El gran misterio de cu¨¢nta gente ha usado realmente Radar Covid
Desde el 1 de septiembre m¨¢s de 900.000 espa?oles han dado positivo por coronavirus. Un 1,45% de esos infectados emple¨® la aplicaci¨®n para advertir a sus contactos pero ?cu¨¢ntos fueron en realidad alertados?
Solo 13.482 espa?oles han usado la app Radar Covid para comunicar su positivo de covid y alertar a contactos estrechos. Esa cifra es un 1,45% del total de 927.640 casos que se han registrado en toda Espa?a desde el 1 de septiembre, fecha en la que la aplicaci¨®n de rastreo de contactos ya estaba disponible para todas las comunidades y cinco la hab¨ªan activado. Las dos comunidades m¨¢s afectadas, Madrid y Catalu?a, empezaron a repartir c¨®digos en octubre. Si descontamos los casos detectados hasta el d¨ªa de su activaci¨®n en las diferentes autonom¨ªas, el porcentaje de espa?oles que han usado...
Reg¨ªstrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PA?S, puedes utilizarla para identificarte
Solo 13.482 espa?oles han usado la app Radar Covid para comunicar su positivo de covid y alertar a contactos estrechos. Esa cifra es un 1,45% del total de 927.640 casos que se han registrado en toda Espa?a desde el 1 de septiembre, fecha en la que la aplicaci¨®n de rastreo de contactos ya estaba disponible para todas las comunidades y cinco la hab¨ªan activado. Las dos comunidades m¨¢s afectadas, Madrid y Catalu?a, empezaron a repartir c¨®digos en octubre. Si descontamos los casos detectados hasta el d¨ªa de su activaci¨®n en las diferentes autonom¨ªas, el porcentaje de espa?oles que han usado la aplicaci¨®n para comunicar su positivo sigue sin llegar al 2%.
Aunque estas cifras ya indican la escasa penetraci¨®n de Radar Covid, la complejidad para calcular con precisi¨®n su alcance es notable. La gesti¨®n cotidiana de la aplicaci¨®n recae en las comunidades aut¨®nomas. Pero su creaci¨®n fue obra del Gobierno, de la Secretar¨ªa de Estado de Digitalizaci¨®n e Inteligencia Artificial. Esta divisi¨®n de responsabilidades provoca ya cierta confusi¨®n. Las comunidades reparten los c¨®digos que los usuarios que han dado positivo deben introducir en la app para que alerte a sus contactos estrechos. La aplicaci¨®n comparte claves por bluetooth con los m¨®viles con los que se va cruzando cada d¨ªa. Cuando un usuario es diagnosticado como positivo por covid 19, le dan un c¨®digo para su m¨®vil. Ese c¨®digo permite subir a un servidor las claves que ha ido compartiendo y que alertan a sus contactos estrechos.
Entre todas las autonom¨ªas se han generado estos meses 117.224 de esos c¨®digos, seg¨²n ha podido saber EL PA?S tras insistentes llamadas durante 10 d¨ªas a cada una de las 17 consejer¨ªas de Sanidad auton¨®micas. Esos c¨®digos podr¨ªan ser una aproximaci¨®n suficiente para saber cu¨¢ntos usuarios positivos ten¨ªan la aplicaci¨®n en su m¨®vil: en principio, si una administraci¨®n genera un c¨®digo es porque hay un usuario que lo pide. Quiz¨¢ luego no acabe introduci¨¦ndolo en la app, pero al menos lo ha pedido.
Pues no es as¨ª, ni de lejos. Es mucho m¨¢s complicado. Lo que sabemos es que el servidor centralizado del Gobierno ha recibido solo 13.482 c¨®digos de los 117.224 generados.
?Por qu¨¦ los gobiernos auton¨®micos han generado tanto c¨®digo y luego solo se ha utilizado un 12,6% de ellos? La respuesta est¨¢ en los modelos de reparto de c¨®digos. Cada comunidad puede escoger el modelo de rastreo y reparto de c¨®digos que le convenga. Hay al menos tres estrategias.
Primero, unas comunidades esperaban que el rastreador ofreciera el c¨®digo y el paciente con la aplicaci¨®n en el m¨®vil lo aceptara. Si no hab¨ªa oferta y recepci¨®n, no hab¨ªa c¨®digo. Son las que en la tabla suman unos cientos de c¨®digos.
Segundo, las que generaban un c¨®digo por cada positivo, pero luego solo lo entregaban cuando el rastreador lo ofrec¨ªa y el paciente lo recog¨ªa o lo descargaba de una web. Hab¨ªa por tanto miles de c¨®digos generados esperando ser usados, al menos durante siete d¨ªas, porque luego caducan. La inmensa mayor¨ªa de veces esto no se produc¨ªa y se desactivaban.
Y tercero, las comunidades que enviaban un c¨®digo v¨ªa SMS junto al comunicado de positivo. En esos casos, todos los positivos recib¨ªan un c¨®digo. Por esta variedad de estrategias, la columna de ¡°c¨®digos generados o distribuidos¡± en la tabla tiene cifras tan discordantes entre autonom¨ªas. Los datos son desde la puesta en marcha de la app en cada comunidad hasta entre el 5 y el 10 de noviembre (no todas las comunidades han dado la cifra el mismo d¨ªa.)
