El programa electoral de los republicanos adopta la l¨ªnea de mano dura con la inmigraci¨®n que defiende Trump
El documento, de una veintena de puntos, promete sellar la frontera y la mayor deportaci¨®n de extranjeros en la historia de Estados Unidos
A falta solo de que sea refrendado la semana pr¨®xima en la convenci¨®n nacional, que se celebrar¨¢ en Milwaukee, el Partido Republicano de Estados Unidos ha dado los ¨²ltimos retoques a su programa electoral, que incluye llevar a cabo la mayor deportaci¨®n de migrantes de la historia del pa¨ªs en caso de que su candidato, Donald Trump, gane las elecciones del pr¨®ximo 5 de noviembre. Temas candentes como el derecho al aborto, una de las principales bazas de los dem¨®cratas, o el matrimonio igualitario han quedado disimulados en el breve programa, que apuesta por ¡°volver al sentido com¨²n¡± mediante una agresiva agenda legislativa destinada a poner patas arriba la inmigraci¨®n, la econom¨ªa y otras cuestiones, m¨¢s perentorias que las ideas, de la vida de los estadounidenses.
Dedicada a los ¡°hombres y mujeres olvidados de Am¨¦rica¡±, el documento, adoptado por el Comit¨¦ de Plataforma del Comit¨¦ Nacional Republicano (CNR), suena como lo har¨ªa cualquier discurso de campa?a de Trump y ofrece 20 promesas m¨¢s parecidas a esl¨®ganes que a conceptos. Los dos primeros puestos de la lista son para, en may¨²sculas, ¡°sellar la frontera y detener la invasi¨®n de migrantes¡± y ¡°llevar a cabo la mayor operaci¨®n de deportaci¨®n de la historia de Estados Unidos¡±, como ha prometido tantas veces el candidato en sus m¨ªtines e incluso en sus comparecencias ante la prensa en las jornadas del juicio penal por el caso Stormy Daniels. El punto d¨¦cimo del programa retoma su obsesi¨®n migratoria y equipara sin fundamento la llegada de extranjeros con la delincuencia y el crimen organizado: ¡°Detener la epidemia de delincuencia migrante, acabar con los c¨¢rteles extranjeros de la droga, aplastar la violencia de las bandas y encerrar a los delincuentes violentos¡±.
La campa?a de Trump ha reducido la plataforma del partido a este manual b¨¢sico electoral de 20 lemas, que no aparecen explicados (el punto tres, ¡°acabar con la inflaci¨®n y que Am¨¦rica vuelva a ser asequible¡±, tiene una formulaci¨®n tan vaga como el resto) y que calcan las prioridades de su p¨¢gina web de campa?a. Para ello, se ha distanciado claramente del pol¨¦mico, y m¨¢s farragoso ¡ªpor conceptual¡ª Proyecto 2025, un ideario ultraconservador ideado por centros de pensamiento republicanos como Heritage Foundation que para muchos constituye la espina dorsal de la nueva revoluci¨®n conservadora.
En un intento de atraer a los votantes indecisos y moderados, el programa menciona una sola vez el aborto, en una declaraci¨®n sobre la determinaci¨®n del partido a proteger ¡°la cuesti¨®n de la vida¡± que dice: ¡°Nos opondremos al aborto tard¨ªo¡±, es decir, en plazos cercanos a las 16 semanas de gestaci¨®n. En las pocas ocasiones en que a lo largo de la campa?a se ha manifestado al respecto, Trump se ha mostrado partidario de dejar la regulaci¨®n de la interrupci¨®n voluntaria del embarazo en manos de los Estados. El programa ya no hace referencia al ¡°matrimonio tradicional¡±, entre un hombre y una mujer, como s¨ª defend¨ªa la plataforma republicana en las campa?as de 2016 y 2020.
Las guerras culturales s¨ª est¨¢n m¨¢s presentes en el documento, en paralelo a su presencia en las aulas: por ejemplo, en la promesa firme de limitar la financiaci¨®n federal de las escuelas que ense?an la denominada teor¨ªa cr¨ªtica de la raza, ¡°la ideolog¨ªa radical de g¨¦nero y otros contenidos raciales, sexuales o pol¨ªticos inapropiados para nuestros ni?os¡± (punto 16), as¨ª como mantener ¡°a los hombres [trans] fuera de los deportes femeninos¡± (17).
El programa carga todas las tintas en la habitual reivindicaci¨®n nacionalista, ¡°Estados Unidos primero¡±, de los m¨ªtines de Trump. El proteccionismo que el expresidente y candidato republicano pretende imponer si es reelegido en noviembre, con nuevos aranceles sobre la mayor¨ªa de las importaciones, se manifiesta en proclamas como ¡°hacer de Estados Unidos el productor de energ¨ªa dominante en el mundo, ?y con diferencia!¡± y ¡°detener la externalizaci¨®n [outsourcing] y convertir a Estados Unidos en una superpotencia manufacturera¡±, los puntos cuatro y cinco, respectivamente, del programa. La particular obsesi¨®n de Trump con los coches el¨¦ctricos ¡ªy la consiguiente competencia china¡ª, manifestada extempor¨¢neamente en muchas ocasiones, encuentra tambi¨¦n acomodo en el punto 15 del documento: ¡°Anular el mandato [de la actual Administraci¨®n dem¨®crata para impulsar la producci¨®n] de veh¨ªculos el¨¦ctricos y recortar la costosa y onerosa normativa¡±.