Rescatados 10 ni?os en Melilla que las mafias usaban como pasaportes humanos

Es otra de las muchas artima?as de las que se valen las redes de trata de seres humanos para introducir personas de manera irregular: comprar un ni?o y hacerlo pasar por hijo de una inmigrante para tener un salvoconducto. 10 de estos ni?os han sido rescatados por la Guardia Civil durante los dos a?os en los que se ha llevado a cabo la Operaci¨®n Herodoto, en la que han sido imputadas 12 personas que manifestaron ser padres biol¨®gicos de los menores con el fin de evitar un procedimiento de expulsi¨®n o de obtener un tratamiento preferente a la hora de acceder a Europa. Con la clausura de esta operaci¨®n, la Guardia Civil considera que esta pr¨¢ctica ha desaparecido.

La Operaci¨®n Herodoto se puso en marcha en 2011, cuando la Guardia Civil detect¨® un nuevo procedimiento utilizado por mafias internacionales de trata de seres humanos para hacer llegar inmigrantes a Melilla: embarcar a mujeres con menores de edad en pateras y hacerlos pasar por hijos de estas, cuando en realidad no lo eran, previo pago de unos 1.500 o 2.000 euros.

Los traficantes abusan de su superioridad y de la vulnerabilidad de los ni?os, normalmente menores de 10 a?os, y no dudan en poner en riesgo su integridad f¨ªsica. De hecho, en una ocasi¨®n se recuper¨® del mar el cuerpo de un menor que muri¨® ahogado y que no reclam¨® ninguna persona de las que iba en la patera de la que se cay¨®.

La trata, en cuatro fases

Las mafias que trafican con seres humanos act¨²an en varias fases:

1. Las v¨ªctimas son captadas en el pa¨ªs de origen mediante el boca a boca o en el entorno familiar o vecinal. Se les enga?a con ofertas de trabajo falsas o cartas de invitaci¨®n.
2. En la fase de traslado, las mafias entregan las documentaciones falsificadas (pasaportes, visados, billetes, etc.) a las v¨ªctimas, que luego son trasladadas por v¨ªa terrestre, mar¨ªtima o a¨¦rea hasta su lugar de destino.
3. Las v¨ªctimas son llevadas a lugares previstos para su alojamiento (pisos, naves agr¨ªcolas, casas de acogida temporal...) donde se les retiran los documentos. All¨ª suelen ser sometidos a violencia f¨ªsica y psicol¨®gica.
4. En la fase de explotaci¨®n, las v¨ªctimas, que no est¨¢n dadas de alta en la Seguridad Social, son sometidas a condiciones laborales inadecuadas, salarios bajos, horas de trabajo excesivas... En los casos m¨¢s extremos, son explotadas sexualmente u obligadas a practicar la mendicidad o la servidumbre.

La organizaci¨®n internacional de derechos humanos Women's Link Worlwide recalca que no se debe culpar a las mujeres que llevan consigo a estos menores porque ellas no deciden utilizarles, sino que son obligadas por las redes de trata. "Vemos indicios muy claros de que son personas victimas de trata, las autoridades tienen la obligaci¨®n de identificarlas antes de imputarles un delito. Estas mujeres seguramente van a pagar una pena de prisi¨®n y lo que hay que hacer es protegerlas, advierte Paloma Soria, abogada de Women's Link.

La oficina del Defensor del Pueblo fue la primera instituci¨®n de la voz de alarma sobre este fen¨®meno en su informe del a?o 2012, en el que llamaban la atenci¨®n acerca de la presencia de mujeres subsaharianas que llegan en patera a las costas espa?olas y que podr¨ªan ser v¨ªctimas de trata. "En este sentido llama la atenci¨®n que muchas de estas mujeres llegan acompa?adas de ni?os de corta edad o ellas mismas manifiestan ser menores de edad", reza el documento.

Para comprobar estas sospechas, la Guardia Civil puso en marcha un protocolo en el que han participado Interpol, la fiscal¨ªa de menores, el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla, la Direcci¨®n General del Menor y la Familia de la Consejer¨ªa de Bienestar Social y Sanidad de la misma ciudad y la Universidad de Granada, responsable de realizar pruebas de ADN a estos menores. "Lleg¨® un momento en que vimos, incluso, que varias familias que resid¨ªan en el CETI abandonaban el centro; sab¨ªan que pod¨ªan ser investigados", apunta un portavoz de la Guardia Civil de Melilla.

En los ¨²ltimos dos a?os, se ha realizado la prueba de ADN a 12 personas de origen subsahariano y argelino y a los ni?os que viajaban con ellas. El resultado ha revelado que en 10 casos, no hab¨ªa ning¨²n v¨ªnculo biol¨®gico entre los los padres y sus supuestos hijos. "Cuando fue vox populi que los ni?os que llegaban eran sometidos a pruebas de ADN, los resultados s¨ª empezaron a corresponderse entre padres e hijos, con lo cual podemos confirmar que esta pr¨¢ctica se ha neutralizado por parte de las mafias", asegura el portavoz del instituto armado. Poco m¨¢s se ha sabido de la identidad real de estos menores. "Hablamos de ni?os que vienen de terceros pa¨ªses, pa¨ªses en conflicto. Es muy dif¨ªcil constatar quienes son", justifica el agente.

Las situaciones y supuestos a los que se han enfrentado los investigadores durante estos dos ¨²ltimos a?os han sido muy variadas: en algunos casos, cuando la embarcaci¨®n era interceptada por la Guardia Civil, los inmigrantes que iban en ella han amenazado con tirar el menor al agua o prender fuego a la patera. Tambi¨¦n se dio el caso de un menor que sali¨® del CETI de Melilla con su supuesta madre biol¨®gica y que volvi¨® a entrar tiempo despu¨¦s con otra identidad y otra madre. Otro de los ni?os rescatados fue vendido por su madre verdadera por 20.000 dinares y fue utilizado por diversas mujeres en varias ocasiones.

Estos 10 ni?os son 10 peque?as gotas en el oc¨¦ano de casos relacionados con el tr¨¢fico de seres humanos. ?De d¨®nde vienen? "Pueden nacer tanto en el camino desde el pa¨ªs de origen hasta la frontera como en Marruecos, una vez llegados", explica Soria. "Las mujeres v¨ªctimas de trata no tienen ning¨²n derecho a decidir sobre sus cuerpos, sufren episodios de violencia durante el camino y se quedan embarazadas. Si conviene que nazca el ni?o para pasarlo en patera, nacer¨¢. Si no conviene, las hacen abortar", denuncia la abogada.

En este caso, los 10 menores han quedado tutelados por los servicios sociales de la Ciudad Aut¨®noma de Melilla pero, de no haberles rescatado, se hubieran enfrentado a un futuro incierto. Una vez salen del CETI, dif¨ªcilmente se les podr¨ªa haber seguido el rastro. "Hubieran sido abandonados o los hubieran seguido utilizando para introducir inmigrantes o para otra cosa peor. La trata de seres humanos tiene muchas caras", aseguran desde la Guardia Civil.