Euskadi es la ¨²nica comunidad con m¨¢s alumnos de colegios privados que p¨²blicos

La red privada concertada (que suma en la comunidad a todos los centros escolares privados) escolariza ya a m¨¢s de la mitad de los estudiantes en el Pa¨ªs Vasco, en concreto al 53,2%. Se trata de un caso ¨²nico en Espa?a, donde la red p¨²blica es preponderante. Tan s¨®lo Madrid y Catalu?a, con un 43,5% y un 42% respectivamente de alumnos en los colegios privados, se acercan a las cotas de Euskadi, pero a gran distancia todav¨ªa. Con el paso de los a?os, los centros privados concertados han ido ganando peso en la comunidad vasca en detrimento de los p¨²blicos, rompiendo as¨ª con la paridad establecida por el Pacto Escolar en 1992.

Aquel acuerdo, suscrito por PNV, PSE y Euskadiko Ezkerra, fue un intento de pacificar el sector y acabar con la guerra escolar entre redes, que pugnaban por captar al alumnado desde edades muy tempranas para lograr as¨ª mantenerle fiel durante todo el ciclo escolar. Diez a?os despu¨¦s, la guerra escolar contin¨²a en pleno apogeo y el objetivo de que cada red escolarizase a un 50% de los alumnos no ha fructificado.

Dos son las razones que ayudan a explicar la relevante presencia de los centros privados concertados en Euskadi. Por una parte, la gran penetraci¨®n social de las ¨®rdenes religiosas y de sus colegios y, por otro lado, el movimiento de las ikastolas, que surgi¨® como una alternativa al modelo de escuela nacional propugnado por el franquismo.

De esta forma, Euskadi contaba con hasta tres redes educativas a comienzos de los a?os 90. La ley de Confluencia de las Ikastolas, elaborada por el PSE en 1988 cuando dirigi¨® por primera vez la consejer¨ªa de Educaci¨®n, facilit¨® la publificaci¨®n de m¨¢s de la mitad de estos centros. Este proceso culmin¨® en el a?o 1994. A partir de ese momento, ya s¨®lo cabe hablar de dos redes.

Las singularidades del modelo privado en Euskadi no terminan ah¨ª. El 100% de los centros de titularidad privada est¨¢n acogidos al r¨¦gimen de concertaci¨®n (reciben dinero p¨²blico para poder funcionar), con una cobertura mucho m¨¢s amplia que en otros sistemas educativos del entorno.

Para el pr¨®ximo a?o, Educaci¨®n ha presupuestado un total de 411 millones de euros para conciertos, lo que supone el 32% del total del gasto para la ense?anza no universitaria.

No s¨®lo existen conciertos educativos plenos para todas las aulas de entre 3 y 16 a?os, sino que el grado de financiaci¨®n de la ense?anza no obligatoria (bachillerato y los ciclos de FP) es muy alto. En el resto de Espa?a, es ahora cuando algunas comunidades han empezado a concertar la educaci¨®n infantil, pero no hay absolutamente nada en la postobligatoria, salvo en Navarra. Sin embargo, ese alto nivel de subvenciones que reciben los centros privados no ha servido para que repartan con los colegios p¨²blicos las cargas educativas de una manera igualitaria.

Por ejemplo, la p¨²blica escolariza al 56% de los alumnos con alg¨²n desfase entre la edad que tienen y el curso en que deber¨ªan estar; al 64% de los que no logran promocionar; al 67% de los inmigrantes y al 62% de alumnos con alg¨²n tipo de discapacidad y que precisan una atenci¨®n especial.

Alfonso Unceta, profesor de Sociolog¨ªa de la UPV, y viceconsejero de Educaci¨®n la pasada legislatura, es un estudioso del peso de la relaci¨®n p¨²blico-privado. Unceta llama la atenci¨®n sobre la pobre opini¨®n que la sociedad tiene de todo lo relacionado con lo p¨²blico, y en especial cuando se trata de la escuela. "La red p¨²blica escolariza a todo el mundo, desde ni?os con discapacidades hasta inmigrantes pasando por alumnos que han fracasado en los colegios privados. Eso hace que haya una percepci¨®n de lo p¨²blico como algo poco selecto".

