No todo es negativo tras la pandemia en la vida de los j¨®venes: ahora hacen m¨¢s ejercicio y comen m¨¢s sano
Una encuesta de las fundaciones FAD y Pfizer a 1.200 personas de 15 a 29 a?os muestra que, despu¨¦s de la crisis del coronavirus, muchos se sienten m¨¢s aislados y casi un 70% ha visto mermada su salud mental, pero hay efectos positivos
El saldo que la pandemia ha dejado en la vida de los m¨¢s j¨®venes tiene algunas lecturas positivas: ahora hacen m¨¢s ejercicio y comen m¨¢s sano. As¨ª se desprende del bar¨®metro J¨®venes en pleno desarrollo y crisis pand¨¦mica: c¨®mo miran al futuro, que este jueves han presentado FAD Juventud y la Fundaci¨®n Pfizer, qu...
El saldo que la pandemia ha dejado en la vida de los m¨¢s j¨®venes tiene algunas lecturas positivas: ahora hacen m¨¢s ejercicio y comen m¨¢s sano. As¨ª se desprende del bar¨®metro J¨®venes en pleno desarrollo y crisis pand¨¦mica: c¨®mo miran al futuro, que este jueves han presentado FAD Juventud y la Fundaci¨®n Pfizer, que en febrero y marzo preguntaron a 1.200 chavales de 15 a 29 a?os por el cambio de h¨¢bitos que la covid-19 ha provocado en sus vidas. Para un 35% de ellos las alteraciones en sus rutinas han sido positivas. Un 40% dice conocerse mejor y saber lo que quiere, as¨ª como tener una mayor responsabilidad personal y resistencia ante las dificultades. Adem¨¢s, la pandemia gener¨® un claro incremento en el ejercicio f¨ªsico, tanto durante el confinamiento como despu¨¦s para un 39% de ellos y una mejora en su dieta para un 30,4%. ¡°El sedentarismo extremo al que se vieron abocados durante el confinamiento les puede haber llevado a aprender a desarrollar nuevas rutinas de activaci¨®n f¨ªsica, y respecto a la alimentaci¨®n, el pasar m¨¢s tiempo en casa conlleva, en muchos casos, consumir comida m¨¢s casera con los progenitores¡±, apunta Stribor Kuric, coautor de la encuesta e investigador del Centro Reina Sof¨ªa sobre Adolescencia y Juventud de FAD. Entre los que declaran que sus costumbres han mejorado, el primer grupo son los de 19 hasta 24 a?os.
El 75% de los encuestados no ha conseguido recuperar por completo su vida anterior a la pandemia y el 55,7% considera que los cambios que ha tra¨ªdo ser¨¢n ¡°permanentes¡±. Los que reportan alteraciones que tienden m¨¢s hacia lo negativo (el 34% del total) son en su mayor¨ªa j¨®venes sin estudios superiores, los que est¨¢n desempleados y los que cuentan con menos recursos socioecon¨®micos. ¡°Los resultados son ambivalentes, tal y como es la juventud, no son un¨ªvocos, y nos alertan de los problemas que vienen¡±, se?ala Eulalia Alemany, directora t¨¦cnica de FAD.
El investigador Stribor Kuric habla sobre una de las consecuencias que la pandemia ha dejado en los j¨®venes, un mayor aislamiento (as¨ª lo aseguran el 34,1% de ellos, mientras que un 30% afirma ver ahora a m¨¢s amistades y familia). ¡°Est¨¢ muy relacionado con la sensaci¨®n de soledad, con sentir que la conexi¨®n con otras personas es fugaz o de baja calidad. El encierro les ha hecho ver que mantienen muchas interacciones online, pero que carecen del significado o la profundidad que les gustar¨ªa. Aparecen sospechas de falsedad detr¨¢s de esas relaciones y ese sentimiento de que no llegan a conectar les genera ansiedad¡±.
Aunque el documento no profundiza en los motivos que han llevado a ese aislamiento ni las consecuencias, a los j¨®venes s¨ª se les pregunt¨® por la percepci¨®n de su salud mental, y m¨¢s del 66% afirmaron que como consecuencia de la pandemia ha empeorado. ¡°Hemos visto c¨®mo han aumentado los pensamientos negativos, en el caso de las chicas lo reportaron en un mayor porcentaje, un 58,3% de ellas frente al 49,6% de ellos¡±, apunta Eulalia Alemany. Cerca del 50% de ellos asegur¨® tener pensamientos dispersos, tendencia a creer que ¡°nada tiene arreglo¡± o a considerarse un fracasado. ¡°Denota una quiebra en las expectativas, no podemos dejar de lado que el 67,4% de ellos afirm¨® que esta crisis ha afectado negativamente a su capacidad econ¨®mica y el 63% a su acceso al trabajo. Estamos ante una generaci¨®n que, forzada por el contexto, se siente menos motivada¡±, a?ade. Son los m¨¢s mayores (entre 24 y 29 a?os) los que manifiestan en mayor medida haber perdido el inter¨¦s por lo relacional (ver menos a amigos y familia).
