Los ¨²ltimos pasos de las dos j¨®venes asesinadas en Cuenca
Las dos quedaron para ir a la casa del exnovio de una de ellas y recoger los efectos personales. Ah¨ª se perdi¨® su pista
La unidad canina de la Polic¨ªa Nacional hab¨ªa registrado este mi¨¦rcoles una finca en Chillar¨®n de Cuenca, propiedad de la familia de Sergio Morate, el exnovio de una de las dos j¨®venes desaparecidas desde el pasado jueves. Los agentes hab¨ªan inspeccionado la vivienda durante m¨¢s de dos horas. La familia del joven, de unos 30 a?os, tiene en este lugar un almac¨¦n relacionado con la venta de muebles antiguos.
Estos son los principales puntos en los que el rastro de las dos j¨®venes y el exnovio de una de ellos se hab¨ªa perdido.
Barrio del Pozo de las Nieves. De all¨ª, del segundo piso de un edificio de dos plantas de ese vecindario humilde, sali¨® Laura hacia las cinco de la tarde del jueves pasado para reunirse con su amiga Marina. Iban juntas a recoger algunas prendas de ropa y efectos personales de Marina a casa de su exnovio, Sergio Morante. Usaron el coche de Laura para acudir al domicilio del joven, a no m¨¢s de kil¨®metro y medio de distancia. Los tres est¨¢n desaparecidos desde ese jueves.
Ars Natura. Es la urbanizaci¨®n vallada de nueva construcci¨®n en la que viv¨ªa Sergio Morante. Est¨¢ rodeada de un parque y de descampados. Se trata de una zona de desarrollo urban¨ªstico de la ciudad. La polic¨ªa registr¨® durante m¨¢s de cinco horas la casa, el martes pasado, sin que, hasta el momento, se haya encontrado alguna pista del paradero de ninguno de los tres.
Calle Las Torcas. Es una calle que colinda con la urbanizaci¨®n Ars Natura. All¨ª apareci¨® el coche de Laura con su bolso, su m¨®vil y sus pastillas para la enfermedad coronaria que padece. Lo encontraron sus propios padres de regreso de la comisar¨ªa de polic¨ªa, donde el viernes de madrugada interpusieron una denuncia por la desaparici¨®n de su hija.
Palomera. Es el pueblo de origen de Sergio Morante, adonde supuestamente condujo y mantuvo retenida a una novia anterior, a la que despu¨¦s liber¨®. Por aquellos hechos pesan sobre ¨¦l antecedentes por malos tratos y detenci¨®n ilegal, que le han convertido en el principal sospechoso de la desaparici¨®n. La polic¨ªa reconstruy¨® los pasos de aquel cautiverio con su protagonista, una chica tambi¨¦n de Cuenca, sin encontrar ni rastro de Laura y Marina en el min¨²sculo pueblo (apenas cien habitantes en invierno), donde sus padres tienen una casa y su abuela regent¨® el bar de la plaza, La Gabriela, hasta que fue ingresada en una residencia. En ese local, seg¨²n los mismos vecinos, trabaj¨® Marina hace dos veranos. Existe el rumor ¡ªno contrastado¡ª de que una vecina del pueblo vio all¨ª a Sergio paseando a sus perros el mismo jueves por la noche.
Los tel¨¦fonos m¨®viles. Ninguno de los tres ha tenido actividad alguna desde el pasado jueves por la tarde. En el tel¨¦fono de Laura, encontrado extra?amente en su coche, el ¨²ltimo mensaje es de las cinco de la tarde. Se trata de un mensaje de WhatsApp de Marina en el que le dice: "Baja".
Las tarjetas de cr¨¦dito. Tampoco se ha registrado ninguna actividad en las tarjetas del principal sospechoso.
El coche de Sergio. Los vecinos echan en falta el veh¨ªculo que sol¨ªa usar Sergio Morante, que tampoco ha vuelto a ser visto desde el mismo jueves de su desaparici¨®n.
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