Muhammad Yunus: ¡°El mundo nunca hab¨ªa estado tan en crisis como ahora¡±
El premio Nobel de la Paz defiende en entrevista con EL PA?S su teor¨ªa de los ¡°tres ceros¡±: cero cambio clim¨¢tico, cero concentraci¨®n de la riqueza y cero desempleo
Muhammed Yunus, el ganador del Premio Nobel de la Paz en 2006 por su trabajo para ¡°crear desarrollo social y econ¨®mico desde abajo¡±, exuda serenidad. El ¡°banquero de los pobres¡± (Chittagong, Banglad¨¦s, 82 a?os) recibe a EL PA?S minutos antes de encabezar un foro en celebraci¨®n de los 10 a?os en Colombia de una de las organizaciones que lidera, Yunus Social Business. Responde las preguntas mientras bebe un t¨¦, sin levant...
Muhammed Yunus, el ganador del Premio Nobel de la Paz en 2006 por su trabajo para ¡°crear desarrollo social y econ¨®mico desde abajo¡±, exuda serenidad. El ¡°banquero de los pobres¡± (Chittagong, Banglad¨¦s, 82 a?os) recibe a EL PA?S minutos antes de encabezar un foro en celebraci¨®n de los 10 a?os en Colombia de una de las organizaciones que lidera, Yunus Social Business. Responde las preguntas mientras bebe un t¨¦, sin levantar la voz y con la misma suerte de despreocupaci¨®n con la que cuenta que no ha sentido que est¨¢ a 2.600 metros de altura. Esa tranquilidad contrasta con su visi¨®n de la actualidad y su aseveraci¨®n de que la humanidad est¨¢ cerca de la extinci¨®n, pero se explica en que prev¨¦ que viene un camino profundo en el sistema social y econ¨®mico que salvar¨¢ a la especie.
Pregunta. ?C¨®mo ve el mundo hoy?
Respuesta. El mundo nunca hab¨ªa estado tan en crisis. Antes de la pandemia pod¨ªamos decir que est¨¢bamos en crisis por el cambio clim¨¢tico y todo lo dem¨¢s. No ten¨ªamos idea de lo que nos esperaba. Y de repente cambia el mundo en el que viv¨ªamos. Por dos a?os o dos a?os y medio, la gente vive tras sus puertas, paran los negocios, la gente pierde sus empleos y mucha, mucha gente se empobrece. Y no es algo que le haya pasado al tercer mundo, o que sea un problema solo de algunos pa¨ªses. Es un problema del mundo entero. Entonces hubo una transici¨®n totalmente inesperada. Y luego vino la Guerra de Ucrania que transforma todav¨ªa m¨¢s al mundo, porque no hay una sola persona, oculta en alg¨²n lado, que no haya sufrido un impacto negativo. Y va a ser peor y peor.
P. Entonces es pesimista
R. Pues es que es la direcci¨®n en la que vamos. Muchos pa¨ªses se est¨¢n preparando para una hambruna, o ya la est¨¢n sufriendo. As¨ª que tenemos una pandemia, una hambruna, inflaci¨®n en todos lados, previsiones de una recesi¨®n y m¨¢s. Mientras tanto, los pa¨ªses se re¨²nen en la COP 27 y me pregunto: ?Van a discutir el cambio clim¨¢tico? Es un problema que ya no est¨¢ al frente, sino en la trasescena; antes de encararlo hay que hablar del elefante en la habitaci¨®n, de la guerra. Cada d¨ªa de guerra nos atrasa en el cambio clim¨¢tico, abre la puerta a combustibles f¨®siles. Se est¨¢n transfiriendo fotos del cambio clim¨¢tico a preparativos b¨¦licos, como me comentaba alguien conocedor de lo que est¨¢ ocurriendo en Alemania. As¨ª que la agenda de la COP 27 debi¨® ser c¨®mo parar la guerra. Entonces, seguimos en una direcci¨®n en la que el cambio clim¨¢tico nos va a destruir. Entonces, es una crisis existencial, una m¨¢s fuerte que antes.
P. ?Y le ve una salida?
R. S¨ª. Debemos sobrevivir, no hay otra opci¨®n aparte de entregarse. Afortunadamente, el ser humano no acostumbra a rendirse, siempre crea algo en una situaci¨®n desesperada. Eso es lo que necesitamos ahora. Un asunto que he discutido muchas veces, y sigo discutiendo, es que la civilizaci¨®n que tenemos est¨¢ dise?ada para el desastre, nos va a matar. El cambio clim¨¢tico es una expresi¨®n de eso, y esta civilizaci¨®n no tiene c¨®mo manejarlo. Hay teor¨ªas que debatimos con una taza de t¨¦, pero la casa se sigue quemando. Es que as¨ª no se apaga un incendio, hay que remangarse, dejar atr¨¢s todo lo dem¨¢s, y apagar el fuego. Y lo estamos hacienda como algo colateral, las compa?¨ªas contribuyen un poco, pero eso no basta, no es un asunto de hacer unas peque?as reparaciones. Mi conclusi¨®n es que la civilizaci¨®n actual es un barco que naufraga con la gente en ¨¦l. Debemos crear una nueva, debemos construir r¨¢pidamente un barco nuevo y zarpar.
