M¨¢s precarios y desprotegidos: las paradojas tras el aumento del empleo en Colombia

El desempleo afecta al 12,7% de la poblaci¨®n activa colombiana, seg¨²n el reporte de enero confeccionado por el Departamento Administrativo Nacional de Estad¨ªstica (DANE). De lo anterior se deduce que hoy hay alrededor de 22,02 millones de personas empleadas y 3,1 millones que buscan trabajo. En su lectura anual hubo una reducci¨®n de un punto porcentual y la informalidad baj¨® dos puntos hasta ubicarse en 56,4%, pero a¨²n sigue englobando a 12 millones de ciudadanos. ...

El desempleo afecta al 12,7% de la poblaci¨®n activa colombiana, seg¨²n el reporte de enero confeccionado por el Departamento Administrativo Nacional de Estad¨ªstica (DANE). De lo anterior se deduce que hoy hay alrededor de 22,02 millones de personas empleadas y 3,1 millones que buscan trabajo. En su lectura anual hubo una reducci¨®n de un punto porcentual y la informalidad baj¨® dos puntos hasta ubicarse en 56,4%, pero a¨²n sigue englobando a 12 millones de ciudadanos. Los datos formales contin¨²an una tendencia positiva y, sin embargo, las perspectivas no son alentadoras.

Al hacer un zoom a las cifras se puede concluir que el descenso en varios de los indicadores se ha traducido en la adici¨®n de miles de puestos de trabajo marcados por la precariedad y la ausencia de protecci¨®n social. De hecho, los sobresaltos en las mediciones mes a mes hacen presagiar un repunte en el n¨²mero de desocupados en su lectura anual. La tasa de desempleo ya pas¨® de 10% en diciembre al 12,7% en enero en un comportamiento habitual y atribuible, en parte, al dinamismo de la actividad comercial de fin de a?o.

La econom¨ªa colombiana sigue destilando datos modestos y a veces contradictorios tras el sacud¨®n de la pandemia. Mauricio Salazar, economista y catedr¨¢tico de la Universidad Javeriana, detalla que en paralelo a la reducci¨®n del desempleo se ha visto un aumento en el n¨²mero de trabajadores que ganan entre cero pesos y un salario m¨ªnimo (un mill¨®n 300 mil pesos): ¡°En 2022 era el 44% y en 2023 subi¨® al 46%. Son cambios peque?os y probablemente normales en una econom¨ªa en proceso de desaceleraci¨®n, pero es interesante ver c¨®mo se va ampliando esa porci¨®n en sueldos que no son necesariamente productivos¡±.

La Asociaci¨®n Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) le ha hecho un seguimiento detallado al tema y ha evidenciado, al contrastar los ¨²ltimos trimestres de 2022 y 2023, que la informalidad, entendida como el n¨²mero de trabajadores que no contribuyen a salud ni pensiones, se ha mantenido pr¨¢cticamente inalterada en sectores como el agro: ¡°Pas¨® de 86,9% a 85,1%¡å, explica la investigadora Luz Magdalena Salas, ¡°esto se puede atribuir, por ejemplo, al aumento de jornaleros y peones que no reciben un contrato laboral formal y no cumplen con sus aportes de seguridad social¡±.

Se trata de un proceso de precarizaci¨®n que se ha acentuado con mayor encono en el comercio y la industria. De acuerdo con los an¨¢lisis de ANIF y las cifras del DANE, los empresarios han preferido, en general, recostar el aumento en los costos finales de sus productos en sus empleados antes que hacerlo sobre sus clientes. ¡°Nosotros hemos estudiado la transici¨®n en el n¨²mero y tipo de trabajadores que se contratan. Entre el 2019 y 2023 hemos visto un aumento en el n¨²mero de trabajadores de empresas unipersonales e independientes¡±, afirma Salas. La formalizaci¨®n en este tipo de peque?as empresas o negocios pas¨® de 20,8% al 9,6%. Esto hace que el dato en el aumento en la creaci¨®n de empleos sea en apariencia positivo, pero que mirado de cerca revista varios problemas.

Para la investigadora de ANIF se trata de un m¨¦todo para amortiguar las p¨¦rdidas en las utilidades de los ¨²ltimos trimestres del a?o. ¡°Despu¨¦s de un trimestre dando p¨¦rdidas, lo que muchos han hecho es dejar de contribuir a pensiones o salud. Incluso para las empresas de 2 a 5 empleados hemos visto que la forma de responder a la ca¨ªda de sus ventas no ha sido necesariamente despedir a sus trabajadores, sino m¨¢s bien mantenerlos dentro de unas condiciones m¨¢s precarias¡±. Otro factor que resulta alarmante para el profesor de Econom¨ªa de la Universidad de los Andes, Andr¨¦s ?lvarez, es el crecimiento desmedido del empleo en el sector p¨²blico.

Desde ya se habla en algunos casos de un incremento interanual del 300%: ¡°En principio hubo cr¨ªticas porque el Gobierno estaba subejecutando el presupuesto del a?o pasado. Pero a finales de a?o aceler¨® y mucho de su crecimiento en el gasto p¨²blico lo destin¨® al empleo de personas en el Estado¡±. Para ?lvarez es un elemento problem¨¢tico: ¡°Se trata de un gasto aut¨®nomo que no es sostenible a largo plazo. Por muchas razones. No se puede seguir incrementando el d¨¦ficit fiscal¡±.

Mauricio Salazar a?ade que el Gobierno Petro se ha mostrado muy agresivo a la hora de expandir el aparato estatal con ¡°burocracia y nuevas dependencias ministeriales. El Estado, que est¨¢ dentro del rengl¨®n de servicios administrativos y personales, particip¨® con un punto porcentual m¨¢s en empleo en 2023 que en 2022 y en el agregado sobresale como uno de los factores que ha explicado los n¨²meros globales de desempleo¡±. El aumento en el nivel de los salarios, por su parte, se ha mantenido a flote y en paralelo al alza de la inflaci¨®n. ¡°En la mayor¨ªa de sectores no hubo una ca¨ªda real del salario por hora, salvo para el comercio y las actividades inmobiliarias¡±, especifica Luz Magdalena Salas.

Al desgranar los datos tambi¨¦n se evidencia que los j¨®venes son los m¨¢s afectados con menores incrementos: ¡°Esto genera preocupaci¨®n sobre todo en el sector agr¨ªcola, donde a pesar de que el personal ocupado aument¨® en total 1,4%, el 82% son hombres, una brecha hist¨®rica que, en todo caso, muestra que los trabajos que se est¨¢n creando se est¨¢n yendo de forma desproporcionada hacia los hombres¡±. ?lvarez recuerda, en la misma l¨ªnea, que las ¡°mujeres est¨¢n saliendo cada vez m¨¢s al mercado laboral, pero como es tradicional para trabajos de baja remuneraci¨®n¡±.

El acad¨¦mico agrega que, a la espera de los datos de febrero, la p¨¦rdida de trabajos bien remunerados en miner¨ªa, industrias pesadas o el sector agr¨ªcola suele desencadenar en un ¡°bajo consumo, una percepci¨®n pesimista de los inversionistas y una disminuci¨®n sobre los ingresos promedio de todos los colombianos¡±. Y Luz Magdalena Salas concluye: ¡°No estamos hablando solo del tama?o de las empresas o del n¨²mero de puestos de trabajo creados, sino adem¨¢s de qu¨¦ tan protegidos est¨¢n los trabajadores en t¨¦rminos de salario, horarios, distancia para llegar al trabajo o prestaciones sociales¡±.

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