La tendencia a aislarse tambi¨¦n se vio en un reciente estudio de la Universidad de Columbia (Estados Unidos), en el que se analizaron los posibles motivos de la subida en los ¨ªndices de depresi¨®n y ansiedad entre los j¨®venes y el incremento en las tentativas de suicidio. El cambio m¨¢s significativo que encontraron con respecto a los j¨®venes de d¨¦cadas anteriores (los datos ya figuraban en la estad¨ªstica p¨²blica) era el estilo de vida. En los noventa, el 40% de los j¨®venes aseguraba acudir a fiestas con frecuencia, participar en actividades deportivas colectivas y socializar en diferentes eventos. En 2020, ese porcentaje baj¨® al 20%. Se vio claro que ahora se relacionan menos.
Dentro del 34,8% de los que consideran que como consecuencia de la pandemia sus h¨¢bitos han ido a peor, los m¨¢s destacados son la ya mencionada tendencia hacia el retraimiento (ver a menos personas fuera de casa o dejar de hacer actividades) o los h¨¢bitos compulsivos (comer poco o demasiado). La investigadora Alemany considera que esa mayor soledad puede ser el desencadenante de otras de las conductas detectadas, como un mayor insomnio ¡ªla primera vez que se realiz¨® este bar¨®metro fue en 2019 y los resultados fueron m¨¢s laxos¡ª, o la aparici¨®n de pensamientos negativos tras la covid (el 53,3% de ellos). ¡°Sustancialmente peligrosos para el bienestar psicol¨®gico son los pensamientos obsesivos (los presentan el 31,1% de los encuestados), recurrencias cognitivas sobre potenciales peligros o situaciones desagradables ¡ªreales o imaginarias¡ª que pueden derivar en los casos m¨¢s agudos en trastornos obsesivo-compulsivos (TOC)¡±, indica Alemany.
Otro pensamiento negativo detectado es la percepci¨®n de que no les quieren (un 30,6%). ¡°Hablamos de una supuesta ausencia de afecto de terceros, un aspecto absolutamente necesario para la supervivencia emocional del individuo¡±, a?ade. Aunque en menor porcentaje, para Alemany ¡°es significativo y muy preocupante¡± que un 26,7% opina que la vida es una carga in¨²til, un 20,4% que es mejor no existir y un 17,7% tiene pensamientos suicidas.
Los adolescentes y j¨®venes que presentan problemas psicol¨®gicos con ¡°cierta o mucha frecuencia¡± son el 24%, mientras que en 2021 eran el 8,6% y en 2019 el 6,2%. Este empeoramiento es m¨¢s agudo entre las mujeres: la mitad declara que su estado de ¨¢nimo ha empeorado, cosa que ocurre al 30% de los chicos. Precisamente, la mejora en los servicios sanitarios de salud mental es la principal demanda de los j¨®venes cuando se les pregunta por futuras pol¨ªticas p¨²blicas tras la pandemia: el 43,1% considera que debe ser un tema central en el futuro inmediato. Son sobre todo las mujeres quienes consideran que debe ser un asunto prioritario (53,3% ellas y 34,8% de ellos).
Econom¨ªa y empleo
¡°La valoraci¨®n de los cambios para la juventud es significativamente m¨¢s pesimista que en 2019, ya que m¨¢s de la mitad consideran que la pandemia ha generado un impacto negativo tanto en su econom¨ªa (67,4%) como en su empleo (63%)¡±, indica Stribor Kuric. El 56,3% de ellos manifest¨® que en un corto plazo podr¨ªan verse obligados a ¡°trabajar en lo que sea¡±, as¨ª como a recortar el gasto en ocio y tiempo libre (50,6%). Un 42,7% cree que estar¨¢ en desempleo o le resultar¨¢ dif¨ªcil encontrar un trabajo, y el 41,7% da por hecho que bajar¨¢ su salario o perder¨¢ poder adquisitivo.