Hasta principios de noviembre, cada comunidad optaba por su estrategia preferida para distribuir c¨®digos. Pero desde hace apenas una semana, seg¨²n fuentes de cuatro comunidades aut¨®nomas, en una reuni¨®n con el Gobierno se habr¨ªa recomendado la tercera opci¨®n: mandar un c¨®digo autom¨¢ticamente a todos los positivos, tengan o no la aplicaci¨®n descargada o sepan siquiera que existe Radar Covid. Es un modo evidente de facilitar el reconocimiento y el crecimiento de la app. As¨ª sabremos mejor que falla, dicen fuentes de la Secretar¨ªa de Estado de Inteligencia Artificial: ¡°Si se dan los c¨®digos a todos los diagnosticados pero s¨®lo un porcentaje de ellos los introduce en la app podremos saber que no se introducen bien porque no hay suficientes descargas o porque la gente no quiere notificarlo, pero no porque el sistema sanitario no los est¨¦ proporcionando¡±.
El problema claro de ese planteamiento es que hinchar¨¢ las cifras de c¨®digos subidos. Si un positivo no lleva la aplicaci¨®n en el m¨®vil y se la baja para introducir el c¨®digo no puede mandar nada al servidor porque su app no exist¨ªa en los d¨ªas anteriores en los que presumiblemente ha contagiado. La entrega de un c¨®digo a alguien que no tiene la aplicaci¨®n en su tel¨¦fono es como dar una entrada para un concierto que ya ha terminado y contarlo como p¨²blico. Y cuando la persona se extra?e al ver que no hay concierto, decirle que no se preocupe, que quiz¨¢ habr¨¢ otro pronto y entonces s¨ª le servir¨¢ la entrada. Es decir, esa persona ya tiene la aplicaci¨®n activada y si alguien de su entorno es positivo, quiz¨¢ le alerte. Es un modo de aumentar el n¨²mero de descargas. Este sistema sin embargo podr¨ªa tambi¨¦n provocar un mercadeo de c¨®digos: si un positivo no tiene la aplicaci¨®n pero su vecino o cu?ada s¨ª, pueden d¨¢rselo para que sus contactos pasen unos d¨ªas en cuarentena relajada. Cada c¨®digo es de uso ¨²nico y caduca a los siete d¨ªas.
La opci¨®n por esta estrategia ya ha provocado probablemente el aumento de las cifras de c¨®digos totales subidos al sistema, aunque un porcentaje est¨¦ vac¨ªo y no sirva para nada. El ingeniero Pedro Jos¨¦ Pereira cre¨® un bot para estimar los c¨®digos que los usuarios de la aplicaci¨®n suben al servidor. En su caso, solo detecta los usuarios que suben c¨®digos con claves compartidas, es decir, c¨®digos ¨²tiles para trazar contactos. Si una clave va sin datos, porque no ha tenido ning¨²n contacto, el bot de Pereira no la detecta. Desde el 1 de septiembre hasta el 11 de noviembre le salen 9.376 c¨®digos subidos, lejos de los 13.482 que da el Gobierno un. La diferencia entre ambas cifras podr¨ªan ser usuarios que se descargaron Radar Covid solo cuando supieron que eran positivos. En las ¨²ltimas dos semanas sin embargo s¨ª se ha visto ciertamente un crecimiento de c¨®digos subidos. Desde el 27 de octubre, d¨ªa en que Catalu?a empez¨® a repartir c¨®digos, la cifra de c¨®digos subidos se ha disparado hasta alrededor de 300 cada d¨ªa.
Las m¨¦tricas de eficacia de la app que usa la secretar¨ªa de Estado son precisamente estas dos: descargas totales y c¨®digos repartidos. As¨ª lo explican: ¡°Las descargas ahora mismo son m¨¢s de 5,3 millones, y el objetivo es llegar a unos 8 millones, que suponen ese 20% a partir del cual se empiezan a ver los beneficios de la aplicaci¨®n. Hemos llegado hasta aqu¨ª sin una gran campa?a institucional, y confiamos en que el hecho de que las comunidades est¨¦n repartiendo c¨®digos activamente ayude a terminar de conseguir el objetivo. Con esas dos variables podremos empezar a medir la efectividad real¡±, dicen. Los 5,3 millones de descargas ocultan un porcentaje de descargas inactivas. Seg¨²n datos de Smartme Analytics, que sacan de monitorizar 60.000 m¨®viles espa?oles, hay un 14,4% de espa?oles entre 18 y 65 a?os con la app en funcionamiento. Esa cifra implicar¨ªa una estimaci¨®n de unos 4,3 millones de usuarios activos en esa franja.
?Es realmente ¨²til?
