El tabaquismo cae bruscamente en Espa?a y se sit¨²a en el nivel m¨¢s bajo en 30 a?os
El consumo de alcohol se mantiene estable, pero caen las borracheras, seg¨²n la ¨²ltima gran encuesta de consumo de drogas del Ministerio de Sanidad
El n¨²mero de fumadores en Espa?a ha ca¨ªdo a los niveles m¨¢s bajos en los ¨²ltimos 30 a?os, desde que lo mide la encuesta EDADES, del Ministerio de Sanidad. Su ¨²ltima edici¨®n, publicada este martes, muestra una brusca ca¨ªda que cambia una tendencia de estancamiento o incluso subida en la ¨²ltima d¨¦cada. Un 25,8% de la poblaci¨®n entre 15 y 64 a?os (a la que se dirige el estudio) fuma diariamente, lo que supone un descenso de m¨¢s de siete puntos con respecto a 2022, fecha del ¨²ltimo estudio.
El informe, que realiza cada dos a?os el Plan Nacional sobre Drogas, tambi¨¦n constata una ca¨ªda en el consumo de hipnosedantes (medicamentos tranquilizantes entre los que est¨¢n los ansiol¨ªticos) y de borracheras, aunque la ingesta de alcohol est¨¢ muy estabilizada desde hace a?os: el 76,5% de la poblaci¨®n ha tomado bebidas alcoh¨®licas en los ¨²ltimos 12 meses.
El alcohol es la sustancia con potencial adictivo m¨¢s consumida, seguida del tabaco (36,8% de consumo en los ¨²ltimos 12 meses), el cannabis (12,6%, una ligera subida) y los tranquilizantes, con o sin receta (12%). Muy por debajo est¨¢ la coca¨ªna (2,5%) y todav¨ªa m¨¢s otras sustancias. Alcohol y tabaco son tambi¨¦n los de comienzo m¨¢s precoz: (16,4 y 16,6 a?os respectivamente), mientras que la edad media para el cannabis, la sustancia ilegal con un inicio m¨¢s prematuro, es de 18,4 a?os.
Todos los consumos, excepto el de medicamentos con potencial adictivo (ansiol¨ªticos, benzodiacepinas, opioides), est¨¢n encabezados por hombres y la edad con m¨¢s prevalencia se sit¨²a entre los 15 y los 34 a?os. En hipnosedantes y analg¨¦sicos opioides, sin embargo, aumenta a partir de los 35 a?os.
Como ha recalcado el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, la tendencia en la mayor¨ªa de las sustancias es de ca¨ªda: ¡°Creo que esto contrasta de forma muy clara con ciertos discursos; se intentan importar a Espa?a debates de otros contextos y dibujar presente apocal¨ªptico en consumo de drogas que no es una realidad en nuestro pa¨ªs. Hay concienciaci¨®n, un marco regulatorio y un sistema sanitario con un sistema prescripci¨®n existente hace que no se desmadren consumos como los analg¨¦sicos opioides¡±.
El consumo con o sin receta de este tipo de f¨¢rmacos, que se usan sobre todo para el dolor y que han causado un enorme problema de salud p¨²blica en algunos pa¨ªses de Am¨¦rica, especialmente en Estados Unidos, ha ca¨ªdo ligeramente: un 3,9% de la poblaci¨®n los ha consumido en el ¨²ltimo mes, si bien su uso es mayor que cuando se incluyeron en la encuesta (un 2,9% en 2018). El consumo de fentanilo, el responsable principal de la gran crisis en aquel continente, ha ca¨ªdo en Espa?a: un 5,5% de la poblaci¨®n reconoce haberlo usado, menos de la mitad que hace dos a?os, pero m¨¢s del doble que en 2018.
La percepci¨®n de la disponibilidad de las drogas ilegales ha bajado sustancialmente, seg¨²n el Plan Nacional, ¡°fruto de los esfuerzos de control de la oferta¡±. Las que se perciben como m¨¢s accesibles son el cannabis (el 59% de las personas entrevistadas cree que podr¨ªa conseguirla f¨¢cilmente en 24 horas) y la coca¨ªna (40,6%). Para las dem¨¢s sustancias ilegales, la percepci¨®n de disponibilidad es muy inferior.
Causas de la ca¨ªda del tabaquismo
La brusca ca¨ªda del tabaquismo en una sola edici¨®n puede responder a varios factores, seg¨²n ha explicado Ram¨®n Villalb¨ª, el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas: ¡°Adem¨¢s de oscilaciones que pueden tener que ver con el azar, hay cambios demogr¨¢ficos, poblaci¨®n joven que se incorpora a la muestra y que fuma menos, poblaci¨®n mayor que lo va dejando, otra extranjera en cuyos pa¨ªses no es habitual fumar, especialmente entre las mujeres¡±.
Padilla ha a?adido que tambi¨¦n puede influir el debate generado en torno a las regulaciones del tabaco. El Ministerio de Sanidad ha ido presentando este a?o una serie de iniciativas, empezando por un Plan Nacional, para reducir el n¨²mero de fumadores. Esto cristalizar¨¢ en un Real Decreto que ya est¨¢ en audiencia p¨²blica y en una ley que el departamento pretende aprobar esta legislatura con medidas como la ampliaci¨®n de espacios libres de humos. ¡°La mejor campa?a contra el tabaco es ponerlo como prioridad ministerial¡±, ha dicho el secretario de Estado. A lo que Villalb¨ª ha agregado que el a?o con mayor reducci¨®n del tabaquismo en Espa?a fue 2004, cuando se debat¨ªa la primera ley antitabaco, que se aprob¨® en 2005.
La cara B de esta realidad es que ha crecido mucho el n¨²mero de personas que han fumado alguna vez en dispositivos electr¨®nicos. Seg¨²n la encuesta, ha pasado de un 12,1% a un 19%. Tambi¨¦n han crecido los usuarios habituales, pero con cifras mucho menores: se han duplicado los que los usaron en los ¨²ltimos 30 d¨ªas (4,6%), mientras que es mucho m¨¢s ligera la subida de los que lo consumen a diario (1,3%, tres d¨¦cimas m¨¢s que en 2022).
Menos de la mitad de los fumadores de estos dispositivos los emplea para dejar el tabaco tradicional, en una tendencia que no para de bajar desde que se comenz¨® a medir, hace seis a?os. ¡°Esto contradice el discurso de la patronal de la industria, que defiende que la utilizaci¨®n mayoritaria es para el abandono¡±, ha apuntado Padilla, que cree que no se puede achacar el descenso de fumadores de tabaco tradicional a la subida del electr¨®nico, ya que la subida de tres d¨¦cimas de estos no se corresponde a la ca¨ªda de casi ocho puntos de los pitillos.