La cuarta ola del coronavirus en Espa?a amaina

La curva epid¨¦mica en Espa?a avanza hacia una especie de meseta. La cuarta ola, mucho menos empinada que las tres anteriores, parece que amaina o, al menos, no se dispara y el Ministerio de Sanidad da por hecho que el pa¨ªs se adentra en un ¡°comienzo de estabilizaci¨®n¡±. Por lo pronto, la incidencia acumulada a 14 d¨ªas, aunque muy elevada ¡ª232,55 casos por 100.000 habitantes¡ª, apenas reflej¨® este jueves un ligero...

La curva epid¨¦mica en Espa?a avanza hacia una especie de meseta. La cuarta ola, mucho menos empinada que las tres anteriores, parece que amaina o, al menos, no se dispara y el Ministerio de Sanidad da por hecho que el pa¨ªs se adentra en un ¡°comienzo de estabilizaci¨®n¡±. Por lo pronto, la incidencia acumulada a 14 d¨ªas, aunque muy elevada ¡ª232,55 casos por 100.000 habitantes¡ª, apenas reflej¨® este jueves un ligero ascenso de tres puntos despu¨¦s de dos d¨ªas estancada. Los expertos achacan a la vacunaci¨®n y al mantenimiento de las restricciones sociales en buena parte del pa¨ªs la suavidad de la ola, aunque alertan de que la situaci¨®n en Espa?a no es boyante: siete comunidades y las dos ciudades aut¨®nomas est¨¢n en riesgo extremo (con una incidencia por encima de 250) y una de cada cinco camas de cuidados intensivos est¨¢ ocupada por pacientes con covid.

¡°Cautela y prudencia¡±, insiste Daniel L¨®pez-Acu?a, exdirector de Emergencias de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. Despu¨¦s de m¨¢s de un mes con los contagios al alza ¡ªdesde el 16 de marzo la curva empez¨® a repuntar¡ª, la incidencia acumulada a 14 d¨ªas ha registrado un par¨®n durante esta semana: desde el lunes, que se instal¨® en los 230 casos, ha estado bailando sobre esta cifra y este jueves ascendi¨® a 232,55. ¡°Estamos en una fase mesetaria, dando un pasito adelante y otro atr¨¢s. Quiz¨¢s el sistema sanitario no sufre tanto y ojal¨¢ se produzca una bajada consolidada, pero estamos un poco despistados porque esta ola no ha seguido el patr¨®n de otras olas¡±, apunta Toni Trilla, jefe de Medicina Preventiva del Hospital Cl¨ªnic de Barcelona.

Algunos epidemi¨®logos apuntan que la incidencia acumulada a siete d¨ªas tambi¨¦n confirma un estancamiento: lleva m¨¢s de una semana en torno a los 108 casos por 100.000 habitantes en los ¨²ltimos siete d¨ªas, menos del 50% de la incidencia a 14 d¨ªas. ¡°Si la incidencia a siete d¨ªas es menor del 50% que la incidencia a 14 d¨ªas, significa que la curva va de bajada. Esta ola no es comparable a las anteriores y parece que se estabiliza ya. En cualquier caso, si hay un repunte, no ser¨ªa importante: ya ha pasado m¨¢s de una semana de la Semana Santa, que es cuando pudo haber un incremento de contagios, y lo esperable es que no aumente m¨¢s¡±, tercia Jes¨²s Molina Cabrillana, portavoz de la Sociedad Espa?ola de Medicina Preventiva, Salud P¨²blica e Higiene.

La velocidad de transmisi¨®n del virus en Espa?a (la Rt, que mide a cu¨¢ntas personas contagia, de media, un positivo) tambi¨¦n tiende a la baja. El 14 de abril, ¨²ltimo d¨ªa del que se tienen cifras, estaba, por primera vez en un mes, por debajo de 1, como recomiendan las autoridades sanitarias para mantener a raya el virus: ese d¨ªa, la Rt era de 0,98, esto es, que por cada 100 positivos se infectan otras 98 personas. ¡°Es bueno que esto siga as¨ª, pero lo que nos debe guiar es que, si seguimos teniendo un estancamiento de unas incidencias tan altas y las unidades de cuidados intensivos (UCI) tan ocupadas, deber¨ªamos preocuparnos¡±, avisa L¨®pez-Acu?a.

