?Ni?os en casa? Decora con el m¨¦todo Montessori

En Espa?a, l¨ªder en la Uni¨®n Europea en abandono escolar (solo nos superan Malta y Ruman¨ªa), la b¨²squeda de nuevos modelos educativos es mucho m¨¢s que una moda. Y entre esas alternativas formas de aprender, una de las m¨¢s atractivas es el m¨¦todo Montessori, un paradigma educativo que suena novedoso pero no lo es: ¡°Es un estilo de educaci¨®n creado a principios del siglo XX por la doctora Mar¨ªa Montessori, quien, al trabajar con ni?os, se dio cuenta del entusiasmo que presentaban hacia el aprendizaje si se encontraban en el ambiente adecuado. Es decir, en un aula con el mobiliario adaptado a su altura, materiales para trabajar, libertad de movimiento y, lo m¨¢s importante, una persona que les guiara en su desarrollo. A trav¨¦s de la observaci¨®n, Montessori dedic¨® su vida para crear y difundir un m¨¦todo de aprendizaje que es m¨¢s una filosof¨ªa de vida, cuyo protagonista principal es el ser humano¡±, explica a S Moda Macarena Pretel Ram¨ªrez, gu¨ªa Montessori de 0 a 6 a?os y codirectora de la pionera en Espa?a Escuela Infantil Montessori, fundada por sus padres en 1984 en Alicante.

La importancia de un gu¨ªa atento
¡°El papel del docente es esencial en los ambientes Montessori, ya que este se encarga de crear y mantener una atm¨®sfera de respeto y valores universales, donde el ni?o se pueda sentir seguro, valorado y respetado¡±, prosigue, ¡°el docente es llamado gu¨ªa, pues su misi¨®n es observar al ni?o y presentarle aquellos materiales adecuados en cada momento para que pueda desarrollar todas sus potencialidades y convertirse en un ser humano preparado para la vida real¡±. Cada vez m¨¢s hay m¨¢s escuelas que instruyen a los menores de esta forma porque cada vez hay m¨¢s padres interesados en las grandes diferencias que tiene respecto a la educaci¨®n tradicional, sobre todo su visi¨®n respetuosa hacia la infancia y la originalidad de sus materiales y t¨¦cnicas.

Pero, ?c¨®mo es un d¨ªa en una escuela Montessori? Macarena Pretel nos cuenta que se fomenta un ambiente democr¨¢tico, con unos l¨ªmites muy marcados, ¡°donde es el propio ni?o quien se marca su propio ritmo de aprendizaje. Dentro de la rutina diaria, hay un tiempo ininterrumpido destinado para el trabajo con los materiales Montessori, donde la libertad de movimiento posibilita que el ni?o est¨¦ en contacto directo con el ambiente y pueda hacer las cosas por s¨ª mismo¡±. La independencia y la autonom¨ªa son esenciales. ¡°Por todo el aula, est¨¢n repartidas mesas individuales y tapetes en el suelo para que el ni?o, una vez que ha elegido el material con el que quiere trabajar, pueda decidir d¨®nde ponerse y adquirir la concentraci¨®n que necesita para desarrollar las habilidades necesarias para seguir creciendo¡±, a?ade.

Un entorno a su escala
El trabajo del gu¨ªa y los menores en la escuela y la actitud de respeto hacia el ni?o son la base de este m¨¦todo, pero tambi¨¦n es fundamental crear un entorno a su medida en casa. ¡°La clave del ¨¦xito es adaptar a su altura todo aquello que utiliza el ni?o en el hogar y guardar por una larga temporada aquellos objetos que pueden ser peligrosos o importantes y que no queremos que se rompan, evitando as¨ª tener que decir ¡®no¡¯ o ¡®no toques eso¡¯¡±, explica Pretel. ¡°A partir de ah¨ª, ya solo hay que pararse a pensar en cu¨¢les son las rutinas del ni?o y qu¨¦ espacios suele utilizar, ofreci¨¦ndole la accesibilidad a todo lo que necesite para que tenga la independencia necesaria¡±. Seg¨²n esta gu¨ªa, todo aquello que inspire al ni?o armon¨ªa, orden y belleza?ser¨¢ la mejor opci¨®n. A nivel m¨¢s concreto, la radiograf¨ªa de una casa Montessori ideal contempla estos espacios.

En el RECIBIDOR podemos poner una percha a la altura del ni?o para que deje su chaqueta o la mochila del colegio.

En el ASEO, un taburete para que llegue con facilidad al inodoro y lavabo y adaptar la organizaci¨®n de los peines y otros productos de limpieza del cabello y el cuerpo, por ejemplo, con botes peque?os para que le resulte m¨¢s f¨¢cil abrirlos y cerrarlos.

La HABITACI?N DEL NI?O es el espacio m¨¢s importante de la casa, es por ello que debe de contar ¨²nicamente con lo esencial, la cama (al principio estar¨¢ en el suelo para que el ni?o se pueda levantar por ¨¦l mismo y conforme vaya creciendo se vaya regulando), un armario a su altura con dos o tres cambios por cada prenda, para que el ni?o tenga la opci¨®n de escoger su ropa, una alfombra o fut¨®n con un espejo para que el ni?o realice sus actividades y un mueble horizontal a su altura con los materiales o juguetes necesarios, que se ir¨¢n cambiando, todos ellos organizados en bandejas o cestas.

A EVITAR: Cualquier pieza delicada que nos obligue a rega?ar al ni?o constantemente o negarle su acceso (mejor esconderlas). Como objetos prohibidos, la experta recalca todos aquellos que obstaculizan su independencia como la cuna, los corrales, los tacataca, el uso excesivo de hamacas y tronas, etc.

COLORES: La habitaci¨®n debe ser un lugar donde pueda encontrar la calma y la paz, por eso se recomiendan los colores neutros o pasteles, evitando los tonos que provoquen estr¨¦s en el ni?o.