Trump despide a las juezas encargadas de los tribunales de inmigraci¨®n
El republicano fulmina en su primer d¨ªa a las cuatro funcionarias que supervisaban un sistema que debe resolver 3,5 millones de casos
Donald Trump busca transformar r¨¢pidamente el sistema de inmigraci¨®n de Estados Unidos. En el marco de su investidura, el presidente destituy¨® a las cuatro juezas responsables de supervisar las 71 cortes federales de migraci¨®n, un sistema que enfrenta un atasco con 3,5 millones de casos pendientes. Esta acci¨®n se suma a la firma de una decena de medidas en su primer d¨ªa en la Casa Blanca, que restringen dr¨¢sticamente el acceso de migrantes, ya sea como indocumentados o refugiados legales.
Fuentes del nuevo Departamento de Justicia confirmaron a los medios estadounidenses la destituci¨®n de las juezas, comunicada a la Oficina Ejecutiva para la Revisi¨®n de la Inmigraci¨®n en las primeras horas del Gobierno entrante. Las funcionarias cesadas son la jueza presidenta, Sheila McNulty; la directora del sistema, Mary Cheng; la encargada de pol¨ªticas p¨²blicas, Lauren Alder Reid; y la abogada general, Jill Anderson. Todas ellas contaban con amplia experiencia y hab¨ªan servido a presidentes de ambos partidos en el sistema de tribunales especializados creado en 1983, que depende del Ejecutivo y no del Poder Judicial.
Trump design¨® a la jueza Sirce Owen como directora interina en sustituci¨®n de McNulty, quien hab¨ªa asumido el cargo en 2023 tras casi siete a?os en la c¨²pula del organismo. Durante la Administraci¨®n Biden, McNulty presid¨ªa el circuito de apelaciones en materia migratoria. Por su parte, Owen fue en el primer mandato de Trump la principal consejera jur¨ªdica de ICE, la agencia de Interior encargada de localizar, detener y deportar migrantes.
McNulty figuraba en la lista de los ¡°bur¨®cratas m¨¢s buscados¡± elaborada por la Fundaci¨®n Heritage, un influyente think tank ultraconservador que redact¨® el Proyecto 2025, una gu¨ªa de duras pol¨ªticas p¨²blicas para el nuevo Gobierno. La jueza, junto con otros funcionarios del Departamento de Seguridad Interior, fue criticada por este grupo por tener una visi¨®n m¨¢s humanitaria de la migraci¨®n.
La Fundaci¨®n Heritage tambi¨¦n cuestion¨® a McNulty por imponer el silencio a los jueces migratorios, impidi¨¦ndoles hablar sobre el rezago en el cierre de casos. Durante la Administraci¨®n Biden, el incremento en la llegada de migrantes exacerb¨® la carga de trabajo, pasando de 1,2 millones de casos pendientes en 2020 a 3,5 millones en 2024. Para afrontar esta demanda, se contrataron 220 nuevos jueces en cuatro a?os.
El sistema judicial de inmigraci¨®n es clave para decidir si un inmigrante que ha violado las leyes migratorias puede permanecer en Estados Unidos o debe ser deportado. La mayor¨ªa de las decisiones de los 735 jueces de la red judicial favorecen la expulsi¨®n, aunque el proceso puede prolongarse por a?os.
Los jueces tambi¨¦n eval¨²an miles de peticiones de asilo y supervisan las entrevistas de ¡°miedo cre¨ªble¡±, donde los solicitantes deben demostrar ante una autoridad migratoria que enfrentan un riesgo real de persecuci¨®n o tortura si son retornados a sus pa¨ªses de origen.
Expertos interpretan estas destituciones como una clara se?al de que Trump pretende reformar r¨¢pidamente el sistema y endurecer la pol¨ªtica migratoria para frenar el flujo de inmigrantes. El republicano hered¨® de Biden las cifras de cruces irregulares m¨¢s bajas en tres a?os.
El despido de los jueces se suma al endurecimiento de la frontera sur. Entre las ¨®rdenes ejecutivas firmadas por Trump destaca la suspensi¨®n de los procedimientos de asilo, aunque el decreto contempla la posibilidad de reanudarlos en los pr¨®ximos meses. No obstante, la medida parece improbable considerando otras acciones adoptadas, como el cierre de la frontera con M¨¦xico, el despliegue de tropas en varios puntos estrat¨¦gicos y la amenaza de prohibir la entrada a ciudadanos de pa¨ªses que Trump considera parte de una ¡°invasi¨®n¡±.