Lo cierto es que la situaci¨®n epid¨¦mica es muy heterog¨¦nea seg¨²n las autonom¨ªas. La Comunidad Valenciana, por ejemplo, est¨¢ en 40 casos por 100.000, la incidencia m¨¢s baja de Espa?a. Y tambi¨¦n Galicia, Baleares y Murcia est¨¢n por debajo de 100. En cambio, Madrid y Navarra se sit¨²an en torno a los 400 casos por 100.000 y el Pa¨ªs Vasco supera los 500. ¡°Puede influir el hacinamiento de la gente: no es lo mismo la densidad de poblaci¨®n de Galicia que la del ¨¢rea metropolitana de Barcelona. En el caso de la Comunidad Valenciana, lo que hacen muy bien all¨ª es el estudio de contactos y eso puede ser determinante para aislar casos e impulsar cuarentenas¡±, valora el epidemi¨®logo Joan Cayl¨¤. La dureza de las restricciones sociales y el cumplimiento de las medidas, se?alan los expertos, constituyen otro de los factores determinantes en la fluctuaci¨®n de las curvas epid¨¦micas: Valencia, por ejemplo, ha tomado medidas muy duras y est¨¢ haciendo una desescalada muy suave ¡ªhasta el lunes los bares cierran a las seis de la tarde¡ª, mientras que Madrid, que tiene una incidencia 10 veces superior, ha sido mucho m¨¢s laxa en las restricciones ¡ªla restauraci¨®n baja la persiana a las 23.00¡ª.

Los expertos asumen que la vacunaci¨®n tambi¨¦n ha desempe?ado un papel en la evoluci¨®n de esta ola, pero con matices. Con solo el 21,4% de la poblaci¨®n inmunizada con una dosis (sobre todo en los grupos de edad m¨¢s elevados), los epidemi¨®logos coinciden en que la vacuna no ha tenido tanta influencia en la curva de contagios, ya que la mayor parte de las infecciones se produce en gente m¨¢s joven que no ha tenido acceso al pinchazo. El gran efecto, se?alan, est¨¢ en la reducci¨®n de muertes y hospitalizaciones, donde la edad es determinante. ¡°Algo ha podido influir en la curva de contagios, pero donde ha contribuido es en la enfermedad grave y en la mortalidad. No hay, ni de lejos, la sobrecarga asistencial de noviembre y enero¡±, apunta Molina Cabrillana.

Las UCI de los hospitales encararon la cuarta ola con una ocupaci¨®n elevada ¡ªel 16 de marzo, el 20% de las camas estaban utilizadas por pacientes con covid¡ª y los profesionales tem¨ªan un aluvi¨®n de enfermos tras la Semana Santa. Sin embargo, las entradas, por ahora, no se han disparado: este jueves hab¨ªa 2.283 pacientes ingresados en estado cr¨ªtico, esto es, el 22,6% de las camas de UCI disponibles estaban ocupadas por personas con coronavirus. Con todo, L¨®pez-Acu?a reitera la prudencia: ¡°Es probable que la magnitud de la ola no sea tan pronunciada porque hay menos movilidad que en Navidad, menos aglomeraciones y un segmento de la poblaci¨®n est¨¢ protegido. Pero hay un par de elementos preocupantes: no est¨¢ controlada la transmisi¨®n comunitaria y persiste una alta ocupaci¨®n en las UCI, con casos m¨¢s severos ligados a la variante brit¨¢nica, que da estancias hospitalarias m¨¢s largas¡±. La variante brit¨¢nica del virus es la predominante en Espa?a desde marzo.

Pese a que la situaci¨®n no es tan cr¨ªtica en Espa?a como en anteriores olas, los expertos piden extremar la cautela con respecto a las restricciones sociales y las medidas de protecci¨®n, y no bajar la guardia antes de tiempo. ¡°El impacto sobre el sistema sanitario necesariamente tendr¨¢ que ir a la baja si acelera el ritmo de vacunaci¨®n, pero en los contagios tardaremos en verlo¡±, apunta Trilla. El Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en ingl¨¦s) ha lanzado una recomendaci¨®n que permite que dos personas se quiten las mascarillas en un espacio cerrado si ambas est¨¢n vacunadas o flexibilizar las cuarentenas y la exigencia de pruebas diagn¨®sticas en los viajes si las personas est¨¢n vacunadas. Molina Cabrillana lo ve factible, pero Trilla y L¨®pez-Acu?a tildan la recomendaci¨®n de ¡°prematura¡± porque puede dar ¡°un mensaje de falsa seguridad¡± y llevar a ¡°una relajaci¨®n excesiva¡±.

A prop¨®sito de las restricciones sociales, Trilla apuesta por la ¡°asimetr¨ªa en las medidas y adaptar la talla a cada comunidad y al momento¡±. Molina Cabrillana pide ¡°aguantar un poco m¨¢s, hasta estar por debajo de los 50 casos por 100.000¡å, y L¨®pez-Acu?a insta, sobre todo, a ¡°proseguir con las restricciones en atm¨®sferas cerradas¡±. Con todo, si en algo coinciden los expertos consultados es en la gran tarea pendiente: ¡°Impulsar estudios de contactos de forma estricta¡±, resume Cayl¨¤.