La escalofriante historia de Miss Raisa, la rapera catalana musulmana que vive con escolta policial

La rapera catalana Miss Raisa, de origen tangerino pero residente en Espa?a desde los ocho a?os, llevaba velo hasta hace unos meses. Consideraba que vestirse con un pa?uelo combinado con gorras y otros accesorios era un acto ¨ªntimo que ejerc¨ªa desde la libertad y que no ten¨ªa que ocultar; un reflejo de la diversidad que ensalza en sus canciones, de su personalidad y de la religi¨®n musulmana inculcada por sus padres marroqu¨ªes desde un humilde piso en el barrio de La Barceloneta. Pero en verano sinti¨® la necesidad de quit¨¢rselo porque no quer¨ªa verse reducida a una prenda. De nuevo, justific¨® s...

La rapera catalana Miss Raisa, de origen tangerino pero residente en Espa?a desde los ocho a?os, llevaba velo hasta hace unos meses. Consideraba que vestirse con un pa?uelo combinado con gorras y otros accesorios era un acto ¨ªntimo que ejerc¨ªa desde la libertad y que no ten¨ªa que ocultar; un reflejo de la diversidad que ensalza en sus canciones, de su personalidad y de la religi¨®n musulmana inculcada por sus padres marroqu¨ªes desde un humilde piso en el barrio de La Barceloneta. Pero en verano sinti¨® la necesidad de quit¨¢rselo porque no quer¨ªa verse reducida a una prenda. De nuevo, justific¨® su decisi¨®n en la libertad de las mujeres a poder tambi¨¦n desterrar el velo de sus vestuarios, revoluci¨®n que ha prendido con fuerza en Ir¨¢n a ra¨ªz de la muerte de Masha Amini. Las consecuencias no tardaron en llegar para Imane Raissali, cuyo nombre art¨ªstico es Miss Raisa: sufre acoso en redes sociales (en TikTok supera el medio mill¨®n de seguidores), lo que le ha conducido a pedir y recibir protecci¨®n policial.

¡°Me amenazaron con decapitarme por quitarme el velo¡±, afirma la cantante de 26 a?os. Sucede en un v¨ªdeo de siete minutos y medio de un chico joven que justificaba su asesinato a ra¨ªz de que ella hiciera p¨²blico que se desprend¨ªa del hiyab y que apoyaba al colectivo LGTBI. A pesar de que Miss Raisa est¨¢ acostumbrada a convivir con cientos de insultos en redes, muchos de ellos provenientes de la comunidad musulmana que considera que la m¨²sica es haram?(pecado, en ¨¢rabe), este episodio traspas¨® todos los l¨ªmites. ¡°La chica que me cogi¨® la denuncia me dijo que no llegar¨ªa a ning¨²n lado y yo sal¨ª de ah¨ª supercabreada porque pensaba: ¡®?No ves que en el v¨ªdeo me est¨¢ amenazando con que me va a ir a buscar all¨¢ donde est¨¦ y que me va a cortar la cabeza porque dice que Dios le ha dado la responsabilidad de ejecutarme?¡±, recuerda. Pero al cabo de un par de d¨ªas la llamaron para calificar su caso de muy grave: ¡°Estuve reuni¨¦ndome con un inspector y me ofrecieron incluso escolta. De hecho, hasta el d¨ªa de hoy tengo una patrulla que est¨¢ al lado de mi casa vigilando. Tambi¨¦n en los conciertos¡±.

El 80 % de las mujeres ha sufrido alguna situaci¨®n de acoso en redes sociales, con mayor prevalencia en aquellas que disponen de un perfil p¨²blico y son activas en las plataformas, seg¨²n el ¨²ltimo informe de marzo del Instituto de las Mujeres. Este estudio muestra que existe una normalizaci¨®n del problema por tener lugar en el ¨¢mbito virtual, y que casi la mitad de las j¨®venes no denuncian ni comparten el acoso al solucionar la situaci¨®n ellas solas bloqueando el perfil del acosador o privatizando su cuenta. En la mayor¨ªa de los casos, las j¨®venes encuentran su principal apoyo en las amigas. Adem¨¢s, 7 de cada 10 cambian sus h¨¢bitos fuera de las redes como consecuencia del acoso.

