La vuelta de ¡®Caiga quien caiga¡¯: ya han ca¨ªdo todos
Vuelve ¡®Caiga quien caiga¡¯, por quinta vez, y lo har¨¢ a su cadena original, Telecinco. Hoy Esperanza Aguirre ya va ella a la tele, el rey Felipe no va a los Goya, y a casi nadie le har¨ªa ilusi¨®n que se le regalaran unas gafas al rey Juan Carlos
Los domingos de 1996 a 2002, despu¨¦s del telediario de las 15:00, ve¨ªamos Caiga quien caiga, en Telecinco. Hoy los domingos, despu¨¦s del telediario de las 15:00 y de los deportes, en Telecinco se puede ver Fiesta. Iba a escribir que Caiga quien caiga lo ve¨ªamos despu¨¦s de comer, pero en mi casa los acordes con los que la banda del Maestro Reverendo abr¨ªa el programa nos pillaban casi siempre llev¨¢ndonos el te...
Los domingos de 1996 a 2002, despu¨¦s del telediario de las 15:00, ve¨ªamos Caiga quien caiga, en Telecinco. Hoy los domingos, despu¨¦s del telediario de las 15:00 y de los deportes, en Telecinco se puede ver Fiesta. Iba a escribir que Caiga quien caiga lo ve¨ªamos despu¨¦s de comer, pero en mi casa los acordes con los que la banda del Maestro Reverendo abr¨ªa el programa nos pillaban casi siempre llev¨¢ndonos el tenedor a la boca.
Caiga quien caiga adaptaba un formato argentino hom¨®nimo y demostr¨® la importancia de estar en el sitio y a la hora indicados: se estren¨® cinco d¨ªas despu¨¦s de que Aznar ganara sus primeras elecciones. Pronto se convirti¨® en un azote c¨®mico del gobierno, quiz¨¢ el primero, con seguridad el m¨¢s relevante, emitido por una cadena privada. El fen¨®meno popular en el que se convirti¨® provoc¨® que los pol¨ªticos entraran al trapo: negarse a aceptar las gafas de CQC, algo que solo hicieron unos pocos, era permitirse el lujo de quedar delante de toda Espa?a como un maleducado.
Recuerdo vivir como un ¨¦xito cuando consiguieron que el rey Juan Carlos se pusiera las gafas de sol del programa y tengo muy presente cuando Pablo Carbonell, tras los Goya del a?o 2000, le entreg¨® al entonces soltero pr¨ªncipe Felipe un VHS de El pr¨ªncipe y la corista para bromear con una hipot¨¦tica relaci¨®n con Aitana S¨¢nchez Gij¨®n, de aquella presidenta de la Academia de cine. A posteriori muchos quisieron ver en ese compadreo con ciertos pol¨ªticos una bajada de guardia. Hubo quien les culp¨® del auge de Esperanza Aguirre, de la que se rieron de formas que hoy nos har¨ªan arquear la ceja. A unos les parec¨ªan cortesanos, a otros demasiados hirientes. Puede que ambos tuvieran algo de raz¨®n, pero entonces nos encantaba. El candor lo perdimos despu¨¦s.
Vuelve Caiga quien caiga, por quinta vez, y lo har¨¢ a su cadena original, Telecinco (la ¨²ltima fue Cuatro, en 2010, y antes pas¨® por La sexta). Hoy Esperanza Aguirre ya va ella a la tele ¨Dno necesita que la tele vaya a ella¡ª, el rey Felipe no va a los Goya, y a casi nadie le har¨ªa ilusi¨®n que se le regalaran unas gafas al rey Juan Carlos. Hoy ser cercano con pol¨ªticos de un signo ser¨ªa despertar de inmediato el odio de los opuestos y ser cr¨ªtico con unos echar¨ªa a los propios. Hoy ya han ca¨ªdo todos. Buena suerte.
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