Las ¡®fake news¡¯ que criminalizan a los buitres
Expertos en la especie advierten de que no hay un solo caso acreditado cient¨ªficamente de ataques a ganado sano
Las noticias sobre ataques de buitres leonados a ganado vivo y sano se han multiplicado en los ¨²ltimos a?os, a pesar de que en ¡°la literatura cient¨ªfica no existe ni un solo caso documentado", aseguran investigadores de la Estaci¨®n Biol¨®gica de Do?ana-CSIC y del Instituto de Investigaci¨®n de Recursos Cineg¨¦ticos (IREC). Estas informaciones, replicadas por las redes sociales, est¨¢n provocando un conflicto social con una especie antes bien considerada por proporcionar un servicio de enorme valor ecol¨®gico y sanitario, al limpiar el ecosistema de animales muertos. La imagen actual se ha distorsio...
Las noticias sobre ataques de buitres leonados a ganado vivo y sano se han multiplicado en los ¨²ltimos a?os, a pesar de que en ¡°la literatura cient¨ªfica no existe ni un solo caso documentado", aseguran investigadores de la Estaci¨®n Biol¨®gica de Do?ana-CSIC y del Instituto de Investigaci¨®n de Recursos Cineg¨¦ticos (IREC). Estas informaciones, replicadas por las redes sociales, est¨¢n provocando un conflicto social con una especie antes bien considerada por proporcionar un servicio de enorme valor ecol¨®gico y sanitario, al limpiar el ecosistema de animales muertos. La imagen actual se ha distorsionado y muchas personas ven a los buitres como ¡°un depredador que ataca a animales vivos como ovejas, vacas y caballos ¡ªe incluso a perros y humanos¡ª para subsistir¡±, aseguran los cient¨ªficos en una carta publicada en la revista cient¨ªfica Nature Sustainability.
¡°Una cosa es que haya un animal solo en el campo moribundo porque ha tenido un mal parto, que comiencen los cuervos a picotearlo y aparezcan luego los buitres, pero eso no tiene nada que ver con matar a un animal sano, le quedaba muy poco tiempo de vida¡±, explica Antoni Margalida investigador del IREC. La especie no est¨¢ adaptada morfol¨®gicamente para cazar. ¡°No tienen ni las garras, ni el pico¡ solo est¨¢n preparados para desgarrar, no son ¨¢guilas y no se les puede meter en el mismo saco que a un lobo o a un oso¡±, concreta Margalida.
La b¨²squeda en Google realizada por los investigadores de ¡°ataques buitres ganado¡± arroj¨® un total de 59 noticias en medios espa?oles y franceses en 2019, pa¨ªses donde se agrupa la mayor poblaci¨®n de la especie (Gyps fulvus). En la mayor parte de ellas se presenta a los buitres como animales que han cambiado su comportamiento movidos por el hambre, ¡°por lo que ahora asaltan a ovejas, vacas y caballos vivos ¡ªe incluso a perros y humanos¡ª para subsistir¡±. ¡°A m¨ª me han llegado a preguntar que si se pod¨ªa estar tumbado en el campo sin riesgo de que te atacaran los buitres, es incre¨ªble¡±, describe Margalida.
En Espa?a, este ave necr¨®faga ha experimentado un crecimiento del 18% entre 2008 y 2018, alcanzando las 30.946 parejas reproductoras. Los ganaderos sostienen que no tienen suficiente alimento, sobre todo despu¨¦s de que las autoridades prohibieran dejar los cad¨¢veres en el campo en 2006, como siempre se hab¨ªa hecho, con la aparici¨®n de la encefalopat¨ªa espongiforme bovina o mal de las vacas locas. La veda de dejar carro?a en el campo se levant¨® en 2011, pero cada comunidad aut¨®noma lo ha ido aplicando de forma distinta.
Los cient¨ªficos rechazan la teor¨ªa de las necr¨®fogas hambrientas con datos como que ¡°m¨¢s del 70% de las denuncias que se presentan por supuestos ataques de buitres a ganado vivo son rechazadas por las administraciones por ser casos post mortem (el animal ya estaba muerto cuando los buitres empezaron a consumirlo)¡±. Adem¨¢s de que en el 90% de los casos que se investigan, los veterinarios forenses descartan a los buitres como causantes de la muerte o cualquier tipo de lesiones al ganado. ¡°El n¨²mero real de casos en los que se detecta la ingesta de un animal vivo por parte de un buitre es extremadamente bajo, se asocian a animales no supervisados con un diagn¨®stico vital muy desfavorable, y los buitres nunca son identificados como la causa primaria de su muerte¡±, se?alan. La peor consecuencia de la pol¨¦mica, a?ade Margalida, es la utilizaci¨®n de cebos envenenados para controlar a la poblaci¨®n de aves carro?eras.