A Miss Raisa la polic¨ªa le recomend¨® que por seguridad rompiera con sus rutinas y que no llevara a su hija al colegio por el mismo camino. ¡°Yo tampoco s¨¦ hasta qu¨¦ punto es real la amenaza. A lo mejor me quieren hacer da?o o a lo mejor solo se queda en palabras vac¨ªas, pero¡­ ?y si no? Y no solo fue ese v¨ªdeo, sino que hab¨ªa mucha gente que reafirmaba las palabras de ese t¨ªo y no sab¨ªas muy bien identificar qui¨¦nes eran. Llegaron a grabarme dentro del colegio de mi hija en una reuni¨®n del AMPA. Eso fue terrible porque saben d¨®nde est¨¢ la debilidad de toda madre¡±, declara la autora del libro Pondr¨¦ los colores, que lleg¨® con ocho a?os a Barcelona cuando su padre, pescador ya fallecido, consigui¨® el dinero suficiente para que la familia empezara una nueva vida en la Ciudad Condal.

Sobre las revueltas en Ir¨¢n, Miss Raisa considera que manifestarse es un acto de valent¨ªa ¡°en un pa¨ªs donde no les tiembla el pulso si te tienen que reventar o te tienen que matar para que te calles¡±. Pero piensa que el miedo a llevar el velo mal puesto no solo ocurre en pa¨ªses lejanos. Ella misma ha tenido que enfrentarse a ese juicio por coloc¨¢rselo de distintas maneras sin dejar a un lado la moda. ¡°Y ahora me dicen que no valgo nada porque no lo llevo, como si el valor de una mujer residiera en la forma de vestir. Otros me acusan de haberme vendido a los occidentales o que soy capaz de cualquier cosa por fama y dinero. No saben lo duro que ha sido para m¨ª tomar esta decisi¨®n. No es solo enfrentarte a la gente en redes sociales, es enfrentarte a la propia familia¡±, declara.

La madre de Miss Raisa es analfabeta, no sabe leer ni escribir. En su ¨¦poca no pudo estudiar y ejerci¨® de cuidadora para poder aportar algo de dinero en casa. La relaci¨®n entre ambas no ha estado exenta de altibajos. El ¨²ltimo tuvo como escenario TikTok. Su madre, usuaria de esta red, vio los v¨ªdeos que insultaban a su hija por no llevar velo, una decisi¨®n que ella tampoco apoyaba. ¡°Yo estoy m¨¢s preparada psicol¨®gicamente para todo ese odio, pero ?c¨®mo lo gestiona mi madre? Estuvo un mes sin hablarme. Hay cosas que no le gustan, pero le digo: ¡®No te estoy pidiendo permiso. Yo te informo porque te respeto y porque te quiero, pero tienes que aceptar que esta vida es m¨ªa¡±, confiesa.

Uno de los objetivos de las letras de Miss Raisa es que las chicas inmigrantes que son parte de la cultura espa?ola, pero que no quieren renegar de sus ra¨ªces, no se sientan solas cuando se enfrenten al peso de las miradas por llevar pa?uelo o al posible rechazo en una entrevista de trabajo. Pero durante este ¨²ltimo a?o ha reflexionado en otra direcci¨®n: ¡°?Qu¨¦ es lo que hace a Miss Raisa, las ideas o el velo? Siempre he huido de representar algo porque luego te encasillan y no te permiten ser otra cosa, y yo no soy la chica del velo. Yo soy Raisa, artista, escritora, feminista, conferenciante, hago v¨ªdeos, soy madre y soy psic¨®loga¡±.

Nadie con repercusi¨®n medi¨¢tica en la comunidad musulmana la ha defendido de las amenazas, lamenta Miss Raisa. El premio TikTok a la diversidad o el m¨¢s reciente galard¨®n cultural Premis Continuar¨¤ de RTVE parecen no ser suficientes. ¡°Hay una discriminaci¨®n y un machismo terribles dentro de la comunidad musulmana y es de las cosas m¨¢s invisibilizadas. Yo me hago conocida como rapera, me dicen que soy una pecadora ?y nadie sale a defenderme? En lugar de decir: ¡®Raisa est¨¢ promoviendo valores muy bonitos. Est¨¢ abriendo camino y dando visibilidad a la mujer musulmana y a la multiculturalidad¡¯. Borran las cosas buenas y se fijan en las negativas¡±, concluye.