Una sociedad de acci¨®n-reacci¨®n
Los partidos a la derecha del PP, con una importante presencia de hombres j¨®venes, se nutren de la resistencia a los enormes avances en los derechos civiles que colocaron a Espa?a como un pa¨ªs referente
En las ¨²ltimas d¨¦cadas, las sociedades avanzadas, tambi¨¦n la nuestra, se han transformado profundamente. El cambio social ha sido veloz e intenso. La extensi¨®n de los derechos civiles (feminismo, LGTBIQ+¡), la crisis clim¨¢tica y la globalizaci¨®n han producido un profundo cambio de valores que, a partir de finales del siglo XX, se solapa con una revoluci¨®n tecnol¨®gica extremadamente r¨¢pida, en un contexto mundial de desigualdades crecientes. El resultado es una sociedad diversa, fragmentada y polarizada. Esta diversidad...
En las ¨²ltimas d¨¦cadas, las sociedades avanzadas, tambi¨¦n la nuestra, se han transformado profundamente. El cambio social ha sido veloz e intenso. La extensi¨®n de los derechos civiles (feminismo, LGTBIQ+¡), la crisis clim¨¢tica y la globalizaci¨®n han producido un profundo cambio de valores que, a partir de finales del siglo XX, se solapa con una revoluci¨®n tecnol¨®gica extremadamente r¨¢pida, en un contexto mundial de desigualdades crecientes. El resultado es una sociedad diversa, fragmentada y polarizada. Esta diversidad se intensificar¨¢ a¨²n m¨¢s en el futuro, como muestran las proyecciones recientes del INE: los hogares seguir¨¢n dividi¨¦ndose, creciendo a mayor velocidad que la poblaci¨®n, a la vez que los nacidos en Espa?a continuar¨¢n disminuyendo.
El nacimiento reciente de SALF (Se acab¨® la fiesta) no es m¨¢s que otra manifestaci¨®n de la atomizaci¨®n social que estamos viviendo y de lo mucho que las nuevas tecnolog¨ªas facilitan la entrada de nuevos competidores. As¨ª, en poco m¨¢s de una d¨¦cada, la derecha, que se hab¨ªa caracterizado por la concentraci¨®n del voto bajo el paraguas de una sola sigla, se parte primero en dos y ahora en tres. Podr¨ªa parecer que no hay espacio para tantos y que SALF no es m¨¢s que una nueva marca de lo mismo. Sin embargo, como suele suceder en los lanzamientos de marcas o productos, hay diferencias.
En t¨¦rminos ideol¨®gicos, SALF ocupar¨ªa el espacio entre el PP y Vox, pero claramente m¨¢s cerca del segundo que del primero. Aunque un tercio de sus votantes no opt¨® por ning¨²n partido en las elecciones generales de 2023, algo m¨¢s de la mitad proviene de Vox (el 37%) y del PP (16%). En los pr¨®ximos meses, habr¨¢ que ir aportando m¨¢s luz sobre este grupo peque?o de votantes. De momento, gracias al bar¨®metro de julio de 40dB. para El PA?S y la Cadena SER, con los datos en abierto, sabemos que pese a que los electores potenciales de SALF se vean as¨ª mismos tolerantes con el LGTBIQ+, la mayor¨ªa de ellos cree que Espa?a ha ido demasiado lejos en la defensa del colectivo, opini¨®n que tambi¨¦n es mayoritaria en el electorado voxista, pero no as¨ª entre los populares. Como cabe esperar, los votantes del PP son ahora los m¨¢s moderados del espectro ideol¨®gico de la derecha: en este mismo sentido, mientras que un tercio de sus electores cree que la diversidad sexual va a acabar con nuestros valores y costumbres de siempre, en los de SALF lo piensa el 45%, llegando a casi el 50% en los de Vox.
En suma, el surgimiento de SALF, como el de Vox hace unos a?os, no s¨®lo evidencia la creciente fragmentaci¨®n social, sino tambi¨¦n que vivimos en una sociedad de acci¨®n-reacci¨®n. Los partidos a la derecha del PP, con una importante presencia de hombres j¨®venes, se nutren de la resistencia a los enormes avances en los derechos civiles que colocaron a Espa?a como un pa¨ªs referente. Por ello, ya nada se deber¨ªa dar por supuesto.