Italia prepara la obligatoriedad del certificado covid para todos los trabajadores
El documento que acredita la vacunaci¨®n ya se exige a profesores y sanitarios. Tambi¨¦n es imprescindible para entrar en bares, restaurantes o cines
El Gobierno italiano sigue reforzando las restricciones para frenar los contagios y su prioridad es impulsar la vacunaci¨®n de todos los modos posibles. Por ello, est¨¢ preparando una norma para que el certificado covid ¡ªque acredita que su portador ha recibido la inyecci¨®n, ha superado la infecci¨®n o ha dado negativo en una prueba de coronavirus¡ª sea obligatorio para todos los trabajadores, tanto p¨²blicos como priva...
El Gobierno italiano sigue reforzando las restricciones para frenar los contagios y su prioridad es impulsar la vacunaci¨®n de todos los modos posibles. Por ello, est¨¢ preparando una norma para que el certificado covid ¡ªque acredita que su portador ha recibido la inyecci¨®n, ha superado la infecci¨®n o ha dado negativo en una prueba de coronavirus¡ª sea obligatorio para todos los trabajadores, tanto p¨²blicos como privados, desde mediados de octubre. El Consejo de Ministros deber¨¢ decidir este jueves si lleva adelante la medida, que de aprobarse convertir¨ªa a Italia en el primer pa¨ªs europeo en exigir el pase sanitario para acudir a trabajar. La ministra de Asuntos Regionales, Mariastella Gelmini, avanz¨® este mi¨¦rcoles que el Gobierno lo estaba estudiando. ¡°La vacuna es la ¨²nica arma que tenemos contra la covid y solo podemos contener la infecci¨®n vacunando a una gran mayor¨ªa de la poblaci¨®n¡±, se?al¨® en una entrevista en la televisi¨®n p¨²blica, Rai.
El primer ministro, Mario Draghi, ha optado por acelerar los tr¨¢mites y este mi¨¦rcoles mantuvo una reuni¨®n extraordinaria con los l¨ªderes de los principales sindicatos del pa¨ªs para abordar la cuesti¨®n. Los representantes de los trabajadores, que en general han secundado la medida, han pedido al Ejecutivo, como se?alaron a la salida del encuentro, y a falta de ver el texto definitivo de la nueva norma, que no se pueda despedir a ning¨²n trabajador por no presentar el certificado sanitario. Y aseguran que han obtenido el compromiso del Gobierno.
Seg¨²n apuntan los medios locales, la idea que baraja el Ejecutivo es establecer una norma general v¨¢lida para todos los trabajadores, mientras que los controles y las sanciones se aplicar¨¢n de forma diferente. En las empresas, esto depender¨¢ de los acuerdos entre empresarios y sindicatos. Aunque la propuesta est¨¢ sobre la mesa, la cuesti¨®n es compleja y a¨²n hay muchos puntos por definir, como qui¨¦n y c¨®mo se controlar¨ªa a los trabajadores aut¨®nomos o qui¨¦n deber¨ªa pagar las pruebas de covid en el sector privado en caso de que el trabajador opte por esta v¨ªa para obtener el certificado sanitario. Los sindicatos han pedido que los test en estos casos sean gratuitos.
El pa¨ªs ya fue pionero en Europa al introducir el pasado abril la obligatoriedad de vacunarse para los trabajadores sanitarios. Hace unas semanas dio un paso m¨¢s e implant¨® el uso obligatorio del certificado covid tambi¨¦n para los profesores. Aunque el salvoconducto sanitario tambi¨¦n se puede obtener con la realizaci¨®n de una prueba negativa de detecci¨®n de coronavirus, en la pr¨¢ctica esa opci¨®n no es demasiado viable para utilizarlo a diario con fines profesionales, por lo que las imposiciones del Ejecutivo son m¨¢s bien una f¨®rmula t¨¦cnica para convencer a la poblaci¨®n de vacunarse.
El certificado covid o ¡°pase verde¡±, como se le conoce en Italia, se ha convertido en una herramienta imprescindible para la vida cotidiana. Se exige para comer en el interior de los restaurantes, para entrar en teatros, museos, cines y gimnasios o viajar en trenes de larga distancia. El Ejecutivo ha ido extendiendo de manera gradual sus usos, no exento de oposiciones. El mero planteamiento de hacerlo obligatorio solo para los trabajadores p¨²blicos ya ha desatado protestas y conflictos con los sindicatos estos d¨ªas.
El escenario pol¨ªtico es tambi¨¦n complicado. Dentro de la gran coalici¨®n que soporta al Gobierno de Mario Draghi, f¨¦rreo defensor de la vacunaci¨®n, tambi¨¦n hay posiciones encontradas. El ultraderechista Matteo Salvini, l¨ªder de la Liga, es uno de los principales detractores de la extensi¨®n del salvoconducto sanitario porque alega que atenta contra las libertades personales y que es una forma encubierta de obligar a vacunarse. Pero su partido, que controla entre otros ministerios el de Desarrollo econ¨®mico, est¨¢ dividido al respecto. Entre otros, Massimiliano Fedriga, gobernador liguista de la regi¨®n de Friuli Venecia-Giulia, ha defendido la medida. ¡°No voy a oponerme a la decisi¨®n si se toma desde el punto de vista cient¨ªfico. No convirtamos la pandemia en una batalla ideol¨®gica, en la que se est¨¢ a favor o en contra a pesar de todo. Eso ser¨ªa una locura¡± ha dicho. ¡°En Europa ser¨ªamos los ¨²nicos en hacerlo¡±, ha protestado Salvini, relativamente aislado dentro de su formaci¨®n en esta cuesti¨®n.
En Italia cerca del 65% de los 60 millones de habitantes del pa¨ªs ha recibido la pauta completa de vacunaci¨®n y el 73% se ha inmunizado con al menos una dosis. Estas cifras est¨¢n ligeramente por encima de la media de la Uni¨®n Europea: el 60% tiene la pauta completa y un 66% al menos una dosis.