. Los incendios forestales, m¨¢s intensos en los ¨²ltimos a?os debido al cambio clim¨¢tico, han reducido a cenizas extensiones gigantescas de bosque. A esas amenazas se le a?ade el contrabando de madera y la quema dom¨¦stica por parte de muchos kenianos para los que la le?a es el ¨²nico recurso a su alcance para cocinar.

La magnitud de las p¨¦rdidas es devastadora. Entre 2001 y 2023, Kenia perdi¨® casi 400.000 hect¨¢reas, el 12% de su cubierta forestal total, seg¨²n Global Forest Watch, que utiliza datos por sat¨¦lite para hacer un seguimiento de los cambios en la cubierta arb¨®rea a lo largo del tiempo. Son suficientes ¨¢rboles para almacenar unas 189 megatoneladas de di¨®xido de carbono o su equivalente, o los suficientes para absorber las emisiones anuales de 41 millones de coches.

En medio de la devastaci¨®n, una nueva generaci¨®n de kenianos expertos en tecnolog¨ªa intentan atajar esta problem¨¢tica con ayuda de la Inteligencia Artificial.

Un ejemplo de ello es M-Situ, una empresa keniana fundada en 2023 por Joseph Nguthiru y Sam Okemwa, dos licenciados en ingenier¨ªa civil. Nguthiru se encontraba en una conferencia en Grecia para j¨®venes emprendedores que buscan implementar cambios duraderos en sus comunidades, cuando se vio sorprendido por los incendios forestales que asolaban el pa¨ªs. Tambi¨¦n le llam¨® la atenci¨®n la manera en que la comunidad tecnol¨®gica griega utilizaba la tecnolog¨ªa para proteger sus bosques.

Cuando Nguthiru regres¨® a Kenia, se le ocurri¨® utilizar la misma tecnolog¨ªa y adaptarla a las principales amenazas medioambientales del pa¨ªs. ¡°Decidimos que, en lugar de ce?irnos a los incendios forestales, nos centrar¨ªamos en la deforestaci¨®n, y as¨ª naci¨® M-Situ¡±, explica Nguthiru.

M-Situ se especializa en lo que ellos llaman ¡°conservaci¨®n impulsada por Inteligencia Artificial (IA)¡±. Su proyecto piloto consiste en colocar peque?os dispositivos en los ¨¢rboles que act¨²en como sistema de alerta temprana de la deforestaci¨®n, los incendios forestales y la quema de carb¨®n.

Para ello, Nguthiru y Okemwa han entrenado un modelo de IA capaz de reconocer sonidos y gases que se correlacionan con amenazas inminentes, como el sonido de una motosierra o un hacha, o los gases que indican un incendio. Cuando el dispositivo detecta una amenaza, env¨ªa un SMS de alerta a los guardabosques del Servicio Forestal de Kenia para que puedan responder r¨¢pidamente. M-Situ es como un cuerpo de polic¨ªa no humano y descentralizado o un circuito cerrado de televisi¨®n forestal con una alarma¡±, explica Okemwa.

El programa piloto est¨¢ en el bosque de Ngong, a unos 12 kil¨®metros del centro de Nairobi, una extensi¨®n de naturaleza repleta de virgilias, cedros, crotones y fauna diversa. Los dispositivos solares de M-Situ pueden escanear un radio de uno a tres kil¨®metros y subir datos en tiempo real a la nube.

Seg¨²n Okemwa, el programa piloto ha reducido la tala en un 47% en la zona de prueba en comparaci¨®n con el mismo periodo del a?o pasado. Afirma que han conseguido proteger unas 1.500 hect¨¢reas del bosque de Ngong, considerado un punto caliente de tala en la zona. ¡°Los guardas no necesitan patrullar por todas partes, solo tienen que acudir cuando se detecta una amenaza y dirigirse a ese lugar concreto, lo que reduce el tiempo y los recursos empleados para proteger el bosque¡±, a?ade Nguthiru.

La r¨¢pida p¨¦rdida de ¨¢rboles es un asunto de vida o muerte en Kenia. La emblem¨¢tica fauna salvaje, en gran parte end¨¦mica de este pa¨ªs del este de ?frica, podr¨ªa desaparecer. Los ¨¢rboles de lugares como el bosque Mau de Kenia, que perdi¨® cerca del 20% de su cubierta arb¨®rea entre 2001 y 2022, se consideran vitales para almacenar el agua de lluvia. Eso significa que las inundaciones ser¨¢n m¨¢s mort¨ªferas. Los ¨¢rboles tambi¨¦n favorecen la salud del suelo. Si se pierden, el suelo se erosiona y la productividad agr¨ªcola disminuye. Esto agravar¨ªa la inseguridad alimentaria en un pa¨ªs donde millones de personas viven al borde de la hambruna.

Los dispositivos se ensamblan en Kenia, las placas base se fabrican localmente y el dispositivo se imprime en 3D. Solo el panel solar y algunos sensores proceden del extranjero, explica Okemwa. De momento, uno de los retos es conseguir que animales como los monos no manipulen los dispositivos, lo que podr¨ªa impedir que recibieran luz solar, explica Nguthiru.

