La televisi¨®n de Nochebuena ha solventado la crisis del virus (y vuelve a enfrentarse a los problemas de antes)
La noche del 24 de diciembre se obr¨® el milagro y las principales cadenas generalistas de este pa¨ªs lograron pr¨¢cticamente calcar lo que llevan emitiendo durante los ¨²ltimos a?os en esta misma ocasi¨®n
Este 2020, la televisi¨®n ha vivido uno de sus a?os m¨¢s extra?os y complicados por culpa de una pandemia que, a los problemas que ya arrastraba el medio, le ha sumado otros nuevos que durante un tiempo parec¨ªan irresolubles. Pero la noche del 24 de diciembre se obr¨® el milagro y las principales cadenas generalistas de este pa¨ªs lograron pr¨¢cticamente calcar lo que llevan emitiendo durante los ¨²ltimos a?os en esta misma ocasi¨®n. Si no fuera por alguna que otra mas...
Este 2020, la televisi¨®n ha vivido uno de sus a?os m¨¢s extra?os y complicados por culpa de una pandemia que, a los problemas que ya arrastraba el medio, le ha sumado otros nuevos que durante un tiempo parec¨ªan irresolubles. Pero la noche del 24 de diciembre se obr¨® el milagro y las principales cadenas generalistas de este pa¨ªs lograron pr¨¢cticamente calcar lo que llevan emitiendo durante los ¨²ltimos a?os en esta misma ocasi¨®n. Si no fuera por alguna que otra mascarilla en pantalla y alg¨²n que otro comentario de los presentadores e invitados, por alguna que otra imagen de este a?o extra?o y feo, podemos concluir que la televisi¨®n generalista ha solventado la crisis pand¨¦mica y ya vuelve a enfrentarse a los mismos problemas de antes. Que son muchos y desfilaron orgullosos de haber recuperado protagonismo por casi todas las cadenas anoche.
La 1 celebraba los 30 a?os de Telepasi¨®n, ese especial en el que las caras m¨¢s conocidas de la cadena cantan y bailan. Presentaban Alaska, Florentino Fern¨¢ndez y La Terremoto de Alcorc¨®n. Se a?adi¨® narrativa, esta vez, alrededor del pendiente que perdido Lola Flores hace 43 a?os. Tambi¨¦n se recuperaron im¨¢genes de aquellas primeras emisiones del especial que nos recordaron, por ejemplo, lo incre¨ªblemente bien que canta Pedro Piqueras. La comparaci¨®n entre el pasado y el presente la perd¨ªa el presente por goleada, algo que sucedi¨® en cada programa de la noche en el que se enfrentaron realidades. Despu¨¦s, para equilibrar ese desajuste, Raphael volvi¨® a demostrar que esta igual de bien en este presente que en casi cualquier pasado. Pablo Albor¨¢n le sigui¨® con un especial dise?ado por alguien que, dios le bendiga, aspiraba a ser innovador.
Mientras, Telecinco apostaba por S¨¢lvame en su versi¨®n MasterChef. No es f¨¢cil saber si se trata de un parodia o un recreaci¨®n del programa original. Esta vez los equipos los formaban, por un lado, To?i Moreno y Mar¨ªa del Monte; por otro, Santiago Segura -la persona m¨¢s amortizada de la Nochebuena: estuvo a la vez en La Sexta- y Paz Padilla, la ¨²nica en el plat¨® con mascarilla y tambi¨¦n la ¨²nica que achuchaba a los dem¨¢s invitados y colaboradores, en una met¨¢fora casi perfecta de lo que ser¨ªa un persona de origen espa?ol en una pandemia.
Con el tiempo, S¨¢lvame ha logrado convertirse en una gran familia, pero no en el sentido de paz y concordia que contiene el concepto, sino en que en ellos se repiten los clich¨¦s de casi todas las familias tipo de este pa¨ªs. Esto, en una noche como esta y en un programa armado alrededor de una mesa, se hace m¨¢s que evidente. Est¨¢ el t¨ªo listillo, que ha viajado y dice que podr¨ªa comerse 69 ostras -tambi¨¦n es un poco canalla-; el cu?ado de Vox; la hermana que se forra con cada boom inmobiliario y se arruina con cada crisis; aquella t¨ªa que siempre acaba llorando; la otra que siempre la hace llorar y que es la ¨²nica con la que te ir¨ªas de copas, pues parece odiarlos a todos tanto como hac¨ªas t¨² de adolescente -ahora ya los amas, crecer es dejar la copa sobre la tele y abrazar con los brazos la derrota-; la cu?ada que nadie sabe c¨®mo ha acabado en esta familia porque no sabe ni coger los cubiertos y hasta ese padre cuya autoridad no decrece con el paso de los a?os y sigue siendo el m¨¢s listo de la familia aunque debe cambiar de peluquero.
Lo de S¨¢lvame tuvo sus momentos. Unos dir¨¢n que es normal que los tenga con todo lo que dura. Pero hay otros que no lograr¨ªan tener sus momentos ni realizando un programa de un a?o de duraci¨®n. Para comprobar que esto ¨²ltimo es posible, Antena 3 volvi¨® a confundir Nochebuena con Nochevieja con Lo mejor de cada casa, un recopilatorio de autopromoci¨®n con lo supuestamente m¨¢s simp¨¢tico del a?o en la cadena y con mucho Pablo Motos. Cuando este hizo el chiste sobre los allegados junto a Trancas y Barrancas en m¨¢s de una casa debi¨® coincidir con el mismo momento en el que alg¨²n cu?ado lo hac¨ªa mientras se ferraba a un langostino como Escarlata O¡¯Hara a aquel r¨¢bano, creando efecto espejo, rompiendo el continuo espacio-tiempo. El programa confirm¨® que el a?o ha sido incluso peor de lo que sospech¨¢bamos.
La apuesta por la comedia -m¨¢s segura que la de la m¨²sica- acostumbra a ser infalible en veladas como esta. No hay nada que rellene mejor los silencios familiares que una sonrisa provocada por alguien que no es de la familia. Son sonrisas puras, no inducidas por filias o fobias sangu¨ªneas. La Sexta apost¨®, pues, por una edici¨®n de El Club de la Comedia en la que apareci¨®¡ Santiago Segura. Ya sabemos todos lo que es y, lo mejor, ya sabemos si nos gusta o no, porque a medida que pasan los a?os, los mon¨®logos de unos y otros se parecen tanto que resulta imposible saber qu¨¦ c¨®mico te hace re¨ªr y cu¨¢l no.
La 2, dios la tenga en gloria por esto y por los documentales de animales y las pelis de Carl Theodor Dreyer, emiti¨® C¨®mo nos re¨ªmos -tenemos aqu¨ª un problema serio con lo de titular los programas-, una descacharrante recopilaci¨®n de los mejores momentos del humor patrio vintage. Solo por ver a Tip y Coll en un montaje que un¨ªa la infinidad de veces que hicieron en pantalla el memorable gag en el que Coll nos ense?a a servir agua de una jarra a un vaso y Tip lo va traduciendo al franc¨¦s, vali¨® la pena la noche. Ver esta emisi¨®n invitaba a concluir que cualquier tiempo pasado fue mejor, algo que normalmente est¨¢ feo y es falso. Pero en este 2020 est¨¢ m¨¢s que justificado.