Cuando la fe se convierte al ecologismo
Diferentes confesiones religiosas participaron en la COP 26 y se al¨ªan en el Reino Unido para luchar contra el cambio clim¨¢tico
En la ¨²ltima conferencia internacional COP26 no se dieron cita tan solo jefes de Estado, lobbystas y activistas en defensa del medio ambiente. Tambi¨¦n se dieron por aludidos e hicieron acto de presencia en Glasgow (Escocia) representantes de diferentes confesiones religiosas, puesto que, seg¨²n ellos, para responder a la emergencia clim¨¢tica debe aplicarse el conocimiento de la ciencia pero tambi¨¦n hay que echar mano de la sabidur¨ªa que procede de la espiritualidad.
De hecho la crisis clim¨¢tica es, a su juicio, tambi¨¦n una crisis moral y espiritual sobre nuestra relaci¨®n con la Tierra. En el relato del G¨¦nesis en la Biblia queda claro que la humanidad no es propietaria de la creaci¨®n para su uso y abuso sino un mero administrador. Debe protegerla y pasarla a la nueva generaci¨®n en buen estado de salud.
La Eco Church se propone demostrar que la Buena Nueva es tambi¨¦n una buena noticia para la Tierra
La aparici¨®n puntual de l¨ªderes religiosos en un evento como la COP26 es solo la punta del iceberg que habla de la revoluci¨®n verde que est¨¢n viviendo muchas comunidades de fe locales. El Reino Unido es l¨ªder de este vendaval ecol¨®gico que est¨¢ barriendo por igual parroquias, iglesias, sinagogas y mezquitas pasando por encima de divisiones teol¨®gicas ancestrales. Ya los citamos en su d¨ªa como pioneros de la lucha ecol¨®gica en el post Bye, by, pl¨¢stico.
De la otra orilla del canal de la Mancha nos llegan ahora la Eco Church (ecoiglesia), la Eco Synagogue (ecosinagoga) y la Eco Mosque (ecomezquita). En el caso del sitio web musulm¨¢n, su mensaje se centra sobre todo en la importancia de reducir la huella de carbono de sus instituciones, se traten de mezquitas, madrasas o centros isl¨¢micos. Se lee en su p¨¢gina que los musulmanes suman un 20% de la poblaci¨®n mundial as¨ª que si la comunidad religiosa en bloque se asegurara de la bondad ecol¨®gica de sus edificios, el impacto global para el planeta ser¨ªa m¨¢s que considerable.
La Ecosinagoga, que re¨²ne cuatro denominaciones jud¨ªas, tiene como objetivo principal que todas las sinagogas brit¨¢nicas realicen una auditor¨ªa ambiental. Adem¨¢s de esta proponen talleres formativos, recursos en l¨ªnea as¨ª como eventos tales como el reciente ecoshabbat con motivo de la COP26. Entre las ideas para adaptarse al cambio clim¨¢tico, un men¨² para la cena del viernes totalmente de origen vegetal y eco-friendly.
Por ¨²ltimo la Ecoiglesia, promocionada por anglicanos y protestantes de Inglaterra y de Gales, proclama en su web que se propone demostrar que la Buena Nueva es tambi¨¦n una buena noticia para la Tierra. Pueden descargarse tambi¨¦n recursos para que los grupos de fe adecuen sus edificios y terrenos; para que se al¨ªen con los grupos medioambientales locales as¨ª como con las campa?as globales; y para que sometan tambi¨¦n a auditor¨ªa interna su estilo de vida de puertas adentro.
En Francia, donde yo vivo, est¨¢n surgiendo iniciativas parecidas a las brit¨¢nicas pero de menor alcance de momento. Est¨¢ ya en marcha en Internet la ?glise Verte (iglesia verde), un paraguas bajo el que se cobijan las tres grandes familias cristianas: cat¨®licos, protestantes y ortodoxos. Todos unidos para animarse unos a otros a llevar un estilo de vida eclesial y personal m¨¢s ecol¨®gico.
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