Reverdecer ?frica

M-Situ no es la ¨²nica iniciativa que est¨¢ dando resultados. Otras herramientas de alta tecnolog¨ªa tambi¨¦n est¨¢n surtiendo efecto. Seg¨²n un informe del Instituto de Investigaci¨®n Forestal de Kenia, el ¨ªndice de deforestaci¨®n en el pa¨ªs ha disminuido un 20%, lo que ha permitido conservar unas 1.000 hect¨¢reas de bosque al a?o.

Otro ejemplo prometedor es la aplicaci¨®n Regreening Africa (Reverdecer ?frica en castellano). Ha sido dise?ada por el Centro Internacional de Investigaci¨®n Agroforestal (ICRAF) con sede en Nairobi y dedicado a cuestiones clim¨¢ticas y de biodiversidad centradas en los ¨¢rboles.

Regreening Africa recopila datos de los agricultores locales sobre aspectos como la vegetaci¨®n y la salud del suelo, y luego asigna a sus tierras las especies arb¨®reas y las t¨¦cnicas de restauraci¨®n apropiadas. El ICRAF tambi¨¦n forma a los agricultores en el uso de la aplicaci¨®n y la identificaci¨®n de los ¨¢rboles adecuados.

El agricultor Thomas Ochuka lleva dos a?os utiliz¨¢ndola y los resultados son impresionantes. Su explotaci¨®n, en el oeste de Kenia, ya ha duplicado su producci¨®n de ma¨ªz. La aplicaci¨®n le ayud¨® a plantar ¨¢rboles para reducir los da?os causados por el viento y dar sombra a sus cultivos, aumentando as¨ª el rendimiento. ¡°Recuerdo que no ten¨ªa ning¨²n inter¨¦s en plantar ¨¢rboles en mi granja mientras se tratara de cultivos de subsistencia¡±, explica Ochuka, de 36 a?os.

Cualquier persona puede utilizar la aplicaci¨®n. El objetivo inicial es recopilar tantos datos como sea posible. ¡°La segunda fase consistir¨¢ en poner esos datos a disposici¨®n de todos¡±, explica Muhammad Ahmad, funcionario del ICRAF que supervisa el proyecto.

Regreening Africa ha acumulado m¨¢s de 1.500 usuarios desde 2019 y ha recogido datos de m¨¢s de 180.000 agricultores. Se ha elaborado un mapa de las zonas donde se est¨¢ llevando a cabo la restauraci¨®n para poder identificar aquellas en las que se han logrado avances y que esto ayude a desarrollar planes futuros. Seg¨²n Mike Bourne, director del programa Regreening Africa, hasta la fecha se han restaurado en Kenia 253.905 hect¨¢reas de terreno durante la fase inicial de la aplicaci¨®n, fijada de 2017 a 2023.

¡°El objetivo principal del programa era revertir la degradaci¨®n de la tierra en un ¨¢rea de al menos un mill¨®n de hect¨¢reas de tierras agr¨ªcolas y comunales y beneficiar as¨ª a 500.000 hogares agr¨ªcolas en ocho pa¨ªses africanos de ?frica oriental y occidental¡±, explica Bourne. Muy pronto, la aplicaci¨®n podr¨¢ decir a los agricultores qu¨¦ especies de plantones hay disponibles en los viveros cercanos y sus precios. Otra funci¨®n de pr¨®xima aparici¨®n ayudar¨¢ a los pastores a crear microcuencas para retener el agua.

El desaf¨ªo de recopilar datos

Uno de los principales retos para todas las nuevas aplicaciones consiste en recopilar suficientes datos. ¡°Necesitamos datos para comprender el an¨¢lisis de tendencias, y aqu¨ª es donde puede entrar en juego la IA¡±, se?ala Akinyi Chemutai, experto independiente en energ¨ªas renovables e IA. ¡°Muchas de las razones por las que muchos programas, especialmente en ?frica, no tienen financiaci¨®n es porque no tienen datos o no se les da prioridad¡±, explica Chemutai durante una conversaci¨®n telef¨®nica. Ahmad, del proyecto Regreening Africa, comparte una preocupaci¨®n similar: ¡°Necesitamos m¨¢s voluntarios que recopilen datos y los introduzcan en la aplicaci¨®n¡±.

La tecnolog¨ªa tambi¨¦n tiene sus inconvenientes. ¡°Los modelos complejos de IA necesitan muchos datos y mucha energ¨ªa, lo que genera muchas emisiones¡±, afirma Charles Nyakumbo, ingeniero de automatizaci¨®n de Dimensions Data.

Aun as¨ª, los tecn¨®logos emprendedores de Kenia lo ven como el mejor camino a seguir. En el informe de la ONU sobre la situaci¨®n de los bosques en el mundo en 2024, se hablaba de la ¡°necesidad de innovar¡± para salvar las florestas del planeta. Eso es precisamente lo que muchos kenianos tienen en mente.