El pago del metro por reconocimiento facial lleva la sombra del ¡®Gran Hermano¡¯ al subsuelo de Mosc¨²
La capital rusa introduce bajo tierra esta tecnolog¨ªa, tambi¨¦n usada por la polic¨ªa para vigilar las calles. Los activistas temen que su implantaci¨®n erosione la privacidad de los ciudadanos
El metro de la capital rusa ha sido el primero del mundo en introducir el pago por la cara. Sin abono ni tarjeta de d¨¦bito, los m¨¢s de 12 millones de moscovitas ya pueden cruzar los tornos de sus m¨¢s de 240 estaciones ¨Dlo que lo convierten en el mayor de Europa¨D posicion¨¢ndose frente a una c¨¢mara. ¡°Mosc¨² es la ciudad con un mayor uso de la tecnolog¨ªa de reconocimiento facial en el mundo¡±, afirm¨® en su presentaci¨®n el vicealcalde, Maksim L...
El metro de la capital rusa ha sido el primero del mundo en introducir el pago por la cara. Sin abono ni tarjeta de d¨¦bito, los m¨¢s de 12 millones de moscovitas ya pueden cruzar los tornos de sus m¨¢s de 240 estaciones ¨Dlo que lo convierten en el mayor de Europa¨D posicion¨¢ndose frente a una c¨¢mara. ¡°Mosc¨² es la ciudad con un mayor uso de la tecnolog¨ªa de reconocimiento facial en el mundo¡±, afirm¨® en su presentaci¨®n el vicealcalde, Maksim Liks¨²tov. ¡°La privacidad se mantendr¨¢ al m¨¢s alto nivel. Si a¨²n est¨¢s preocupado por ese Gran Hermano, puedes estar tranquilo: no solo no nos sigue, sino que est¨¢ a nuestro servicio y nos abre todas las puertas¡±, dijo en un intento de tranquilizar a los desconfiados.
M¨¢s all¨¢ de cualquier preocupaci¨®n sobre la vida privada del ciudadano, las autoridades quieren situar la ciudad a la vanguardia en este campo. Su alcalde, Sergu¨¦i Sobyanin, prometi¨® recientemente que la red de videovigilancia de la capital, que cuenta con unas 206.000 c¨¢maras, ¡°se convertir¨¢ en una de las m¨¢s grandes del mundo, solo rivalizada por los sistemas chinos¡±. Por si fuera poco, hace unos d¨ªas el edil solicit¨® a los centros comerciales que tambi¨¦n aporten sus c¨¢maras al sistema de vigilancia con la excusa de supervisar el uso de las mascarillas.
De momento, la iniciativa del metro es te¨®ricamente independiente de la red de control del ayuntamiento. Para utilizar este sistema hay que vincular una foto, la tarjeta del banco y el abono transporte a una aplicaci¨®n. Seg¨²n sus dise?adores, es capaz de reconocer al pasajero si muestra un 40% de su rostro, aunque las autoridades recomiendan, en plena ola pand¨¦mica, bajarse la mascarilla. El ayuntamiento calcula que un 10% de los usuarios utilizar¨¢ este m¨¦todo de pago dentro de dos o tres a?os.
La iniciativa, como muchas otras de identificaci¨®n facial, ha despertado las suspicacias de las organizaciones defensoras de la privacidad de los ciudadanos. Nikita Istomin, experto de RosKomSvoboda, una ONG que apoya las redes abiertas de autorregulaci¨®n, y abogado del Centro de Derechos Digitales, afirma que este sistema puede tener dos objetivos: ¡°servir de prueba para el resto de Rusia¡± y ¡°reponer la base de datos de los organismos estatales con datos personales biom¨¦tricos¡±.
¡°La experiencia de Mosc¨², con sus errores y carencias, se utilizar¨¢ en la implementaci¨®n de la biometr¨ªa en todo el pa¨ªs; Mosc¨² es la metr¨®poli m¨¢s poblada y la ciudad con un mayor potencial de protesta¡±, asegura. ¡°Vista la cultura de la protecci¨®n de datos personales, que en muchos aspectos, especialmente el policial, est¨¢ por detr¨¢s de los est¨¢ndares europeos, no excluyo que sus inspiradores ideol¨®gicos quieran recopilar tanta informaci¨®n privada como sea posible por si acaso¡±.
Human Rights Watch se?ala que este tipo de tecnolog¨ªas estar¨¢n presentes en todos lados, aunque los Gobiernos m¨¢s democr¨¢ticos est¨¢n demorando su uso hasta lograr una mayor regulaci¨®n. ¡°Es una cuesti¨®n muy sensible, implica una vigilancia continua, es un caso diferente al de Facebook¡±, afirma Anastasia Zlobina, investigadora de la organizaci¨®n. Aunque puede ayudar en situaciones como las restricciones por coronavirus, sus riesgos son enormes. ¡°El Gobierno ruso tiene incentivos para expandirlo. No solo se aprovecha de la falta de regulaci¨®n, tambi¨¦n est¨¢ creando m¨¢s agujeros legales¡±, a?ade.