Pero esas dos variables seguir¨ªan sin decirnos si la aplicaci¨®n es ¨²til: ?cu¨¢ntos ciudadanos se enteran de que han sido realmente contacto estrecho de un positivo por la app? Por privacidad, el sistema depende de la colaboraci¨®n del ciudadano. Si alguien ha estado en contacto con un positivo, es su m¨®vil quien le alerta. Esa informaci¨®n no sale del tel¨¦fono y el Gobierno no sabe cu¨¢ntas alertas se generan. ?Qu¨¦ alternativa aproximada hay para medir el ¨¦xito? Las llamadas a los servicios de atenci¨®n donde el ciudadano advierte espec¨ªficamente que llama ¡°por una alerta de Radar Covid¡±. Tampoco ha sido f¨¢cil recolectar esa informaci¨®n: casi la mitad de las comunidades no ten¨ªa esos datos recopilados, no los ten¨ªan disponibles o ni siquiera ten¨ªan previstos recogerlos. Cada comunidad tiene tambi¨¦n su sistema: en algunas se puede comunicar v¨ªa web o a varios servicios de atenci¨®n, desde l¨ªneas dedicadas a centros de atenci¨®n primaria. Claramente, no es un proceso sencillo.
De las nueve comunidades que s¨ª los ten¨ªan, en total los 13.482 usuarios que subieron sus claves provocaron al menos 7.952 alertas en los m¨®viles de espa?oles. Es de momento un impacto indudablemente peque?o: no llegar¨ªa a una alerta por cada usuario positivo.
Madrid aglutina el 90% de las llamadas que los espa?oles han hecho por una alerta de Radar Covid: 6.996. Desde la activaci¨®n de la aplicaci¨®n para toda la comunidad el 8 de octubre, ha habido en Madrid 58.624 positivos de covid. Desde unos d¨ªas antes, Madrid ha repartido 17.908 c¨®digos. El problema para calcular algo razonable con estas cifras es que Madrid pas¨® de dar los c¨®digos solo a quien los pidiera, a darlos a todos los positivos durante este periodo. Sea como sea, esos c¨®digos provocaron casi 7.000 llamadas. La proporci¨®n de una llamada por algo m¨¢s de dos c¨®digos en una ciudad como Madrid es poco satisfactoria, pero es algo m¨¢s sustancial.
La sensaci¨®n entre las comunidades con las que ha hablado EL PA?S es que hay margen de mejora para la pr¨®xima oleada. Los casos que la aplicaci¨®n ha podido trazar en Canarias o Cantabria se cuentan con los dedos de las dos manos. En Valencia no hay a¨²n ning¨²n caso porque empezaron a dar c¨®digos los ¨²ltimos, a principios de noviembre. En Baleares, han recibido solo 26 llamadas pero creen que el formulario estaba mal ajustado al principio. En Catalu?a, los usuarios afectados llaman a los centros de atenci¨®n primaria y no hab¨ªan recogido a¨²n sus n¨²meros. El mosaico y notas al pie de p¨¢gina en la estrategia de cada comunidad excede los detalles que se pueden dar en un art¨ªculo de peri¨®dico. En sus conversaciones, los encargados de comunicar sus cifras repet¨ªan las expresiones ¡°hasta arriba¡±, ¡°saturados¡±, ¡°desbordados¡±.
La cooperaci¨®n entre comunidades y Gobierno sufre tambi¨¦n de ciertas suspicacias mutuas. Una acci¨®n que ayudar¨ªa a las comunidades a conocer mejor su impacto es saber cu¨¢ntos c¨®digos suben los usuarios de cada territorio. El Gobierno lo sabe porque conoce los c¨®digos que genera cada comunidad y qu¨¦ c¨®digos se suben al servidor, con lo que sabe qu¨¦ comunidades est¨¢n aportando m¨¢s cantidad a la suma total. Pero de momento no quiere compartir esa cifra con los gobiernos auton¨®micos ni con este peri¨®dico. Smartme Analytics sin embargo tambi¨¦n estima el uso por comunidad aut¨®noma: Arag¨®n y Canarias, con un 22,9% de usuarios, ser¨ªan las dos comunidades con el porcentaje m¨¢s alto de aplicaciones activas, seguidas de Castilla y Le¨®n y Andaluc¨ªa. La comunidad con menos usuarios ser¨ªa Catalu?a (8,1%), seguida de Euskadi (10,3%) y Madrid (12,8%).
La comparaci¨®n con otros pa¨ªses es complicada por la diferente incidencia de la enfermedad. En ning¨²n pa¨ªs la aplicaci¨®n de rastreo de contactos es un ¨¦xito. Quiz¨¢ es una de esas soluciones que la tecnolog¨ªa ha sobrevendido. En Alemania hasta la semana pasada se hab¨ªan subido m¨¢s de 44.000 c¨®digos de positivos, pero la app est¨¢ en m¨¢s de 20 millones de m¨®viles. En Suiza han logrado calcular la relaci¨®n entre c¨®digos y positivos en Zurich, uno de los lugares con m¨¢s uso: se detecta un positivo gracias a la aplicaci¨®n por cada 10 c¨®digos introducidos.
Puedes seguir a EL PA?S TECNOLOG?A RETINA en Facebook, Twitter, Instagram o suscribirte aqu¨ª a nuestra Newsletter.