Llega la toma de temperatura contra la covid: ¡°Tiene 38?, no puede entrar a la tienda¡±

El d¨ªa en que los comercios vuelvan a abrir tras el confinamiento, muchos tendr¨¢n un nuevo portero: una c¨¢mara t¨¦rmica para tomar la temperatura corporal de trabajadores o clientes. Amazon acaba de comprar 1.500 c¨¢maras por 10 millones de d¨®lares a una pol¨¦mica empresa china, Dahua, acusada por Estados Unidos de colaborar en la represi¨®n contra los uigures. IBM...

El d¨ªa en que los comercios vuelvan a abrir tras el confinamiento, muchos tendr¨¢n un nuevo portero: una c¨¢mara t¨¦rmica para tomar la temperatura corporal de trabajadores o clientes. Amazon acaba de comprar 1.500 c¨¢maras por 10 millones de d¨®lares a una pol¨¦mica empresa china, Dahua, acusada por Estados Unidos de colaborar en la represi¨®n contra los uigures. IBM y Chrysler tambi¨¦n han adquirido dispositivos, aunque en cantidades menores.

En el caso de estas empresas, las c¨¢maras se usar¨¢n probablemente para el control de empleados en edificios de oficinas. El marco jur¨ªdico para trabajadores es distinto al de clientes o pasajeros en tiendas, centros comerciales, espacios deportivos, aeropuertos u otros lugares p¨²blicos. Una compa?¨ªa espa?ola, Fibratel, dice que la toma de temperatura ser¨¢ una de las tecnolog¨ªas clave de la nueva normalidad. Otra empresa espa?ola, Beabloo, ha presentado esta semana una soluci¨®n para el control de interiores. Uno de sus elementos clave ser¨¢ una c¨¢mara t¨¦rmica a la entrada.

La Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos (AEPD) tambi¨¦n ha detectado esta tendencia a tomar la temperatura ¡°aparentemente de forma generalizada y en muy variados entornos¡±. En un comunicado publicado este jueves, la AEPD quiere mostrar ¡°su preocupaci¨®n por este tipo de actuaciones, que se est¨¢n realizando sin el criterio previo y necesario de las autoridades sanitarias¡±.

?C¨®mo funcionan estos aparatos? La temperatura puede medirse de muchas maneras, desde term¨®metros de infrarrojos que apuntan a la frente o la pupila, a c¨¢maras t¨¦rmicas m¨®viles o fijas. Las c¨¢maras son uno de los sistemas m¨¢s flexibles porque no requieren que el trabajador o cliente se detenga ante ellas. Para mejorar su fiabilidad, las opciones m¨¢s refinadas colocan en el campo de visi¨®n de la c¨¢mara un ¡°cuerpo negro¡±, que sirve de referencia para calibrar la temperatura y reducir el margen de error.

La c¨¢mara capta la temperatura de todo el que entra en un recinto. La decisi¨®n de a qu¨¦ temperatura poner el l¨ªmite y qu¨¦ hacer con quien la supere la fijar¨¢ cada empresa o comercio. ¡°El vigilante de la puerta recibir¨¢ una alerta en tiempo real, en su m¨®vil o en una pantalla, y podr¨¢ parar a esa persona¡±, dice Alex de Dios, director legal de Beabloo. Es posible que le haga volver a pasar para verificar su temperatura. Es improbable que en los pr¨®ximos meses chorros de clientes entren a la vez en tiendas, lo cual facilita el sistema.

Una vez detectado el posible infectado, el vigilante puede bloquearle el paso o buscar una soluci¨®n intermedia. ¡°Otra soluci¨®n puede ser dar una mascarilla a esa persona, crear un carril r¨¢pido para atenderla antes o incluso comenzar a repartir mascarillas y guantes al resto la gente en tienda¡±, explica De Dios. El software de Beabloo permite lanzar mensajes por pantallas o altavoces en tiempo real, as¨ª que cualquier opci¨®n dist¨®pica es posible.

?Es todo esto legal?

Por ahora, s¨ª. No hay una regulaci¨®n espec¨ªfica. A la Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos le preocupa esta identificaci¨®n del posible infectado en directo. ¡°Una eventual denegaci¨®n de acceso a un centro educativo, laboral o comercial estar¨ªa desvelando a terceros que no tienen ninguna justificaci¨®n para conocerlo que la persona afectada tiene una temperatura por encima de lo que se considere no relevante y, sobre todo, que puede haber sido contagiada por el virus¡±, aseguran.

