Casado se la juega solo

Los m¨¢s modernos del equipo de Pablo Casado, las llaman ¡°campa?as racimo¡±. Para justificar que el l¨ªder siga su camino electoral por Espa?a solo, sin compartir ni competir en los escenarios con otros dirigentes, ni siquiera con los m¨¢s relevantes o conocidos, sean estos expresidentes del Gobierno, presidentes auton¨®micos en ejercicio o vicesecretarios nacionales del partido. En el PP, adem¨¢s, tampoco hay a prop¨®sito un n¨²mero dos claro. ¡°Habr¨¢ varias caravanas para ser m¨¢s efectivos y cubrir m¨¢s territorio¡±, ilustran los estrategas del l¨ªder. Como descubridor del invento de las campa?as racimo se reconoce al gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o que, en oto?o de 2012, vio las orejas al lobo ante sus elecciones auton¨®micas pocos meses despu¨¦s de la llegada de Mariano Rajoy a La Moncloa y de Crist¨®bal Montoro a Hacienda con los traum¨¢ticos recortes y las nunca prometidas subidas de impuestos.

Feij¨®o se present¨® entonces solo ante los focos: suspendi¨® una convenci¨®n municipal del partido en su territorio, se desmarc¨® de las medidas m¨¢s dolorosas, obvi¨® el tradicional logo de la gaviota o el cham¨¢n del PP y depur¨® al m¨¢ximo las visitas de otros dirigentes nacionales en Galicia, a los que adem¨¢s mand¨® por otros derroteros galaicos para evitar fotos conjuntas. Fue un modelo que le dio resultado y que se copi¨® a s¨ª mismo m¨¢s tarde, en posteriores citas con las urnas, con el resultado de varias mayor¨ªas absolutas cuyo m¨¦rito se atribuy¨® en exclusiva.

En el PP de Casado sostienen que Juan Manuel Moreno, el candidato popular para Andaluc¨ªa, y hoy presidente de la Junta, ya imit¨® esa idea con ¨¦xito y de hecho en esos recientes comicios andaluces se desplegaron hasta cuatro caravanas populares. Casado y Moreno cumpl¨ªan sus propias rutas sin verse. El presidente popular lleg¨® a aparecer en seis actos algunos d¨ªas.

Ahora habr¨¢ un convoy principal con Casado y los medios de comunicaci¨®n nacionales, y luego varios m¨¢s, que discurrir¨¢n por su cuenta y en paralelo, sin cruzarse: el de Aznar (al que est¨¢n pidiendo cada vez en m¨¢s territorios y tiene actos previstos en Catalu?a, la Comunidad Valenciana, Murcia, Andaluc¨ªa y Castilla y Le¨®n); los de otros dirigentes nacionales y los de algunos presidentes auton¨®micos.

Mariano Rajoy se dejar¨¢ ver para apoyar a amigos candidatos por Galicia. Todas esas excursiones se pretenden coordinar desde la sede central en G¨¦nova 13, pero algunas organizaciones est¨¢n programando a su gusto.

La expedici¨®n de Casado recorrer¨¢ todas las autonom¨ªas, 21 provincias y 15.000 kil¨®metros, pero esta vez bien asfaltados. Se acab¨® el campo, las vacas, los tomates, los tractores y la Espa?a vaciada, que ya ha visitado en su larga precampa?a que comenz¨® nada m¨¢s ser elegido en el congreso del partido en julio. Habr¨¢ excepciones. Ahora se va a jugar la mayor en las capitales m¨¢s pobladas: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Alicante, M¨¢laga, Murcia, Zaragoza... Esas ocho provincias reparten 136 de los 350 esca?os.

En el PP, y en casi todos los partidos, ya apenas creen en los grandes m¨ªtines, que son ahora muy excepcionales. Ni plazas de toros ni campos de f¨²tbol ni casi pabellones. El candidato prefiere los actos sectoriales m¨¢s concretos, para desgranar el programa por sectores y grupos. Le gustan las visitas a empresas, f¨¢bricas o asociaciones de todo tipo de colectivos profesionales. Y le agrada presentarse ante las pantallas, a la hora de hablar, sobre una tarima peque?a, al aire libre y con un fondo paisaj¨ªstico espectacular: desde un paseo mar¨ªtimo, el Parador de San Marcos, en Le¨®n, o la Alhambra.

En el calendario de trabajo de Casado hay dos huecos simb¨®licos y significativos. Los dos martes reservados para los debates a¨²n sin confirmar (el supuesto cara a cara de Mediaset el 16 de abril y el duelo a cinco en Atresmedia el 23) y la Semana Santa. Sobre los debates, a¨²n est¨¢n por resolver las negociaciones p¨²blicas y privadas entre los partidos y las televisiones, pero el PP no se quiere imaginar renunciando a esa oportunidad que el PSOE ahora no ve tan prioritaria para los intereses de Pedro S¨¢nchez. Se est¨¢n haciendo de rogar y apurar¨¢n al m¨¢ximo. Si no hubiera combate dial¨¦ctico entre los aspirantes a la presidencia, el PP tendr¨ªa que resolver su problema interno con la carencia de un n¨²mero dos claro y potente. En el entorno de Casado s¨ª resuelven que ese hueco no lo ocupa el actual n¨²mero dos por Madrid, Adolfo Su¨¢rez Illana, como era tradici¨®n. Ya se ver¨¢.

En Semana Santa, Casado no quiere ni librar ni enturbiar las sagradas tradiciones. El jueves y viernes santo estar¨¢ en Sevilla, M¨¢laga, Granada y Lorca (Murcia) pero sin actividad oficial. Habr¨¢ im¨¢genes y manifestaciones facilitadas por el partido para dejar constancia de su presencia y respaldo en varias procesiones pero de forma m¨¢s discreta, sin decenas de c¨¢maras, micr¨®fonos y periodistas tras su estela.