?Dejar¨¢ de valer lo que sabes hacer?: el coronavirus aumenta el riesgo de la obsolescencia de los contenidos

La necesidad de la formaci¨®n continua lleva a?os convertida en un dogma laboral. En consecuencia, tanto los profesionales como las propias compa?¨ªas dedican mucho tiempo y dinero a adquirir conocimientos, de lo m¨¢s variado. Desde, por supuesto, los idiomas, hasta capacitaciones t¨¦cnicas de todo tipo, pasando por cursos de inteligencia emocional o liderazgo en equipo.

Pero, como en todos los ¨¢mbitos, la formaci¨®n para el ¨¢mbito profesional tambi¨¦n se encuentra en pleno cambio, adapt¨¢ndose r¨¢pidamente a las consecuencias de la pandemia del Covid. El virus, que oblig¨® al planeta a aprender a teletrabajar en cuesti¨®n de d¨ªas, tambi¨¦n tendr¨¢ consecuencias a medio plazo, cuando dej¨¦ de convertirse en una amenaza muy cercana para la mera rutina de la actividad profesional. De momento, ya se valoran m¨¢s algunas ¡®soft skills¡¯, es decir, habilidades relacionadas con el ¨¢mbito social, como la automotivaci¨®n, la autonom¨ªa y la capacidad de trabajar en equipo, algo m¨¢s complicado en remoto. Y es a¨²n m¨¢s imprescindible moverse con soltura -t¨¦cnica y mental- en el ¨¢mbito digital.

Para analizar estos fen¨®menos, Retina organiz¨® recientemente, en colaboraci¨®n con Work Caf¨¦ Santander, un encuentro online, con el t¨ªtulo ¡®Formaci¨®n continua y personalizada: ?Nuevas aptitudes para la nueva normalidad?¡¯ All¨ª se incidi¨® en varias de las l¨ªneas que ya se adelantaban en el apartado de Formaci¨®n del Observatorio de Tendencias 2020 de Retina, como la necesidad de la actualizaci¨®n constante de los conocimientos.

Aptitudes y actitudes

Las aptitudes tambi¨¦n sufren obsolescencia, y para esquivar ese problema se necesita actitudes concretas. La realidad impone un cambio de mentalidad: frente a la concepci¨®n pasada de los cursos de formaci¨®n como algo que ofrec¨ªa la empresa, y que muchas veces se cumpl¨ªa casi como un tr¨¢mite para agradar al jefe, ¡°los profesionales se est¨¢n dando cuenta de lo importante que es asumir su responsabilidad en su desarrollo¡±, afirm¨® Ibrahim Jabary, CEO de Gamelearn, empresa especializada en el uso de la ¡®gamificaci¨®n¡¯ para la formaci¨®n. ¡°Todo se puede aprender jugando, y el cerebro humano siempre est¨¢ preparado para jugar: el truco est¨¢ en disponer bien el tablero de juego¡±, dice al explicar lo que hace su empresa.

Desde ese lado, el de la oferta de formaci¨®n, el reto es ¡°conectar con la motivaci¨®n individual, que es algo que a veces el sistema aplasta¡±, coment¨® Mariana Costa, cofundadora y CEO de la empresa de origen peruano Laboratoria. ¡°Tenemos que lograr que la gente conecte con su responsabilidad de aprender, que no lo haga porque se lo dicen o le obligan. La capacidad de aprender a aprender es lo m¨¢s importante¡±.

Laboratoria es un buen ejemplo de las enormes posibilidades, tambi¨¦n sociales, que abre la digitalizaci¨®n para la formaci¨®n. Costa explic¨® como la empresa naci¨® como una compa?¨ªa de software, pero ante la carencia de perfiles t¨¦cnicos especializados, especialmente femeninos, empez¨® una labor de formaci¨®n, hace ya siete a?os, con ¡®bootcamps¡¯ de seis meses de duraci¨®n. Aquel hacer de la necesidad virtud es hoy una red de formaci¨®n digital para mujeres presente en cinco pa¨ªses hispanoamericanos, de Guadalajara (M¨¦xico) a Santiago de Chile. ¡°El poder del aprendizaje colaborativo, donde no existen las fronteras, es muy valioso¡±, enfatiz¨® Costa desde Lima.

Su empresa naci¨® de un problema: la universidad no ofrece lo que el mercado laboral necesita. ¡°Sus tasas de empleabilidad son en algunas ocasiones baj¨ªsimas, y parecer¨ªa que te dijesen ¡®si no encuentras trabajo, no es mi problema¡¯¡±, lament¨® Costa. En esa misma l¨ªnea incidi¨® Azahara Palomero, fundadora y CEO DE Looking for Talent, consultora especializada en ¡®headhunting¡¯ y desarrollo de carrera profesional: ¡°El sistema educativo no ofrece la formaci¨®n necesaria para la incorporaci¨®n al mercado laboral¡±.

Consecuentemente, ¡°las empresas cada vez dan menos importancia a la formaci¨®n reglada, a las universidades¡±. Eso no significa que ¨¦stas tengan necesariamente un mal futuro: ¡°En realidad lo tienen m¨¢s f¨¢cil que nadie¡±, asegur¨® la cazatalentos, ¡°pues cuentan con instalaciones, recursos, y profesores¡­ pero deben ponerse las pilas y adaptarse, como hacen constantemente las empresas. Han de abrir la mente y aceptar que todo est¨¢ cambiando¡±.

No todo es digital en la formaci¨®n que ya est¨¢ viniendo, ni siquiera lo relacionado con la gamificaci¨®n, el ¨¢rea de especializaci¨®n de Jabary. ¡°Se aprende haciendo, y recibiendo opiniones y recomendaciones sobre lo hecho. Ese ¡®feedback¡¯ es m¨¢s dif¨ªcil en el ¨¢mbito digital, donde tambi¨¦n se complica la creaci¨®n de din¨¢micas de equipo¡±, un ¨¢rea en el que la formaci¨®n tiene mucho que decir.

El futuro pinta incierto, pero precisamente por esa falta de previsibilidad apunta a que la formaci¨®n continua ser¨¢ una necesidad, evolucionando, seg¨²n los expertos de la mesa, a formatos a¨²n menos te¨®ricos. En tiempos de zozobra social, pol¨ªtica y econ¨®mica, la necesidad del reaprendizaje continuo puede resultar estresante, pero la buena noticia es que gana peso la iniciativa individual, y nunca tantos contenidos de calidad han estado tan al alcance.