¡®Los amantes del C¨ªrculo Polar¡¯ cumple 20 a?os sin perder su magia
La pel¨ªcula de Julio Medem se convirti¨®, desde su estreno en septiembre de 1998, en un film de culto y sin¨®nimo del amor m¨¢s arrebatado. Pero, ?sigue manteniendo su encanto o ha sido (otra) v¨ªctima m¨¢s del paso del tiempo?
En una secuencia de El ¨¢rbol de la sangre, la nueva pel¨ªcula de Julio Medem que se estrenar¨¢ el pr¨®ximo 1 de noviembre, dos estudiantes de cine y amantes (Ursula Corber¨® y ?lvaro Cervantes) comparten una habitaci¨®n universitaria que est¨¢ decorada con? p¨®sters de Volver, de Pedro Almod¨®var; Pan negro, de Agust¨ª Villaronga; y Alas de mariposa, de Juanma Bajo Ulloa. Como el director donostiarra no suele dejar nada al azar en sus pel¨ªculas, est¨¢ c...
En una secuencia de El ¨¢rbol de la sangre, la nueva pel¨ªcula de Julio Medem que se estrenar¨¢ el pr¨®ximo 1 de noviembre, dos estudiantes de cine y amantes (Ursula Corber¨® y ?lvaro Cervantes) comparten una habitaci¨®n universitaria que est¨¢ decorada con? p¨®sters de Volver, de Pedro Almod¨®var; Pan negro, de Agust¨ª Villaronga; y Alas de mariposa, de Juanma Bajo Ulloa. Como el director donostiarra no suele dejar nada al azar en sus pel¨ªculas, est¨¢ claro que ah¨ª hay un mensaje (poco) cifrado para sus fans: sus propios gustos cinematogr¨¢ficos. Pero si hubiera sido realista tendr¨ªa que haber colocado una imagen de Los amantes del C¨ªrculo Polar, porque su pel¨ªcula es, desde su estreno ahora hace veinte a?os, uno de los pocos t¨ªtulos de culto que ha dado el cine espa?ol recientemente. Y, adem¨¢s, sigue sumando fans entre las nuevas generaciones.
¡°La casualidad que est¨¢bamos esperando¡±, le escribe Ana a Otto, es decir Najwa Nimri a Fele Mart¨ªnez. Esta es una de esas frases que recorren durante m¨¢s de una hora y media el viaje circular, repleto de casualidades, de estos enamorados con destino a Laponia. El primer fin de semana de septiembre de 1998 se estrenaba Los amantes del C¨ªrculo Polar, de Julio Medem, que ya hab¨ªa demostrado tener un universo propio (frase hueca m¨¢s que recurrente) con pel¨ªculas como La ardilla roja o Tierra. Pero con su cuarto largometraje consigui¨® dos cosas importantes: subrayar su habitual ¨¦xito cr¨ªtico con una buena taquilla y, de paso, acercarse al p¨²blico m¨¢s joven, que se vio muy identificado con la historia de amour fou entre sus dos protagonistas.
Pero como todo film m¨ªtico, este tambi¨¦n tiene sus detractores que ¨Co bien por ir a la contra o porque realmente consideran que la pel¨ªcula no es m¨¢s que una sucesi¨®n de im¨¢genes cursis, frases de autoayuda y secuencias previas a un viaje lis¨¦rgico¨C la pusieron en lo m¨¢s alto de su altar de los odios y no la bajan de all¨ª desde hace veinte a?os. El debate sigue abierto, sobre todo a la vista de los t¨ªtulos que ha estrenado despu¨¦s su director. Pero lo ¨²nico que est¨¢ claro es que la pel¨ªcula, al contrario de lo que les pasa a muchas de las estrenadas en la d¨¦cada de los noventa, ha superado con nota muy alta el paso del tiempo. Y eso es por algunas de estas razones:
Ana-Otto-Otto-Ana: nombres ¡®capic¨²as¡¯ como dice la protagonista femenina, que es el algo que? trae suerte y que no se borra. Para quien no haya visto la pel¨ªcula, una breve sinopsis sin spoilers: Los amantes del C¨ªrculo Polar es la historia de amor de dos j¨®venes que comienza cuando son ni?os y que les lleva ya de adultos hasta Laponia (Finlandia). As¨ª se simple y as¨ª de complejo lo cuenta Julio Medem. El director donostiarra retuerce el relato, alternando las voces de los dos narradores (se van sucediendo los cap¨ªtulos con sus nombres) y d¨¢ndole una forma circular que le impide cerrarse por completo. Es esa forma de dar vueltas a la historia tan reconocible que vuelve locos a sus seguidores y que terminar por desquiciar a sus detractores.
