La familia de los desaparecidos en el Estrecho: ¡°No queremos perder la esperanza, pero pasan las horas¡±

Conforme pasan las horas, el ¨¢nimo empieza a desmoronarse entre los familiares de los seis tripulantes del R¨²a Mar, el pesquero que lleva desaparecido desde la madrugada del pasado jueves. Todos pasaron la noche y todo el d¨ªa del viernes en la sede de la Federaci¨®n Andaluza de Asociaciones Pesqueras (Faape), en el puerto de Algeciras (C¨¢diz), de donde son vecinos. Saben del peligro que entra?a la mar y que cada minuto cuenta. De momento, no hay noticias ni de la nave ni de sus ocupantes y la esperanza se va tornando poco a poco en angustia.

¡°No queremos perder la esperanza, pero pasan las horas y eso no es bueno¡±, explicaba Pedro Maza, presidente de Faape y hermano del patr¨®n, Javier de 52 a?os, y el mec¨¢nico, ?ngel, de 60, del R¨²a Mar.? A ¨²ltima hora de la tarde, las autoridades, sin embargo, no les trasladaban buenas noticias. La radiobaliza, que se activ¨® alrededor de la una de la madrugada del jueves a 28 millas al Oeste de cabo Espartel (Marruecos) no fue activada manualmente. "Salt¨® de manera autom¨¢tica, lo que reduce las posibilidades de pensar que tuvieron tiempo de abandonar el barco antes", explica a este diario el alcalde de Algeciras, Juan Ignacio Landaluce, que se ha volcado con las familias desde el primer momento. "Podr¨ªa haberse activado mec¨¢nicamente por hundimiento o porque se haya podido tirar al agua", a?ade.

La radiobaliza se activa autom¨¢ticamente porque detecta la presi¨®n de agua, lo que implicar¨ªa que el barco puede haber volcado o haber haberse hundido, se?alan los expertos consultados. La radiobaliza es un dispositivo de socorro del tama?o de una botella de vino que emite se?ales de frecuencia por sat¨¦lite reservadas solo para emergencias. Su activaci¨®n inicia la coordinaci¨®n de equipos de b¨²squeda y rescate en cualquier parte del mundo.

El paso del tiempo va perfilando como plausibles las peores hip¨®tesis y enterrando las m¨¢s halag¨¹e?as. La Guardia Civil trabaja con la sospecha de que el barco pudo hundirse como consecuencia del fuerte temporal y ha descartando la teor¨ªa de que fuera embestido por un mercante, tras investigar la traza de los buques y barcos que estaban en la zona en el momento en que se activ¨® la se?al de la radiobaliza.

Salvamento Mar¨ªtimo no ceja en la b¨²squeda de los tripulantes, pero ha activado una segunda operaci¨®n submarina para tratar de localizar la embarcaci¨®n. Para ello contar¨¢ desde ma?ana con un sonar facilitado por el Instituto Hidrogr¨¢fico de la Marina, que ir¨¢ a bordo de un Salvamar y de un robot de b¨²squeda submarina, que esta tarde ha ido a recoger a la costa el buque remolcador Sas Mastelero, que pas¨® toda la noche del jueves patrullando el mar. La principal dificultad de este operativo es la gran profundidad, m¨¢s de 500 metros, de las aguas del cabo Espartel.

"El sonar permite un barrido debajo del agua, el radar del Sasemar 101 [otra de las aeronaves, junto al helic¨®ptero Helimer 207 de Salvamento Mar¨ªtimo y el Cucor de la Guardia Civil que participan en las labores de rescate] solo en la superficie", se?alan fuentes de Salvamento Mar¨ªtimo. Al operativo se han sumado a lo largo del d¨ªa la Salvamar Arcturus, desde Tarifa, el guardamar Concepci¨®n Arenal, que se ha incorporado desde Almer¨ªa, y el buque de la Armada BAM Rel¨¢mpago.

M¨¢s de una veintena de efectivos trabaja en altamar. Mientras, en el puerto de Algeciras los ¨¢nimos se van desmoronando. "Pasan las horas y nos dicen que no han dado con ellos y para nosotros es desesperante", cuentan desde la Faape. Aunque hubieran podido abandonar el barco, 24 horas en el Atl¨¢ntico y en el invierno lastran las opciones de que hayan podido sobrevivir, pero desde la sede del Federaci¨®n tratan de avivar la llama de optimismo. "Hay que mantener la esperanza", insisten. "Nosotros nos hemos criado en el mar. Mis hermanos llevan toda la vida faenando¡±, se?ala Maza. El barco, dedicado a la pesca con palangre de fondo, se construy¨® en 1997 y pas¨® una revisi¨®n en mayo del a?o pasado. ¡°Quien tiene m¨¢s informaci¨®n es mi hijo [el armador del R¨²a Mar], pero estaba en buen¨ªsimas condiciones¡±, abunda Maza

Colaboraci¨®n de Marruecos

Landaluce destaca la colaboraci¨®n del Reino de Marruecos en el operativo de b¨²squeda. "Nunca ha habido una predisposici¨®n as¨ª", destaca el alcalde. ¡°Primero con patrulleras de la Gendarmer¨ªa y cuando se retiraron por las condiciones del mar, se sumaron barcos de guerra de la Armada de Marruecos¡±, indica el alcalde. Su participaci¨®n reduce las opciones de que pudieran haber sido retenidos por una patrullera de ese pa¨ªs.

¡°La mala mar, la espuma de las olas, enmascara cualquier objeto o cuerpo¡±, advierte el alcalde. Las aguas del cabo Espartel lindan con el embudo en el que se convierte el paso por el Estrecho para los buques mercantes en ruta. All¨ª van transitando de manera ordenada, conforme a las instrucciones de Tarifa Mar. ¡°Un barco grande puede haberles dado un topetazo¡±, aventuraba Landaluce, verbalizando otra de las hip¨®tesis que ayer barajaban los familiares de la tripulaci¨®n. La Guardia Civil ya no baraja esa opci¨®n.

El alcalde cuenta que las patrulleras marroqu¨ªes avistaron ayer un pesquero con caracter¨ªsticas similares al R¨²a Mar, pero que no pudieron entrar en contacto con ellos por el mal tiempo. Un cabo al que los familiares tambi¨¦n se aferran para no perder la esperanza a la espera de recibir alguna certeza del incierto mar.