Diez a?os para encontrar el santo grial de las bater¨ªas
El mercado del almacenamiento de energ¨ªa podr¨ªa mover 250.000 millones de euros al a?o a partir de 2025, y Europa quiere su parte del pastel
Las bater¨ªas del futuro hay que vestirlas despacio. "Cuando uno trabaja a corto plazo, generalmente lo hace bajo el dictamen de la industria, bajo la influencia del producto actual. Las cosas que puedes hacer est¨¢n muy condicionadas por lo que ya hay", explica Oscar Miguel, director de CIDETEC Energy Storage. El departamento que lidera en esta organizaci¨®n de investigaci¨®n donostiarra acaba de sumarse al consorcio que podr¨ªa cambiar el mercado de las bater¨ªas en Europa: Battery 2030+. "El objetivo es desarrollar hojas de ruta tecnol¨®gicas para desarrollar bater¨ªas que superen a las actuales en prestaciones", adelanta.
Si todo sale bien, el resultado tendr¨ªa que ser digno de unos Juegos Ol¨ªmpicos: m¨¢s r¨¢pido, m¨¢s alto, m¨¢s fuerte... M¨¢s todo. Battery 2030+ est¨¢ llamado a ser la punta de lanza del desarrollo de una nueva generaci¨®n de bater¨ªas con rendimientos mucho m¨¢s elevados tanto en potencia como en almacenamiento, mejores sistemas de seguridad, menores tiempos de carga y aptas para reutilizarse y reciclarse de forma m¨¢s eficiente. "Las bater¨ªas que cumplan estas especificaciones revolucionar¨¢n el actual sistema energ¨¦tico y abrir¨¢n la puerta a aplicaciones radicalmente nuevas, algunas de las cuales solo podemos imaginar en la actualidad", proclamaba el manifiesto que acompa?¨® al lanzamiento de la iniciativa europea.
Una vez definidas las l¨ªneas de trabajo, la convocatoria est¨¢ abierta a toda Europa. "Podr¨¢n trabajar todos los actores industriales. La red de investigaci¨®n europea va mucho m¨¢s all¨¢ del consorcio", asegura Miguel. Al alinear los esfuerzos de todo este entramado, la Comisi¨®n Europea espera conquistar una parte del mercado de la automoci¨®n que ahora est¨¢ instalada fuera del continente. "Hoy por hoy, el elemento individual, lo que llamamos la celda, se compra en Asia. Ah¨ª es donde est¨¢n los principales fabricantes. En Europa lo que se hace es la ingenier¨ªa, la integraci¨®n en el veh¨ªculo. Ah¨ª es donde est¨¢ esa gran potencia industrial, pero con dependencia de Asia", se?ala el responsable de la divisi¨®n almacenamiento de energ¨ªa de CIDETEC.
- Tonto el ¨²ltimo que invente la bater¨ªa definitiva
Quien desarrolle las bater¨ªas que completen, por fin, el rompecabezas del coche el¨¦ctrico tendr¨¢ ante s¨ª un mercado que a partir de 2025 podr¨ªa alcanzar un valor de 250.000 millones de euros. La demanda ya existe. "Va a haber necesidad de bater¨ªas. La industria europea preferir¨ªa tener opciones competitivas e innovadoras localmente en Europa", se?ala Miguel. Adem¨¢s, este mercado no se limitar¨¢ a alimentar autom¨®viles. "Sin duda se beneficiar¨¢ el sector estacionario, que tiene un mont¨®n de aplicaciones, desde generaci¨®n hasta transmisi¨®n, distribuci¨®n y usuario final. La idea es que todo ese mundo se beneficie de la fuerza tractora del sector de la automoci¨®n".
No encajan tanto en este proyecto, aunque tal vez podr¨ªan recibir un empujoncito colateral, las bater¨ªas port¨¢tiles que hoy en d¨ªa nos acompa?an a todas partes a bordo de nuestros dispositivos electr¨®nicos. "No es una prioridad en Europa, porque aqu¨ª no tenemos empresas que fabriquen componentes electr¨®nicos. Est¨¢n en Asia. Pero eso no quita que luego haya casos de nicho", explica el representante de CIDETEC.
Su plazo para cambiar el futuro es diez a?os. "Si uno aspira a desarrollar tecnolog¨ªas con vistas al largo plazo, se es m¨¢s libre de elegir conceptos nuevos, probarlos, pasar a otros si no funcionan¡ A corto plazo, el abanico de opciones a explorar se estrecha mucho", razona Miguel.
- Verde o nada
De acuerdo con las reglas de las bater¨ªas actuales, potenciar una caracter¨ªstica exige que las dem¨¢s paguen el precio. "Hoy podemos tener bater¨ªas de carga r¨¢pida o de alta potencia, pero esto se logra a expensas de reducir la capacidad de almacenar energ¨ªa. Por eso pretendemos dar con una tecnolog¨ªa que permita, en la media de lo posible, cubrir todos estos factores simult¨¢neamente", precisa Miguel. Pero responder a este reto exige cumplir un requisito inquebrantable: la bater¨ªa del futuro tiene que ser sostenible: "Por un lado, Europa tiene materias primas limitadas. Por otro, nadie quiere que las tecnolog¨ªas del futuro vayan por los caminos del pasado. Queremos que el beneficio que tiene un veh¨ªculo sin emisiones no sea a expensas de fabricar una bater¨ªa con un gran impacto".
En este apartado tambi¨¦n es clave el reciclaje. Una asignatura que Espa?a ya tiene suspendida con las bater¨ªas port¨¢tiles. En Europa, se da una nueva vida al 26,4 de los residuos recolectados en este ¨¢mbito, en Espa?a este porcentaje cae al 15,8%, de acuerdo con los datos de Eurostat. Por detr¨¢s de nosotros solo caen Chequia, Portugal, Irlanda, Chipre, Bulgaria y Ruman¨ªa. En las ant¨ªpodas est¨¢n Letonia y B¨¦lgica, que respectivamente reciclan un 77% y un 62% de las bater¨ªas port¨¢tiles y acumuladores acumulados como residuos. "Las pol¨ªticas adecuadas, la formaci¨®n adecuada y unos canales de recogida y gesti¨®n adecuados tendr¨ªan que ser capaces de solventarlo", prescribe Miguel.
Reciclaje de bater¨ªas port¨¢tiles y acumuladores en Europa
Porcentaje de lo recolectado
Fuente: Eurostat
Desde su punto de vista, el mayor obst¨¢culo no est¨¢ tanto en la parte t¨¦cnica como en el modelo de negocio de las empresas de reciclado. "La tendencia actual es abaratar las bater¨ªas en la medida de lo posible. Una manera de lograr esto es usar materiales m¨¢s baratos. El cobalto es un material cat¨®dico cl¨¢sico en las bater¨ªas de dispositivos port¨¢tiles, pero en un coche o un autob¨²s, hay que minimizar su cantidad porque hace que las bater¨ªas sean caras", explica. Este ahorro impacta directamente en la rentabilidad del posterior aprovechamiento de los materiales. "A medida que se abaratan las bater¨ªas, crece el reto para las empresas de reciclado, porque ven que el producto de ese proceso no vale tanto", contin¨²a Miguel. ?Su receta para corregir esta tendencia? Regulaci¨®n.
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