P. ?Y c¨®mo es esa nueva civilizaci¨®n que vislumbra?
R. El gran problema de la vieja civilizaci¨®n es que olvidamos que somos seres humanos y nos convertimos en robots para producir dinero. La nueva civilizaci¨®n se debe basar en valores humanos como compartir, cuidar, todas las cosas buenas que solemos mencionar. Sin eso, no tenemos ning¨²n chance. Yo hablo de crear los tres ceros. El primero es cero cambio clim¨¢tico, que ser¨¢ la identidad de la nueva civilizaci¨®n. Es cero, no poco, no menos: cero. El segundo cero es el de la concentraci¨®n de la riqueza, porque hoy tenemos una m¨¢quina que lleva a que la riqueza se concentre en muy pocas manos, una situaci¨®n insostenible. Y el tercer cero es cero desempleo, porque tenemos un desempleo masivo y debemos construir un mundo en el que en lugar de buscar empleo, las personas sean emprendedoras. Siempre explico que los seres humanos nacemos como emprendedores, que tenemos una capacidad creativa que sirve para cambiar el mundo, y debemos desatarla. Se nos olvid¨® y parece que nacimos para una esclavitud, para trabajar para otros.
P. ?C¨®mo cambiar la civilizaci¨®n?
R. Yo invito a los j¨®venes a crear clubes de los tres ceros, en los que cada miembro decide que dejar¨¢ de contribuir al cambio clim¨¢tico con sus acciones. As¨ª pasamos de pensar en un problema macro, en el que cada persona no puede hacer nada, a uno en el que cada uno toma sus decisiones, deja de contribuir, y convence a otros con su ejemplo. Lo mismo con el desempleo, con la riqueza. As¨ª, t¨ªmidamente, cada uno se convierte en una persona de tres ceros, y luego no ser¨¢ un club de tres personas sino de 10. Despu¨¦s familias de tres ceros, comunidades de tres ceros¡ Ya tenemos m¨¢s de 500 clubes en 38 pa¨ªses, de personas que no conozco, no s¨¦ qu¨¦ idioma hablan. Todo eso no significa que dejemos de lado construir la estructura para que sea posible, pero este es el modelo que busco incentivar, tambi¨¦n para las empresas.
P. ?Y ve que ya est¨¢ ocurriendo? ?Hasta qu¨¦ punto?
R. Est¨¢ empezando. Eso fue lo que me trajo a Bogot¨¢, porque ?para qu¨¦ m¨¢s vine? Para que usted me haga esa pregunta porque o si no ?a qui¨¦n le importa? Tambi¨¦n tenemos muchas empresas sociales, que no buscan la riqueza sino mejorar el mundo. Demuestran que la esencia de la civilizaci¨®n no es crear dinero sino resolver los problemas. As¨ª que vamos avanzando.
P. Su idea evita la sensaci¨®n de incapacidad frente a los problemas, puede ayudar a empoderar frente a problemas tan grandes como el cambio clim¨¢tico, que es global.
R. Exactamente. Nuestra aproximaci¨®n es redise?ar la econom¨ªa, y en el centro de eso est¨¢n las empresas sociales. Son compa?¨ªas enfocadas al 100% en resolver un problema social o ambiental, no como las viejas compa?¨ªas que a veces buscan que el problema sea menos grave que el a?o anterior. Dan utilidades, pero se reinvierten para resolver m¨¢s problemas. As¨ª tambi¨¦n estamos empoderados, hay cosas concretas que podemos hacer. Usted puede y cualquiera puede, porque una empresa es algo que conocemos, que nos es m¨¢s cercano que pensar en cambios a trav¨¦s de la pol¨ªtica. Ese es un poder incre¨ªble para solucionar y es lo que estamos tratando de implementar en el mundo.
P. Pero ?por qu¨¦ hacer una compa?¨ªa social y no una tradicional?
R. Me lo preguntan, y me dicen que cu¨¢l es el retorno de hacerlo. Mi respuesta es muy sencilla. Se hace dinero para buscar la felicidad y a m¨¢s dinero, m¨¢s felicidad. Y puede ser, pero hacer feliz a otra gente es una s¨²per felicidad. La gente me responde que no lo sabe y les respondo que lo intenten para que lo descubran, como cuando se prueba una nueva comida. Cuando lo prueban, lo entienden y les encanta.
P. ?Y se avanza suficientemente r¨¢pido? Porque la hambruna, la guerra, el cambio clim¨¢tico nos afectan ahora.
R. Para eso estoy ac¨¢. Estuve en el palacio presidencial; aunque el presidente no estaba, orden¨® a sus ministros encontrarse conmigo. No a uno, a cinco, como Trabajo y Defensa. Y no unos minutos, porque hablamos durante cuatro horas, a fondo. Seguro podemos hacer cosas porque es un Gobierno reciente, que est¨¢ buscando ideas y est¨¢ interesado en esto. Yo no esperaba que el presidente me invitara a hablar con su gabinete. Es uno de los peque?os pasos que hay que dar para cambiar el mundo, porque eso no se logra de la noche a la ma?ana. As¨ª vamos, paso a paso; no tenemos la maquinaria, no somos una gran empresa, no somos un Gobierno para llegar con la idea de los tres ceros a todo el mundo.
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