Airbnb gana la batalla a San Francisco

Airbnb mantiene su feudo intacto. La aplicaci¨®n de alquiler de casas a corto plazo entre particulares seguir¨¢ siendo legal en San Francisco, el lugar donde naci¨®. Una iniciativa popular liderada por ciudadanos y hoteleros de la ciudad, la proposici¨®n F, lleva tres semanas en marquesinas, pancartas y anuncios de televisi¨®n porque la ciudad quer¨ªa limitar a 75 d¨ªas al a?o el tiempo que se pod¨ªa alquilar una vivienda, con fuertes multas y penalizaciones para qui¨¦nes lo superen.Las urnas han apoyado la decisi¨®n de mantener el r¨¦gimen actual.

Las inmobiliarias dejan cada vez m¨¢s apartamentos fueran del mercado local, para ofrecer a trav¨¦s de la aplicaci¨®n de hospedaje por d¨ªas o semanas con un r¨¦dito mucho mayor. Una de las consecuencias directas de este movimiento es la escalada de precios de la renta hasta los 4.225 d¨®lares que se pagan de media por un apartamento de una habitaci¨®n en la ciudad.

Los precios de la renta en la ciudad se han disparado hasta los 4.225 d¨®lares que se paga de media por un apartamento de una habitaci¨®n

Durante este tiempo, Airbnb ha mantenido un pulso desigual con los habitantes m¨¢s modestos de San Francisco, aquellos que ven c¨®mo los caseros les suben el alquiler hasta cifras que dif¨ªcilmente puede pagar alguien que no trabaje en tecnolog¨ªa, y que han formado un frente com¨²n con el lobby hotelero.

Airbnb ha empleado ocho millones de d¨®lares para promocionar el 'No' a la proposici¨®n F. La coalici¨®n de vecinos, especialmente los latinos del barrio de Mission, y el lobby hotelero cont¨® con 482.000 d¨®lares. Entre los argumentos de la aplicaci¨®n est¨¢ que la proposici¨®n fomenta que los vecinos se controlen entre s¨ª, se delaten y sean desleales. En algunos anuncios de televisi¨®n, se lleg¨® a abogar a la siempre pol¨¦mica privacidad como una de los derechos que se podr¨ªan vulnerar.

Desliz publicitario

La capacidad medi¨¢tica de Airbnb ha estado a punto de jugarle una mala pasada. Hace dos semanas pusieron carteles en algunos de los puntos m¨¢s transitados de San Francisco, explicando que gracias a los 12 millones de d¨®lares que se han dejado en las arcas de la ciudad desde que existen se hab¨ªan hecho algunas mejoras, pero que la gesti¨®n no era la m¨¢s adecuada. Las redes sociales se encendieron ante estos mensajes de tono demasiado agresivo. Tanto es as¨ª que los retiraron solo dos d¨ªas despu¨¦s y se disculparon.

Seg¨²n los datos de la startup, el pasado a?o 138.000 habitantes de la ciudad se quedaron en uno de sus espacios o ejercieron como anfitriones. El censo de votantes registrados de es de 446.841 personas.

Airbnb naci¨® hace solo cinco a?os, como una soluci¨®n temporal de sus creadores para hospedar en camas hinchables a los asistentes a una conferencia. Hoy cuenta con m¨¢s de dos millones de espacios en alquiler, ya sean habitaciones, camas o apartamentos completos, pasando por casas colgadas de un ¨¢rbol o castillos, distribuidas en 190 pa¨ªses. A pesar de su ¨¦xito, todav¨ªa no ha dado los primeros pasos para cotizar en bolsa y se mantiene como una compa?¨ªa privada. La valoraci¨®n alcanza 25.500 millones de d¨®lares, por encima de la de cadenas como Marriott o Starwood.