Las palabras de la AEPD advierten y recomiendan, pero no llevan ninguna carga reguladora. Hay ahora mismo un debate entre juristas. ¡°Es el gran tema ahora mismo¡±, dice Jorge Garc¨ªa Herrero, abogado especializado en privacidad.

Como dato personal, la temperatura est¨¢ regulada por el Reglamento Europeo de Protecci¨®n de Datos. Pero por s¨ª sola no es un elemento identificador de nadie: que una persona tenga 38? no dice nada de ¨¦l. ¡°El problema es a qu¨¦ datos va unida y las decisiones que se deriven¡±, dice Elena Gil, abogada experta en privacidad.

Como ocurre con otras soluciones urgentes, la medici¨®n de temperatura es solo una medida provisional que nos da sensaci¨®n de control. Pero su eficacia es discutida: ¡°Ahora mismo no hay medios m¨¢s eficaces y accesibles a la poblaci¨®n¡±, dice Gil. ¡°Una base de este debate es si tomar la temperatura es eficaz y creo que s¨ª porque la OMS afirma que casi el 90% de las personas con la covid-19 experimenta fiebre. Hay por tanto un inter¨¦s en medir la temperatura de alguien, siempre de acuerdo con el criterio de las autoridades sanitarias¡±, a?ade.

Garc¨ªa Herrero tiene sin embargo muchas m¨¢s dudas. ¡°Las restricciones de derechos tienen que ser id¨®neas, necesarias y proporcionales. Si tomar la fiebre no detecta que alguien tiene el virus, y resulta que un enfermo puede estar contagiando el virus sin tener s¨ªntomas visibles, entonces la prueba no solo no es eficaz, sino que puede ser contraproducente por crear una falsa sensaci¨®n de seguridad¡±, explica.

Con la moment¨¢nea falta de regulaci¨®n concreta y el debate jur¨ªdico abierto, es probable que las empresas tiendan a querer dar las garant¨ªas que tienen a mano tanto a su personal como a sus clientes.

La distop¨ªa dentro de las tiendas

Dentro de los edificios, la herramienta de Beabloo, avalada por Microsoft e Intel, ofrece soluciones poco imaginables hasta hace poco.

Los sensores y c¨¢maras que hay en los techos observan la posici¨®n de cada persona en el espacio cuatro veces por segundo. Eso permite controlar la distancia entre ellas y analizar los lugares m¨¢s concurridos. Dentro de una tienda grande pueden crearse caminos para que las aglomeraciones sean menos probables. La intenci¨®n de Beabloo es crear una app de realidad aumentada que permita ver en tiempo real los puntos calientes del establecimiento: los posibles focos de contagio. Esas zonas sirven tambi¨¦n para la desinfecci¨®n nocturna.

Las c¨¢maras dentro de las tiendas permiten ¡°leer¡± caras y ver si llevan m¨¢scaras o aventurar una edad aproximada. Ser¨ªa un modo de avisar al personal que debe ponerse una m¨¢scara, saber cu¨¢nta gente hay en la tienda sin ella, o la cantidad de ancianos, principal grupo de riesgo del coronavirus. Todas estas opciones las ofrece la tecnolog¨ªa. La actuaci¨®n concreta depender¨¢ siempre de cada empresa.

El aeropuerto de Estambul ya usa esta soluci¨®n de Beabloo, como otros clientes espa?oles, aunque la compa?¨ªa no ha querido revelarlos. Beabloo tambi¨¦n habr¨ªa presentado su tecnolog¨ªa al Ministerio de Sanidad, que por ahora no habr¨ªa decidido nada.

Todo esta tecnolog¨ªa ayuda a evitar contagios, pero no soluciona la pregunta definitiva: ?estar¨¢ el virus en alg¨²n lugar de esta tienda? Beabloo ha contactado con epidemi¨®logos para que les expliquen cu¨¢nta gente como m¨¢ximo debe haber en una determinada cantidad de metros cuadrados, cu¨¢ntas interacciones y de cu¨¢nto tiempo es razonable que un empleado mantenga con los clientes y cu¨¢nto tiempo puede sobrevivir el virus por ejemplo en piezas de ropa o en otra superficie.

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