La Comunidad Valenciana se sit¨²a en la cola de Espa?a en el n¨²mero de plazas de residencia por habitante

La Comunidad Valenciana se sit¨²a en la cola de Espa?a en el n¨²mero de plazas en residencias por habitante, solo por delante de Canarias, Murcia y Ceuta, seg¨²n constata el estudio La atenci¨®n en residencias. recomendaciones para avanzar hacia un cambio de modelo y una nueva estrategia de cuidados, elaborado por Sacramento Pinazo, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Geriatr¨ªa y Gerontolog¨ªa. Si el criterio fijado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) est¨¢ en cinco plazas y la med...

La Comunidad Valenciana se sit¨²a en la cola de Espa?a en el n¨²mero de plazas en residencias por habitante, solo por delante de Canarias, Murcia y Ceuta, seg¨²n constata el estudio La atenci¨®n en residencias. recomendaciones para avanzar hacia un cambio de modelo y una nueva estrategia de cuidados, elaborado por Sacramento Pinazo, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Geriatr¨ªa y Gerontolog¨ªa. Si el criterio fijado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) est¨¢ en cinco plazas y la media espa?ola se encuentra en 4.19 plazas por cada 100 personas mayores de 65 a?os, en la Comunidad Valenciana la ratio es de 2,91 plazas. En Suecia, B¨¦lgica u Holanda, por ejemplo, superan las 7 por cada 100. ¡°Para alcanzar esa media espa?ola, nos faltar¨ªan actualmente 12.721 plazas¡±, se?ala el informe encargado por la C¨¢tedra Prospect CV 2030, auspiciada por la Presidencia de la Generalitat valenciana, adscrita a la Universitat de Val¨¨ncia y dirigida por el catedr¨¢tico de Geografia, Joan Romero.

En los ¨²ltimos 10 a?os no se ha construido una nueva residencia p¨²blica para mayores ¡°pese al aumento de personas mayores y de las situaciones de dependencia¡±. El informe constata una concentraci¨®n de residencias en grandes grupos empresariales", una situaci¨®n que tambi¨¦n sucede en Europa. Adem¨¢s, ¡°los retrasos en el pago desde la Conseller¨ªa de Igualdad y Pol¨ªticas Inclusivas son conocidos, lo que implica que, a fecha de hoy, algunas entidades permanecen sin cobrar desde hace un a?o, en el sector de las personas mayores, en el de la atenci¨®n a menores o a personas con diversidad funcional¡±.

¡°En este contexto se ha ido gestando un sistema muy vulnerable donde la pandemia ha tenido consecuencias devastadoras. Un error ha sido la falta de control y apoyo por parte de la Administraci¨®n a las residencias, p¨²blicas y privadas. Tambi¨¦n ha habido una inadecuada financiaci¨®n de los centros. No se puede exigir calidad si no se financian suficientemente ; el aumento de plazas residenciales ha venido de la mano de las empresas privadas. Se ha aumentado el parque residencial privado y se ha externalizado la gesti¨®n de lo p¨²blico. Tampoco se han financiado ni apoyado otras formas de convivencia (como el cohousing, por ejemplo) pese a la presi¨®n en aumento de diferentes colectivos de personas que lo demandan". En la actualidad, han fallecido en las residencias valencianas alrededor de 460 usuarios por covid-19, seg¨²n los datos de la Consejer¨ªa de Sanidad. En Madrid y Catalu?a, la mortandad ha sido muy superior. Hace dos d¨ªas, el c¨¢lculo de muertos en residencias en Espa?a durante la pandemia se elevaba a m¨¢s de 15.300 personas. Tambi¨¦n en Europa se detecta una mortandad muy elevada. Las v¨ªas de contagio de los usuarios de residencias han sido a trav¨¦s de los trabajadores de los centros, de estancias hospitalarias en los usuarios y de visitas de familiares.

En la Comunidad Valenciana hay 334 residencias (27.429 plazas en total y 13.350 profesionales trabajando en ellas). De titularidad p¨²blica y de gesti¨®n directa por parte de la Generalitat hay 10 (1.531 plazas). De titularidad p¨²blica pero de gesti¨®n integral hay 28 centros (2.277 plazas). De titularidad p¨²blica y de gesti¨®n municipal hay 31 6 centros (1.873 plazas -1.457 con fondos de la Generalitat). Residencias concertadas hay 128 (12.921 plazas -8.236 de ellas concertadas con fondos p¨²blicos). Y centros privados hay 137 centros (41%) (8.827 plazas). Del total de plazas disponibles, la mitad son p¨²blicas o est¨¢n concertadas con la Generalitat, apunta el informe.

El estudio propone una serie de recomendaciones:

1) Abrir un debate con los diferentes actores que conduzca a la revisi¨®n en profundidad del actual sistema de cuidados con algunos retos: la garant¨ªa real y segura en la continuidad de los cuidados, la coordinaci¨®n entre sistemas y servicios (la cooordinaci¨®n sociosanitaria), un modelo integrado de los servicios y las intervenciones profesionales, la formaci¨®n especializada y adecuada de los profesionales del cuidado. La Ley de la Dependencia (39/2006) hizo de los cuidados de larga duraci¨®n un derecho subjetivo.

2) ¡°Reestructurar los escasos medios que hoy existen para garantizar un cuidado adecuado en el entorno domiciliario y en el residencial. Lo que implica una urgente revisi¨®n del servicio de ayuda a domicilio. La mayor¨ªa de las personas mayores en situaci¨®n de fragilidad o dependencia, viven en sus casas y han expresado de forma repetida su deseo de continuar viviendo en ellas y de seguir participando en su comunidad (...)¡±.

3) ¡°El modelo residencial debe ser redefinido, el espacio p¨²blico debe ensancharse y contar con una financiaci¨®n homologable al conjunto de Espa?a. Esto requiere que las Administraciones asuman un rol de mayor protagonismo, de supervisi¨®n pedag¨®gica y control sobre el funcionamiento de las residencias, en cumplimiento de la responsabilidad p¨²blica que les compete por mandato constitucional. Los equipamientos deben evolucionar hacia el modelo hogar, modul¨¢ndose en unidades de convivencia; y ha de optarse tambi¨¦n por otras alternativas, como las viviendas comunitarias, los apartamentos con servicios, los alojamientos tipo cohousing, donde sea m¨¢s f¨¢cil personalizar la atenci¨®n y permanecer insertos en la comunidad con relaciones diversas e intergeneracionales, no aislados en guetos¡±.

4) ¡°La normativa es claramente inadecuada para el nuevo perfil de residentes. La ratio de profesionales es insuficiente¡±.

5) La capacidad de la familia para hacer frente a los cuidados est¨¢ hoy debilitada y lo estar¨¢ con el paso del tiempo cada vez m¨¢s (...) Por otra parte, la mayor¨ªa de las propias personas mayores no aspiran a que su familia les cuide, sino que anhelan que las quieran y les den apoyo emocional. Prefieren vivir en su domicilio o en un lugar parecido a su casa y recibir cuidados profesionales integrales de calidad, pero que ello no les impida continuar controlando su vida y sentir que esta contin¨²a siendo valiosa y que sigue teniendo sentido.

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