Los nacionalistas ayudan a Rajoy para que pueda controlar el Congreso

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Mariano Rajoy super¨® este martes con ¨¦xito el primer escal¨®n de la nueva legislatura. Incluso, con m¨¢s ¨¦xito del previsto porque a su pacto con Ciudadanos para controlar el Congreso sum¨® la ayuda de los partidos nacionalistas, soberanistas e independentistas, de los que ha estado muy alejado durante a?os.

Converg¨¨ncia, PNV y ERC permitieron con su abstenci¨®n que fuera elegida Ana Pastor como presidenta del Congreso, frente al socialista Patxi L¨®pez, candidato alternativo a la del PP. Tambi¨¦n porque 10 diputados de esos partidos nacionalistas sumaron sus votos para que fueran elegidos los dem¨¢s miembros de la Mesa, seg¨²n el pacto del PP con Ciudadanos. PSOE y Podemos no tienen dudas de que esos votos proced¨ªan de Converg¨¨ncia y PNV. Los nacionalistas vascos lo niegan.

El presidente del Gobierno en funciones quer¨ªa que la sesi¨®n de apertura de la XII Legislatura en el Congreso sirviera para visualizar que el PP mantiene su poder, aunque tenga una minor¨ªa exigua de 137 esca?os. Quer¨ªa que la cifra del d¨ªa fuera los 169 esca?os que sum¨® con Ciudadanos para la elecci¨®n de Ana Pastor, apuntando a un acuerdo que pretende mostrar como posible con Albert Rivera para su investidura. Y quer¨ªa dar imagen de cambio de ciclo y de di¨¢logo sumando m¨¢s acuerdos y apoyos.

Todo eso lo consigui¨®, porque los partidos nacionalistas, soberanistas o independentistas ayudaron con su actuaci¨®n a que PP y Ciudadanos tengan el control del Congreso. Esa coincidencia dej¨® adem¨¢s en evidencia que no hay opci¨®n a una mayor¨ªa alternativa porque PSOE y Podemos no suman y necesitan a partidos nacionalistas que no parecen estar por la labor. M¨¢s bien al contrario, se pusieron en el pleno al lado del PP.

Esta vez no hubo casi escenificaciones y espect¨¢culo en el hemiciclo, como las que protagonizaron el 13 de enero los diputados de Podemos. S¨®lo salieron del guion las f¨®rmulas diferentes para jurar en la toma de posesi¨®n del esca?o y se vivi¨® esta vez un clima mucho m¨¢s tranquilo y menos tenso que el de aquel d¨ªa, cuando se visualiz¨® el supuesto final del bipartidismo. S¨ª se mantiene la incertidumbre por la formaci¨®n de Gobierno y la sorpresa fue esta vez la posici¨®n de los partidos que antes eran descalificados por el PP como los que quer¨ªan romper Espa?a.

El control del Congreso lo consigue Rajoy con la mayor¨ªa de la Mesa, junto a Ciudadanos, y situando al frente de las Cortes a una de las personas de mayor confianza. Ese control es fundamental para disponer de los tiempos de la investidura o para decidir la actividad de la C¨¢mara si se demora la elecci¨®n de presidente del Gobierno. De hecho, Ana Pastor, hasta ahora ministra de Fomento en funciones, fue uno de los miembros del Gobierno que dio plant¨®n al Congreso y se neg¨® a someterse a su control en la anterior breve legislatura.

Hasta el lunes, Ciudadanos sosten¨ªa, precisamente por eso, que el presidente del Congreso deb¨ªa ser de distinto partido que el mayoritario, es decir, que el PP. El partido de Rivera tendr¨¢ gracias a ese acuerdo dos puestos en la Mesa que no le correspond¨ªan con sus esca?os. Pastor fue elegida presidenta en la segunda vuelta de la votaci¨®n secreta, frente al candidato socialista Patxi L¨®pez con 169 votos frente a 155 y 25 votos en blanco.

En la primera votaci¨®n se presentaron Pastor, L¨®pez, Xavier Dom¨¨nech (Podemos) y Francesc Homs (Converg¨¨ncia). La opci¨®n de Dom¨¨nech decay¨® por la falta de apoyo de los nacionalistas, soberanistas e independentistas. En segunda vuelta, Podemos apoy¨® a L¨®pez, pero tampoco fue suficiente porque no lo hicieron los nacionalistas. PNV, Converg¨¨ncia y ERC votaron en blanco.

En la segunda vuelta, la candidata del PP no sum¨® ning¨²n voto m¨¢s, pero se vio favorecida por el voto en blanco de los nacionalistas e independentistas que si hubieran apoyado en bloque a L¨®pez hubieran podido derrotar a la diputada del PP.

Votos cambiados

Adem¨¢s, hubo 10 votos de partidos nacionalistas que sirvieron para la elecci¨®n de miembros de PP y Ciudadanos en la Mesa. Al ser votaci¨®n secreta es imposible determinar su color concreto, pero fuentes parlamentarias apuntaban a Converg¨¨ncia, al PNV y a Coalici¨®n Canaria. Converg¨¨ncia necesita apoyo de PP y Ciudadanos para tener grupo parlamentario propio con aplicaci¨®n flexible del reglamento y el PNV logr¨® este martes un lugar en la Mesa del Senado, cedido por el PP.

Para el PP, el pacto con Ciudadanos es un paso para que este partido cambie de la abstenci¨®n al voto favorable en la investidura que Rajoy pretende para el 2 de agosto. Ese voto favorable no es suficiente, pero servir¨ªa para presionar al PSOE para que cambie el no que a d¨ªa de hoy mantiene.

Ciudadanos se desvincula de cualquier apoyo de los partidos nacionalistas y fuentes de este partido aseguran que se opondr¨¢n a que Converg¨¨ncia tenga grupo propio gracias a la aplicaci¨®n flexible del reglamento. No obstante, PP, PSOE y Podemos en la Mesa s¨ª est¨¢n a favor por aplicaci¨®n de la costumbre.

Otra cosa es el grupo para las confluencias gallegas, catalana y valenciana de Podemos, que no llegaron a plantear en la pasada legislatura y que no tiene ninguna opci¨®n de ser aceptada porque supone contravenir una prohibici¨®n expresa del reglamento.