Colaboraci¨®n del empresariado
Las autoridades no son las ¨²nicas interesadas en la implantaci¨®n de la biometr¨ªa. ¡°Algunos bancos con participaci¨®n estatal han hecho lobby en este proyecto¡±, subraya RosKomSvoboda. Precisamente la mayor entidad financiera de la naci¨®n, Sberbank, que tiene 100 millones de clientes y en la que el Gobierno es accionista mayoritario, ha apostado por la identificaci¨®n facial y ha llevado su tecnolog¨ªa VisionLabs a las cajas de algunas de las mayores cadenas de supermercados del pa¨ªs, Pyatiorochka y Perekriostok, del grupo X5.
El dispositivo utiliza una c¨¢mara 3D que capta la profundidad a la hora de pagar. ¡°El alto grado de resoluci¨®n de la c¨¢mara garantiza un alto nivel de seguridad y evita la suplantaci¨®n de la identidad con fotos¡±, asegura el gigante comercial. El vicepresidente de X5, Kiril Tasriov, dijo ¡°estar convencido¡± de que el pago biom¨¦trico ¡°se utilizar¨¢ en todas partes muy pronto y se volver¨¢ tan com¨²n como pagar con una tarjeta bancaria o un tel¨¦fono inteligente¡±. Seg¨²n un estudio de Visa, copart¨ªcipe del proyecto, un 70% de los encuestados ve con buenos ojos utilizar este sistema.
El algoritmo VisionLabs es puntero en todo el mundo. En 2020 qued¨® primero en la clasificaci¨®n por precisi¨®n en reconocimiento facial del Instituto Nacional de Est¨¢ndares y Tecnolog¨ªa (NIST) del Departamento de Comercio de EE UU, donde destac¨® en las pruebas con visados y retratos policiales.
¡°Al analizar grupos de rostros en las bases de datos, es posible identificar el c¨ªrculo cercano del sospechoso y hacer predicciones sobre su paradero¡±, explican sus creadores al abordar la lucha contra el crimen. Sobre la cuesti¨®n de qu¨¦ es delito, eso ya depende de las autoridades: muchos manifestantes de las protestas de enero por la detenci¨®n de Alex¨¦i Navalni fueron arrestados en los d¨ªas posteriores gracias al sistema de identificaci¨®n facial moscovita.
No obstante, sus creadores han hallado muchos m¨¢s usos. ¡°Nuestros productos se pueden utilizar para algo m¨¢s que identificar a sospechosos¡±, afirma el creador de VisionLabs. ¡°Tambi¨¦n ser¨¢n apreciados por los urbanistas, que podr¨¢n analizar los movimientos de los ciudadanos por la ciudad y diferenciar las rutas de los residentes locales de las de los turistas. As¨ª se podr¨¢ determinar las ubicaciones m¨¢s exitosas para los servicios que necesitan los transe¨²ntes, como cafeter¨ªas, restaurantes y tiendas¡±, a?ade en un elogio a la optimizaci¨®n de beneficios.
Su lado comercial es evidente. ¡°Eval¨²e el nivel de satisfacci¨®n de los ciudadanos utilizando el algoritmo de reconocimiento de emociones de VisionLabs¡±, exclama un eslogan dirigido a comercios y empresas. ¡°La singularidad de nuestros productos radica en la extracci¨®n de los atributos faciales de acuerdo con las reglas de protecci¨®n de datos personales de casi cualquier pa¨ªs del mundo¡±, afirma. En concreto, Sberbank ofrece a las tiendas conocer ¡°las emociones¡± y lo que llama la atenci¨®n de sus clientes desde que pisan el establecimiento.
Otros usos son hacer el check-in en los aeropuertos o avisar al conductor de que se est¨¢ durmiendo al volante. Sin embargo, el que har¨ªa las delicias de un escritor de ciencia ficci¨®n es el destinado a empresas. Con la excusa de sustituir el pase de entrada por un sistema supuestamente m¨¢s ¨¢gil, tambi¨¦n ofrece al empresario ¡°configurar la videovigilancia dentro de la oficina y recopilar datos sobre los movimientos de los empleados¡±, algo que seguro que gustar¨¢ a muchos jefes encantados de conocer qu¨¦ hacen y padecen sus empleados.
¡°La privacidad se est¨¢ volviendo un asunto cada vez m¨¢s y m¨¢s complicado¡±, lamenta Zlobina. Por ello, Human Rights Watch recomienda ¡°tomarse los datos como algo muy importante; saber d¨®nde y a qui¨¦n se dan¡±. As¨ª, cuando la modernidad llegue a su ciudad, ser¨ªa conveniente recordar la tragedia de Fausto: si la cara es el espejo del alma, quiz¨¢s sea mejor no venderla al diablo.
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