?Frases magistrales o sacadas de un libro de un libro de citas ¡®wonderful¡¯?: ?Me gusta que haga fr¨ªo?, ?todo caduca con el tiempo, el amor tambi¨¦n?, ?si se acaba la gasolina, me muero?, ?se puede correr hacia atr¨¢s?, ?nadie tiene un coraz¨®n como el de Otto, yo tampoco?, ?cuando hace fr¨ªo, la mayor¨ªa de las cosas van m¨¢s deprisa?, ?yo tambi¨¦n quiero estar enamorada?, ?t¨² no est¨¢s muerto, as¨ª que no voy a llorar?, ?nunca he tenido el coraz¨®n tan rojo?, ?s¨ª pod¨ªa contar mi vida uniendo casualidades?¡ O la m¨¢s memorable de todas (en forma de nota que Ana le pasa a Otto cuando son unos adolescentes): ?Esta noche te espero en mi cuarto. Salta por la ventana. ?Valiente!?. El listado pod¨ªa seguir, hasta ocupar pr¨¢cticamente todo el gui¨®n. Hay quien se lleg¨® a aprender muchas de estas de memoria y se fue a recitarlas al mism¨ªsimo C¨ªrculo Polar en sus vacaciones, mientras escuchaba de fondo la (emocionante) banda sonora compuesta por Alberto Iglesias. En fin.
Los ¡®looks¡¯ de Nawja Nimri y Fele Mart¨ªnez: ella con el pelo corto a lo gar?on antes de que lo volviera a poner de moda Audrey Tautou con su Am¨¦lie (pel¨ªcula que se sit¨²a en las ant¨ªpodas en cuanto a su concepto de romanticismo) y con su jersey de lana que la abriga mientras contempla el d¨ªa sin noche del Polo Norte. Y ¨¦l con coleta y parca XXL, a mitad de camino entre un h¨¦roe rom¨¢ntico y un nerd universitario. En esto tambi¨¦n hay que reconocer el acierto de Medem, supo ponerse a la altura de los noventa (para bien y para mal) en cuanto a moda. Para los actores estos personajes no se han convertido en una maldici¨®n, algo que suele ser habitual ante papeles tan potentes. Nawja Nimri va estrenar pel¨ªculas con Carlos Vermut (Qui¨¦n te cantar¨¢), la citada de Medem (El ¨¢rbol de? la sangre) y est¨¢ en la tele en Vis a Vis. Mientras que Fele Mart¨ªnez participa en la serie Estoy vivo y en teatro acaba de estrenar Todas las mujeres, basada en la pel¨ªcula de Mariano Barroso.
Las casualidades existen (aunque para algunos resulten incre¨ªbles): la m¨¢s recordada es la que lleva a Ana y a Otto a coincidirse (sin encontrarse ni verse) en la Plaza Mayor de Madrid. Desde el discurso de Ana Botella para promocionar la candidatura ol¨ªmpica de la ciudad, nadie le hab¨ªa hecho un favor tan grande a la popularidad de este lugar (ni de sus terrazas). Ana tambi¨¦n se reencuentra en ese momento con el marido de su profesora de cuando era una ni?a. ?Ya no quedan casualidades buenas?, asegura. Pero todo tiene un l¨ªmite. Que la madre de Ana (a la que interpreta Maru Valdivieso) se encuentre con un productor de TVE en una tienda, ¨¦ste se quede prendado de ella y que comience a presentar el Telediario casi de inmediato parece ser esa barrera que separa lo veros¨ªmil de los sonrojante. Toda la pel¨ªcula es, en el fondo, esa causalidad que estaban esperando los personajes protagonistas.
El amor a. de I. (antes de Instagram): hablar sin mover los labios, declarar el amor con una lluvia de mensajes en aviones de papel, un piloto alem¨¢n colgado de un ¨¢rbol en Guernica o esquiar hacia arriba subido en la espalda de un gigant¨®n finland¨¦s¡ son solo algunas im¨¢genes hipn¨®ticas que pueblan la historia de Los amantes del C¨ªrculo Polar. Julio Medem las va intercalando con la narraci¨®n, para conseguir ese ambiente de enso?amiento rom¨¢ntico que recorre toda la pel¨ªcula. Ahora, dos d¨¦cadas m¨¢s tarde, y con los nuevos y veloces tiempos, no tendr¨ªan cabida ni en un storie de Instagram. Otro motivo m¨¢s para subrayar que la pel¨ªcula parece no tener fecha de caducidad y volver a disfrutar de ella sin complejos.