Nacionalismo

Seg¨²n el ex viceconsejero, "es injusto y reduccionista responsabilizar al nacionalismo de todos los males de la p¨²blica". "En ocho a?os de gesti¨®n socialista", asegura, "la red publica s¨®lo avanz¨® porcentualmente con la publificaci¨®n de las ikastolas. Por lo tanto, las cosas son m¨¢s complejas. S¨ª que creo que el nacionalismo tiene una sensibilidad bastante escasa hacia la educaci¨®n p¨²blica. La identificaci¨®n en un momento hist¨®rico con lo estatal, con lo nacional hizo de ello una losa muy pesada".

Otro factor que juega a favor de los centros privados es su estructura. Despu¨¦s de la reforma educativa, en casi todos los colegios concertados se puede estudiar desde los dos hasta los 18 a?os, un factor de competitividad importante frente a los p¨²blicos, donde un alumno a lo largo de su vida escolar tendr¨¢ que cambiar varias veces de centro. Son momentos en que los padres aprovechan para reflexionar sobre la conveniencia de enviarlo a uno privado y evitarse movimientos.

Isabel Cela¨¢, portavoz parlamentaria del PSE en temas educativos, era en 1992, cuando se alumbr¨® el Pacto Escolar, viceconsejera de Educaci¨®n. La actual evoluci¨®n de la escolarizaci¨®n de las dos redes le preocupa y no duda en culpar a "la pol¨ªtica nacionalista" de que se haya roto el equilibrio. "El nacionalismo", dice, "ha sido siempre favorable a la red privada y muy insensible a las necesidades de la p¨²blica. No quiere darse cuenta de que los colegios p¨²blicos son los ¨²nicos que garantizan la igualdad de oportunidades porque est¨¢n en todos los sitios, all¨ª donde la red privada no quiere llegar. Y la privada, salvo honrosas excepciones, no atiende a la poblaci¨®n con m¨¢s problemas, como a los alumnos con necesidades educativas especiales, los que fracasan y a los inmigrantes".

Cela¨¢ da otro dato que ayuda a explicar el escoramiento de alumnos a la privada. Antes del Pacto Escolar, lo que suced¨ªa es que muchos alumnos estudiaban en la red privada concertada y a partir de los 14 a?os se iban a los institutos de Bachillerato, porque la educaci¨®n postobligatoria no estaba financiada. Pero ahora ese tramo tambi¨¦n est¨¢ concertado. Los ¨²ltimos dos gobiernos nacionalistas han aumentado la concertaci¨®n de este nivel (un 11% m¨¢s para bachilleratos este curso, cuando el presupuesto del departamento sube un 6%). "Eso significa que se est¨¢ haciendo una pol¨ªtica de concertaci¨®n en tramos no obligatorios cuando existe oferta p¨²blica", protesta Cela¨¢.

"Reequilibrar las cargas"

El viceconsejero de Educaci¨®n, Abel Ariznabarreta, rechaza que la sociedad funcione con el esquema dual p¨²blica-privada, atribuyendo a una m¨¢s valores que a la otra. En su opini¨®n, los ciudadanos distinguen m¨¢s aspectos que el car¨¢cter p¨²blico y privado. "Cada red aporta valores al conjunto, son distintas, pero igual de v¨¢lidas. La sociedad hace una demanda al sistema educativo y ¨¦ste le da respuesta. Las demandas de la sociedad son diversas y en la medida que cada bloque se ajuste mejor a esas peticiones se establecer¨¢ el equilibrio y la verdadera dimensi¨®n de cada una".

Seg¨²n Ariznabarreta, el futuro acuerdo escolar no puede tomar como ¨²nico referente la cuesti¨®n de la financiaci¨®n. "El verdadero reto", enfatiza, "es conciliar el objetivo de incrementar la calidad y la necesidad de atender a un alumnado cada d¨ªa m¨¢s heterog¨¦neo. Tienen que reequilibrarse las cargas entre las redes. La financiaci¨®n debe estar en funci¨®n de que se asuman una serie de compromisos, como acoger a m¨¢s colectivos desfavorecidos por parte de los colegios privados concertados. El equilibrio saldr¨¢ de ah¨ª, el nuevo pacto tiene que centrarse en ese aspecto".