La posesi¨®n del presidente Petro
Despu¨¦s de una de las campa?as m¨¢s sucias de excesos verbales y de amenazas de des¨®rdenes sociales y de orden p¨²blico ha vuelto la moderaci¨®n y la calma
Como se ir¨¢ a posesionar y en donde el Presidente Petro, no lo sabemos. Con corbata o sin corbata y en caso tal seria la primera vez que un Presidente electo se presenta con la camisa abierta al juramento de rigor. Tampoco sabemos si lo har¨¢ en la plaza de Bolivar o en el patio N¨²?ez, entre el Capitolio y la fachada del Palacio de Nari?o, ambas arquitecturas majestuosas. Se descarta el recinto del Congreso por falta de capacidad p...
Como se ir¨¢ a posesionar y en donde el Presidente Petro, no lo sabemos. Con corbata o sin corbata y en caso tal seria la primera vez que un Presidente electo se presenta con la camisa abierta al juramento de rigor. Tampoco sabemos si lo har¨¢ en la plaza de Bolivar o en el patio N¨²?ez, entre el Capitolio y la fachada del Palacio de Nari?o, ambas arquitecturas majestuosas. Se descarta el recinto del Congreso por falta de capacidad para recibir a los congresistas, a los invitados especiales y a la prensa.
La gran pregunta es si habr¨¢ pueblo en la plaza para festejar ¡°el cambio¡± de la misma manera que se registr¨® espont¨¢neamente el 29 de mayo cuando mucha gente sali¨® a la calle para celebrar el resultado . Hay que tener en cuenta que el Presidente Petro es un populista bueno para sus seguidores y un populista malo para sus contradictores.
Los presidentes del Peru, Pedro Castillo. De Bolivia, Luis Arce Catacora. De Chile, Gabriel Boric, se posesionaron sin corbata y la experiencia no parece buena. En Colombia ya hab¨ªamos cambiado el protocolo cuando los presidentes abandonaron la sacoleva (chaque), el pantal¨®n rayado y hasta el cubilete para atender el juramento ante el congreso de su honrosa condici¨®n de nuevos jefes de Estado. Llegaban para entonces con la banda presidencial puesta debajo del chaque y no como ahora en que la banda se la pone el Presidente del Congreso en la transmisi¨®n del mando por encima del saco, como si lo estuviera condecorando.
La corbata ha venido perdiendo posici¨®n social, la moda se impone, la diversidad en el vestido rompe la unidad, los colores de las camisas y de los trajes vienen con sorpresas. Rienda suelta a la creatividad personal. El diccionario ya ven¨ªa conspirando contra la corbata al registrar una acepci¨®n colombiana de la palabra corbata: empleo de poco esfuerzo y buena remuneraci¨®n. Fulanito de tal se consigui¨® una ¡°corbata¡± buen¨ªsima para referirse a un oficio en el que no hay que trabajar.
En realidad la corbata para bien o para mal no importa por aquello de que el h¨¢bito no hace al monje y que la mona aunque se vista de seda mona se queda. Tenemos presidentes de izquierda con corbata como Alberto Fern¨¢ndez y Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. Luego por el lado de la corbata no es la vaina. Lo que s¨ª debemos reconocer es que el Presidente Petro es un dirigente de la izquierda colombiana y que por m¨¢s Acuerdo Nacional que proponga, sus principales objetivos program¨¢ticos son de izquierda. Reforma Agraria y Reforma a la salud para demostrar que cubrimiento no es lo mismo que acceso a la salud. Cubrimiento es un carnet. Reforma a las fuerzas militares y de polic¨ªa. Reforma tributaria para grabar a las personas naturales que ganen m¨¢s de quince millones. Y la que m¨¢s preocupa al partido de los economistas, disminuyendo la expansi¨®n, exploraci¨®n y extracci¨®n, aumentando las inversiones en gas y petroquimica. El propio Ministro Ocampo le tom¨® distancia al debilitamiento de la pol¨ªtica petrolera.
Es evidente que despu¨¦s de una de las campa?as m¨¢s sucias de excesos verbales y de amenazas de des¨®rdenes sociales y de orden p¨²blico ha vuelto la moderaci¨®n y la calma. Cuanto dure la euforia, nadie lo puede saber. El fantasma de Venezuela no deja de perturbar el ambiente. Se buscan coincidencias en las purgas militares con los cambios en la c¨²pula y el traslado de la polic¨ªa del ministerio de Defensa a otro ministerio que se crear¨ªa para atender la convivencia ciudadana y atienda los desenlaces fatales de sus derivaciones en muertos. Lo que m¨¢s asusta es la convocatoria a una Constituyente y la utilizaci¨®n del modelo de expropiar propiedades para perfeccionar la redistribuci¨®n de la tierra. El Presidente Petro ha reiterado su compromiso de no expropiar y de no cambiar la estructura constitucional de 1991.
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