Evo Morales da positivo a la covid en pleno rebrote de la pandemia en Bolivia
El expresidente boliviano, de 61 a?os, se encuentra estable
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, ha dado positivo a la covid-19. Los primeros s¨ªntomas del pol¨ªtico, de 61 a?os, fueron una tos persistente y fiebre. Morales ¡°se encuentra estable y est¨¢ recibiendo el tratamiento y la atenci¨®n m¨¦dica que el caso aconseja. Se agradece al pueblo boliviano por las expresiones de preocupaci¨®n y solidaridad¡±, se lee en un comunicado del equipo de prensa del exmandatario.
Este lunes se filtr¨® la noticia despu¨¦s de que ...
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, ha dado positivo a la covid-19. Los primeros s¨ªntomas del pol¨ªtico, de 61 a?os, fueron una tos persistente y fiebre. Morales ¡°se encuentra estable y est¨¢ recibiendo el tratamiento y la atenci¨®n m¨¦dica que el caso aconseja. Se agradece al pueblo boliviano por las expresiones de preocupaci¨®n y solidaridad¡±, se lee en un comunicado del equipo de prensa del exmandatario.
Este lunes se filtr¨® la noticia despu¨¦s de que visitase una cl¨ªnica en Cochabamba, la regi¨®n de Bolivia. Morales neg¨® que se hubiese contagiado de la covid-19 en una entrevista con un periodista argentino. Sin embargo, horas despu¨¦s el equipo del expresidente boliviano confirm¨® su positivo al nuevo coronavirus.
Actualmente Evo Morales es el presidente del Movimiento al Socialismo (MAS), el principal partido boliviano. El MAS es un protagonista crucial de las elecciones municipales y departamentales (estatales) que siguen programadas para marzo de este 2021, pese a que un fuerte rebrote de la pandemia tiene en vilo al pa¨ªs. El expresidente boliviano ha asistido a numerosas reuniones p¨²blicas, en algunas de ellas junto a multitudes y rara vez protegido por una mascarilla. Esta es la actitud caracter¨ªstica de la mayor¨ªa de los militantes del MAS. En el otro polo pol¨ªtico, la organizaci¨®n derechista Creemos, de Luis Fernando Camacho, tambi¨¦n se han volcado a las reuniones masivas. En cambio, otros partidos han hecho del cuidado ostensible frente a la enfermedad una marca de identidad y un argumento electoral. Estos partidos est¨¢n pidiendo la postergaci¨®n de las elecciones por 60 d¨ªas, una posibilidad a la que el MAS se opone.
Esta no es la ¨²nica forma en que la pandemia divide a los pol¨ªticos bolivianos. El Gobierno de Luis Arce ha comprado 5,2 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik, lo que le ha valido fuertes cr¨ªticas de la oposici¨®n. Esta ha denunciado que Arce aprob¨® en el contrato una cl¨¢usula de confidencialidad que convierte el precio de la vacuna en un ¡°secreto de Estado¡± y teme que esta decisi¨®n d¨¦ paso a la corrupci¨®n. La Administraci¨®n de Arce justifica la cl¨¢usula por las necesidades comerciales de los proveedores, que, dice, no queda m¨¢s que aceptar en un momento en que conseguir vacunas es muy dif¨ªcil incluso para los pa¨ªses ricos. Las 5,2 millones de dosis servir¨¢n para inmunizar a 2,6 millones de personas, que equivalen al 23% de la poblaci¨®n boliviana. Las autoridades est¨¢n negociando con otros laboratorios para tratar de completar la dotaci¨®n de ant¨ªdotos. Han denunciado que el Gobierno anterior, el de Jeanine ??ez, no hab¨ªa realizado las gestiones necesarias para que Bolivia pudiese obtener las vacunas.
La oposici¨®n tambi¨¦n critica a Arce por una supuesta ¡°falta de iniciativa¡± para enfrentar las graves deficiencias del sistema nacional de salud, que siempre ha sido d¨¦bil y estuvo al borde del colapso durante la primera ola de la pandemia. Ahora, en medio de la segunda ola, se encuentra saturado por el vertiginoso incremento de casos que se registr¨® despu¨¦s de las fiestas de fin de a?o. El pa¨ªs cuenta con 36.600 casos activos, por lo que se estima que 5.400 pacientes necesitar¨¢n internaci¨®n.
El programa estrella del presidente es la compra en tiempo r¨¦cord de 1,6 millones de pruebas de detecci¨®n del virus, a fin de masificar la realizaci¨®n de pruebas gratuitas, que hasta ahora han sido realizadas en un n¨²mero muy inferior al necesario. Al mismo tiempo, Arce ha entrado en una pol¨¦mica con los gobiernos departamentales (estatales) y municipales sobre qui¨¦n debe financiar el pago del personal extraordinario que ha estado trabajando en los hospitales desde hace algunos meses. No se ha conocido que el presidente vaya a proveer de m¨¢s camas y respiradores a los servicios de salud p¨²blicos.
Aunque se han suspendido las fiestas de carnavales y se ha endurecido los toques de queda en las ciudades, las necesidades de la econom¨ªa nacional, que sufre una grave crisis, hacen muy dif¨ªcil que se restrinja mayormente las actividades laborales y mucho m¨¢s que los bolivianos vuelvan a confinarse en sus casas.
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